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Construcción

Samabaj

La ciudad de Samabaj. (Guatemala)

Samabaj

Localización geográfica/administrativa

Continente: América

Región: Mesoamérica

Ciudad(es) próxima(s): San Pedro la Laguna

Situación

País(es):  Guatemala

Subdivisión(es): Sololá

Municipio(s): San Pedro la laguna y alrededores.

Fecha construcción: 200 a.C.

Abandono o destrucción: 200 d.C.

Dimensiones del sitio

Longitud: 350 metros

Hace unos 2.000 años, al sur del lago, sobre una isla cercana al volcán Cerro de Oro, estuvo el sitio de Samabaj (14° 43′ 11” Norte; 91° 11′ 36.06” Oeste), rodeada por fallas de 80 m al sur y 100 al norte. El nivel del agua subió -al parecer en forma repentina- y la dejó sumergida a unos 17 metros de profundidad.

Estuvo ocupada en el Preclásico Tardío, entre los años 200 a. C. y 200 d. C., su pequeña superficie -400 metros de ancho por 350 de largo- indica se trató de una aldea. La asociación de estela y altar, típicamente maya, sugiere la etnia que la habitó.

El sitio está compuesto por una plaza ceremonial, con altares y estelas y tres grupos de estructuras:

Grupo 1: Definida por un basamento estructural, que por sus dimensiones se asocia a un patrón habitacional. Sus muros fueron realizados por piedras muy bien talladas.

Grupo 2: Conformada por ocho estructuras, las números 1 y 2 son paralelas, formando entre ellas un corredor. Al este de la Estructura 1 se encuentra una estela lisa de 1,20 m de largo por 60 cm de ancho.

Grupo 3: Es la estructura más grande, posee una escalinata y está fuera del contexto habitacional.

El Instituto de Antropología e Historia (IDAEH) de Guatemala, está a cargo del estudio del sitio; Sonia Medrano, arqueóloga encargada del proyecto iniciado en el año 2.008, nos cuenta:

“El sitio estaba construido sobre una elevación cortada en terrazas”.”Tenemos seis estelas y cuatro altares ubicados en este momento y sin duda hay más, lo que quiere decir que el sitio era extremadamente importante desde un punto de vista espiritual”. “Las vasijas y la estela lisa encontrada determinan que el sitio corresponde al Período Preclásico Maya”.

La Presencia de un asentamiento maya en el “lago más bello del mundo”, es quizá, lo único que le faltaba a Atitlán, pues, además de ser única en Mesoamérica (y posiblemente en América), es un gran aspecto turístico y cultural.

Teorías del hundimiento de la “Atlántida maya”

  Una repentina inundación, que pudo haber sido provocada por una tormenta.

  Una erupción volcánica que hizo que el agua subiera

  Un deslave o terremoto gigantesco, que pudo haber subido la marea. 2

Esta ciudad o enclave sumergido bajo el agua se encuentra en el lago Atitlán en Guatemala, fue descubierta en el año 1.994 por Roberto Samayoa  Asmus, en una de sus inmersiones encontró primero una vasija, ajuares, más tarde una especie de grada, al palpar con la mano, se percató que el relieve de la piedra que estaba tocando era totalmente plano, después que hacia escalón, por lo que en principio creyó se trataba de la escalinata de una pirámide Maya, finalmente ya encontró pruebas evidentes de la existencia de un poblado en el fondo del lago.

Con esta información acudió en 1.998 al instituto de antropología e historia  para compartir su descubrimiento, al principio dice que no le creyeron.   El caso es que el hallazgo fue inscrito  oficialmente en el año 2.001 en el estado de Sololá.  El nuevo sitio fue  nombrado Samabaj, por una combinación de su apellido y un nombre maya que significa ” de piedra”.

Este enclave sumergido data de hace unos 2.000 años aproximadamente, era una isla en el lago, la atravesaba un canal, se encuentra al Sur del lago, frente a las faldas del volcán Santiago, el lago esta rodeado por tres volcanes ( Tolimán, Atitlán y Santiago) .

Tras los primeros descubrimientos por parte de Roberto Samayoa, se realizaron unos estudios a principios de los 90, pero por falta de presupuesto no se continuó.

Se retomaron ya en el año 2.008, de Mayo de 2.008 a Junio 2.009, se realizó un mapeo  de estructuras, su formación y distribución y se constato la existencia de muros y sitios de cultivo y esta formado por una plaza ceremonial y tres bloques domiciliares, estos estudios ocuparon 400m2, aquí se han encontrado piezas antiguas, glifos, y cerámicas posiblemente precolombinas.

Sus habitantes pertenecían al periodo Preclásico Tardío, que abarco del 400 a.C al 100 d.C, este es uno de los poblados donde empezó a surgir la civilización Maya. La isla se hundió en torno al año 200 – 250 d.C, por una erupción volcánica o por un corrimiento de tierras el nivel del lago ascendió 30 metros, quedando sumergida en su totalidad a 15 metros de profundidad, en ella se han descubierto varias estructuras, en concreto 6 monumentos ceremoniales, 4 altares y sin duda hay más, parece ser que fue un lugar muy importante desde el punto de vista ceremonial.

Una hipótesis que se maneja, es que la isla fue un lugar de peregrinación de gran importancia para las poblaciones Mayas.    Según los investigadores, el hallazgo de piezas intactas les ha llevado a creer que la catástrofe que engulló la isla fué un evento “súbito, pero no violento”.

Los mayas erigieron altas pirámides, y elaborados palacios en Centroamérica y el sur de México antes de abandonar misteriosamente sus ciudades cerca del año 900.

Señalar que las primeras investigaciones  8 en los 90) se realizaron gracias al apoyo del arqueólogo Henry Benítez.  Los posteriores estudios fueron a cargo del Instituto de Antropología e Historia (IDAEH), con el apoyo de la fundación Reinhan,el director de patrimonio cultural, Enric Ponciano, considera que es de vital importancia  retomar las investigaciones, “ya que en ocasiones no se cuenta con fondos para dar seguimiento a estos hallazgos y se quedan tirados”.

Los premios “Ford Motor Company para el ambiente” entregaron en Junio de 2.010, un premio en metálico a los descubridores de esta ciudad sumergida, este premio contribuirá a continuar las costosas investigaciones ya que, al ser zina volcánica las estructuras están cubiertas por cenizas y es necesario el aspirarlas y extraerlas para evitar contaminaciones en el ya maltrecho lago.

Esta es toda la información que se puede aportar sobre este reciente hallazgo, de todas formas existe un video de la arqueóloga de la Universidad San Carlos de Guatemala, Sonia Medrano, detallando los últimos descubrimientos.

Hallazgos

Fue en el 2008 cuando comenzó la investigación científica del sitio y, después de cuatro años de trabajo, se han identificado 18 monumentos, entre altares y estelas.

La Estela 1, en piedra de basalto, es la más notoria porque es la única hallada de pie. Además, se han identificado grupos habitacionales de distintos tamaños, con cúpulas talladas en piedras naturales in situ.

Medrano considera que funcionaban como espejos que se llenaban de agua para observar el cielo y medir el tiempo. Se incluyen baños de vapor y una plaza cerrada.

Los hallazgos más recientes dan cuenta de cuatro muelles construidos alrededor de la isla, a base de piedras apiladas, lo cual indica que era para que los visitantes pudieran abordar sin problemas.

Al parecer, el colapso del sitio no significó el fin de este poblado. Alrededor del Lago se han encontrado hasta 17 lugares con evidencias arqueológicas posteriores.

Los pueblos alrededor del Lago guardan historias acerca de un mítico lugar. Medrano las ha recopilado, además de numerosos datos y, junto con las imágenes de Samayoa, forman parte del libro Arqueología Subacuática, editado por Oswaldo Chinchilla y el Museo Popol Vuh.

 Descubrimiento y conservación

“Cada pieza es parte de un rompecabezas”

Después de haber buceado por más de 25 años en  el Lago de Atitlán, Roberto Samayoa Asmus contó que ha recorrido cada palmo de este espacio, con paciencia. “Puedo decir que conozco sus partes íntimas”, afirmó, con orgullo.

Refirió que desde que era pequeño el Lago ejercía en él una especie de embrujo, en donde se preguntaba “qué aconteció en este lugar tan mágico”.

Aseguró que hace 10 años la claridad del agua era perfecta. “Tenía una visibilidad de hasta  40 pies bajo agua, era como un jardín”.

  Bucear en Atitlán, por su altitud, demanda destreza, ya que para los arqueólogos solo es posible sumergirse  media hora, un máximo de dos veces diarias y sin excederse  más de cinco días seguidos.

Según Samayoa, cada hallazgo ha sido una aventura diferente,  donde su vida ha estado de por medio, de allí que se requiere cierta estabilidad emocional para estar bajo el agua.

Indicó  que ahora  ya no bucea, por el deterioro en la calidad del agua. Además advirtió de una serie de peligros que acechan al Lago, como la pesca artesanal, donde los pescadores tiran una piedra con un largo  hilo que a su paso arrastran por el fondo para agarrar cangrejos. Esto ha roto muchas vasijas que aún estaban en el cieno.

También teme por la depredación del sitio, ya que hay gente que acecha  los alrededores para buscar piezas.

Samayoa quiere  que el sitio sea declarado área protegida, pues permitiría una normativa que regule el flujo de visitantes, que haya guías y recorridos subacuáticos.  

“Cada pieza es parte de un rompecabezas”, dijo, por lo cual cada una que se pierde causa un gran daño.

CRONOLOGÍA

200 – 300 D.C. Vasijas  

Las vasijas encontradas en Samabaj han permitido fechar el apogeo del  sitio entre el Preclásico Tardío y Terminal. Se han hallado semejanzas con  piezas de Kaminal Juyú.

350 d.c. Final 

Esta es la última fecha de la cual se ha encontrado material cerámico en el sitio.

1998  Registro

Roberto Samayoa inscribió el sitio, descubierto en 1996, en el Instituto de Antropología e Historia. La investigación arqueológica  empezó en el 2008. Roberto construyó un museo en Panajachel con todas las piezas halladas en Samabaj (Foto: Archivo)

 

 

 

 

 

 

 

 

Listoghil

Listoghil

Cerca del Túmulo de West Kennet se encuentra Listoghil, en Irlanda, estructura que se posiciona como octava en la lista de edificios más antiguos del mundo. Data del año 3550 antes de Cristo y se incluye dentro del grupo de tumbas prehistóricas de Carrowmore.

Listoghil (irlandés: un teagail de Lios) es el gran monumento central en the Carrowmore conjunto de tumbas prehistóricas en el Condado de Sligo en Irlanda. Fue numerada como Carrowmore 51 por George Petrie en 1837 y esta designación todavía se utiliza. Aunque el distrito de Cuil Irra, está lleno de leyendas, Listoghil nunca se ha conectado satisfactoriamente con las antiguas leyendas de la manera que dicen Newgrange. Anticuarios en el siglo XIX hacía referencias a otro cairn en Leacharail, pero nunca se ha ubicado el sitio de esta.

Listoghil [SL014-209022-] [166242/333452], también designado Carrowmore 51, es un monumento nacional situado a 3 km al oeste de la ciudad de Sligo, en el centro de la península de Cúil Irra en Carrowmore Td. Sligo, Irlanda (Figura 1). Es el monumento central en el complejo de la tumba del paso de Carrowmore (figura 2); Aproximadamente 30 tumbas de satélite lo rodean a distancias de hasta 0,5 km. El complejo de Carrowmore se extiende a lo largo de dos crestas que discurren hacia el este-oeste, como una espina dorsal en la península. La tierra cae al mar a ambos lados. Listoghil ocupa la posición más alta de la más septentrional de éstos, c. 59 m sobre el nivel del mar. El monumento sirve hoy como punto de referencia; Que domina el centro de visitantes y los monumentos circundantes. La cámara en su corazón está abierta al aire, y accesible a través de un paso de gaviones. La cubierta de cairn (y el paso) es una reconstrucción terminada por la oficina de trabajos públicos en 2004.

El monumento de Listoghil está sobre una plataforma artificial de tierra. La plataforma, intencionalmente o de otro modo, proporcionó una superficie de trabajo nivelada para los constructores de megalitos. También creó una especie de pasarela elevada que se extiende unos 8 metros desde la base del monumento. Desde su punto más alto (norte-oeste), la plataforma se ubica al sureste, donde se extiende hacia una suave pendiente. Dibujada como un círculo, la plataforma sería de unos 48 m de diámetro. En la sección de evaluación de su informe preliminar (un informe final sigue en pie), Burenhult propuso una serie de etapas de construcción, comenzando con la remoción del césped contemporáneo y la capa superficial del suelo antes de comenzar el proceso de construcción (1998a).

El paisaje que rodea a Carrowmore tiene el carácter de un tazón de fuente rodeado por las colinas y las gamas bajas de la montaña, muchos de los cuales llevan las tumbas del paso. A cuatro kilómetros al oeste se encuentra la montaña de Knocknarea (330 m) con Miosgán Meadhbha (el cementerio de la reina Meadbh) en su cumbre, una memorable combinación de monumento artificial y montaña que domina visualmente la península y sus tierras. Bergh coloca el primero de tres episodios en la historia neolítica de Knocknarea en un período de tiempo antes de que el cairn de la reina Meadbh fuera construido. En ese contexto,

Seis kilómetros al sureste de Listoghil, las colinas metamórficas de la cordillera de Ballygawley forman una barrera física entre la península de Cúil Irra y el continente. En común con un número de otros sitios en las montañas del buey, notablemente Croghaun y Doomore, se señalan por las tumbas del paso de la colina-alto. El complejo de la tumba del paso de Carrowkeel miente 22 kilómetros sur-sureste y goza de intervisibilidad con Listoghil.

Según Petrie (carta a Larcom, agosto de 1837), el nombre puede significar ‘Ryefort’ (aparece como Lios un ‘tSeagail, seagail centeno de significado en irlandés, en mapas tempranos). Sin embargo lios en irlandés se refiere generalmente a una corte o el área cerrada, así que puede ser que el nombre refirió originalmente a la zona delimitada por los dólmenes, en que Listoghil se encuentra, en lugar de lo cairn sí mismo.

Listoghil desde el noroeste con una tumba de pequeños satélites, tumba 52, en el primero plano

Listoghil está a 59 m sobre el nivel del mar en el centro geográfico de la península de Cúil Irra, c.3 km de la ciudad de Sligo. Cerca del punto más alto en el complejo, a lo largo de una cresta baja, actúa como el foco de la tumba Carrowmore complejo. [1] al oeste se encuentra Knocknarea en Miosgán Médhbh y al este los dos gran cairns en colina de Cairns.

Está rodeada – y en general, frente a – por un grupo de ‘círculos de dolmen’, clasificado como tumbas de paso por los arqueólogos. A diferencia de estas cámaras descubiertas, el monumento central parece haber tenido un cairn o cubierta de montículos de piedras. También es mucho más grande que sus satélites, siendo aproximadamente de 34 m de diámetro, la media de satélites cerca de 15 m. El cairn cerca en Knocknarea, es dos veces el diámetro y está a unos 10 m de altura.

La cámara central en Listoghil

Escritos de Charles Elcock desde la década de 1880 describen a obreros quitando las piedras para ‘rocalla’. Sólo cuando los canteros descubrieron la cámara de la tumba en medio del montón hizo su final destrucción. A finales del siglo XIX la tumba había sido investigada por anticuarios de la época que registra encontrar ‘los huesos de los caballos’, socarrado de madera y una cabeza de lanza de sílex trabajado. Algunos materiales de esta tumba son de la colección del castillo de Alnwick [2]

En lo finales del decenio de 1990 Goran Burenhult, el arqueólogo sueco, excavado en parte Listoghil. Fecha material hueso y carbón y expone la acera aún intacto. El monumento fue restaurado posteriormente por la oficina de obras públicas. Listoghil ahora se compone de 4 m altura, cairn de 34 m de diámetro. Acceso a la cámara central – a través de una vía artificial de 13 m de gaviones – es posible. La cámara en el centro del montículo es una estructura dolmen, con 6 orthostats. Una losa de piedra caliza único – inclinada a 6,1 ° – coronas de la cámara. Un raro ejemplo del arte megalítico irlandés fuera el valle de Boyne, que consiste en tallas circulares concéntricas, puede verse en la parte delantera de la losa de azotea (esto es visible sólo en ciertas condiciones de iluminación). Un símbolo descrito por Julian Cope como ‘un tryfuss extrañamente distorsionada’ ha sido tallado en una piedra dentro.

Hueso y carbón material de Listoghil era carbón fechado a aproximadamente 3500 AC. [3] los huesos humanos encontraron que allí eran una mezcla de huesos incinerados y no incinerados; las tumbas más viejas, más pequeñas alrededor de él contienen generalmente huesos quemados. Evidencia de alguna actividad anterior en el sitio – material de carbono calibrado a alrededor de 6100 años – fue encontrado por el arqueólogo sueco que había excavado Listoghil. Gran quema ocurrió en el área del sitio antes de que la cámara se erigió.Alignment

Listoghil se apunta a una baja formación de silla de montar en las montañas de Ballygawley, 6.5 km a la east-southeast. Salida del sol en esta posición coincide con el inicio y el final del invierno, que son tradicionalmente importantes festivales estacionales del calendario gaélico. Esto sucede el 31 de octubre y el 10 de febrero de nuestro calendario moderno, fechas que no coinciden exactamente con un barrio de la cruz astronómica moderna. Pero coincide la alineación con el eje de la cámara y la iluminación de la cámara por la luz solar al día con la de otra tumba neolítica, el montículo de los rehenes en el corazón de la Tara complejo. [4]

Plano que muestra Listoghil en relación con sitios cercanos, desde “Rude Stone Monuments” a través de archive.org

Listoghil es la tumba 51. Es la única tumba aquí para tener un cairn que lo cubre. Su excavación ha arrojado algunas cuestiones serias que son muy interesantes.

El cairn tiene una acera compuesta de 107 piedras y tiene unos 32 m de diámetro. Esta acera podría ser anterior a la cámara funeraria. La cámara se erigió en el lugar más alto y más central de la meseta. La mayoría de las otras tumbas parecen apuntar hacia este lugar, dando a la ubicación un significado masivo. Esto no significa que la tumba fue el foco, ya que esto es mucho más reciente que la actividad original en este lugar.

Debajo de la tumba hay un lecho de arcilla / morena que fue colocado en un gran pozo redonda excavado a propósito para contener la sustancia. Esto parece haber sido utilizado como una ubicación de pira funeraria en muchos ocasiones.

La tumba, para mí, parece ser una estructura posterior, tal vez erigida por una fuerza invasora para reclamar y contaminar el centro sagrado de los antiguos habitantes. Cuando dije esto me dijeron que una traducción posible de Listoghil es “el fuerte del derrocamiento”.

La cámara es muy diferente a cualquier otra cosa en Carrowmore. Parece ser más una tumba protocunal que cualquier otra cosa. Ocho piedras grandes forman las paredes y una losa grande cubre toda el área. Algunas excavaciones extrañas bajo el cairn fueron interpretadas por los excavadores como posibles señales de una estructura anterior.

No es posible llegar a la tumba ahora mismo, pero una galería de observación ha sido erigida para que pueda mirar hacia abajo sobre ella. Es una de las únicas estructuras talladas en Sligo, con un motivo wave-like en el borde delantero de la capstone y un ‘Om’-como la talla en el interior del doorstone.

Plano del complejo de la tumba del paso de Carrowmore

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Mingun Pahtodawgyi

Mingun Pahtodawgyi

A la orilla del rio Ayeyarwady, muy cerca de la ciudad de Mandalay se encuentra el pueblo de Mingun famoso por sus ruinas y monumentos. Punto de interés y visita obligada al recorrer el triángulo turístico de Ava, Sagaing, Mingun y Amarapura.

Mingun

Información de la zona arqueológica de Mingun

El pueblo de Mingun, también llamado Min Kun, tiene su principal atractivo en la denominada zona arqueológica de Mingun situada al norte del pueblo de Mingun junto a la orilla del rio Ayeyarwady. En apenas 1 kilómetro podemos contemplar la estupa incompleta Mingun Pahtodawgyi, la pagoda Hsinbyume, la enorme campana de Mingun y las estátuas Chinthes (guardianes mitad león y mitad dragón) en el lugar donde amarran los barcos.

Mingun Pahtodawgyi: la estupa incompleta de Mingun

La estupa incompleta Mingun Pahtodawgyi

Sin lugar a dudas lo que más llama la atención de Mingun es la enorme estupa incompleta rajada por las consecuencias de los terremotos de antaño, esta estupa incompleta se llama Mingun Pahtodawgyi, también llamada estupa Mingun Paya y pagoda Mantara Gyi. La construcción de este monumento comenzó en el año 1790, dice la leyenda que se ralentizaron los trabajos de construcción en el proyecto debido a la creencia que una vez completada la estupa el imperio Birmano desaparecería. Sin embargo los historiadores apuntan al hecho de que este proyecto no era muy popular debido al uso de mano de obra esclava y prisioneros de guerra a gran escala, lo que provocaba la falta de fuerza de trabajo en otras áreas de la zona. Finalmente tras la muerte del rey Bodawpaya en el año 1819 el proyecto se canceló.

Pagoda Mingun Paya

La estupa Mingun Pahtodawgyi era un proyecto muy ambicioso, casi tanto como el ego del rey Bodawpaya, pretendía ser una estupa de 150 metros de altura y 210 metros de ancho lo que rivalizaría con las pirámides de Egipto. Actualmente el monumento se encuentra tal y como se dejó incompleto en el siglo XIX, finalizado en una tercera parte con 50 metros de altura y 72 metros de ancho. Aunque incompleta, la estupa Mingun Pahtodawgyi ostenta el record mundial de ser la mayor pila de ladrillos del mundo.

Pagoda Mingun Mantara Gyi

Además de la impresionante magnitud de la estupa Mingun Pahtodawgyi, lo más llamativo son las enormes grietas causadas por el terremoto del 23 de Marzo de 1839, a lo que se sumaron posteriores daños en las escaleras que suben a la cima provocados por el terremoto de Noviembre de 2012.

Grietas en la estupa incompleta de Mingun (Myanmar)

Hace unos años era posible subir hasta lo alto de la estupa Mingun Pahtodawgyi por unas escaleras situadas en el margen derecho de la estructura, pero debido a los daños causados por el terremoto del año 2012, está totalmente prohibido ascender hasta la cumbre por motivos de seguridad, desde donde dicen, las vistas son espectaculares del rio Ayeyarwady, las enormes estátuas Chinthes y la ciudad de Mandalay en la lejanía.

Escaleras para subir a lo alto de la estupa Mingun Pahtodawgyi

En la actualidad la estupa Mingun Pahtodawgyi es un monumento más que un lugar de culto religioso, aunque para aquellos visitantes que quieran acceder a su interior, pueden visitar la pequeña capilla que se accede cruzando la puerta principal en color blanco.

El estado del templo es tremendo. Y no sólo por estar inacabado, sino por las consecuencias de un gran terremoto en 1839 y la dejadez del gobierno actual.

Altar en el interior de la estupa Mingun Pahtodawgyi

La campana de Mingun

La impresionante estupa de Mingun Pahtodawgyi fue visionada por el rey Bodawpaya con una enorme campana instalada en lo más alto. En el año 1808 el rey ordenó la construcción de la campana de Mingun, cuya construcción duró 2 años. La campana realizada en bronce mide 3.7 metros de altura, pesa 90 toneladas y se trata de la mayor campana del mundo en funcionamiento* y la segunda campana más grande del mundo.

*Aunque la campana de Kremlin de Moscu es más grande, no computa para el record debido a que está rajada y no es operativa.

Una vez terminada la construcción de la campana de Mingun, el rey ordenó ejecutar al maestro artesano para que de esta forma, no pudiera realizar otra obra similar.

Historia de la campana de Mingun

A día de hoy es posible agacharse y acceder al interior de la campana para apreciar el trabajo desde el interior, ya que no dispone de ningún mecanisno interno para hacer sonar la campana, sino que es necesario golpear la cara exterior de la campana de Mingun para hacerla funcionar.

Recinto de la campana de Mingun

El pabellón que aloja la campana está situado a escasos metros al norte de la estupa Mingun.

Pabellón de la campana de Mingun

 

 

 

Monte d’Accoddi en Cerdeña

Santuario del Monte d’Accoddi en Cerdeña.

La cuarta edificación más antigua de la historia —según los investigadores— se encuentra en Italia y la época de su construcción oscila entre los años 3650 y 4000 antes de Cristo.

Monte d’Accoddi es un sitio arqueológico en el norte de Cerdeña, Italia, situado en el territorio de Sassari, cerca de Porto Torres. Allí se ha descubierto en 1954 una estructura con forma de pirámide escalonada (zigurat) fechada del 4.000-3.650 AEC.

Para llegar sólo tenéis que recorrer la SS131 que desde Porto Torres llega hasta Sassari, girar a la derecha y seguir las indicaciones para el aparcamiento.

Construido en el 2700 a.C., este misterioso monumento es único en el mundo, de hecho, a diferencia de los otros zigurat mesopotámicos realizados con argilla y destruidos completamente con el tiempo, este altar de piedra ha sobrevivido hasta nuestros días.

La estructura, de casi 6 metros de altura, albergaba inicialmente un templo que a causa del color ocre de sus paredes se llamaba “el templo rojo” (3000 a.C.).

Se trata de una estructura piramidal escalonada de 3 niveles accesible a través de una rampa, de una altura de aprox. 5,5 m. Está construida con grandes bloques de piedra de cada lado y rellenada con tierra y piedras.

Este tipo de construcciones es típicamente de Mesopotamia, por lo que resulta llamativo encontrarla en Cerdeña. Es considerada el único zigurat de Europa.

Se presume que, además de haber servido como un altar, pudo haber tenido una función de observación astronómica, ya que su planta cuadrada está alineada con los puntos cardinales.

El monumento fue excavado en la década de 1950 por CONTU E. Es un bifásico construido, pyramidenförmige Estructura de 36 × 29 m, construido grande dura tallada piedra, llena de otros materiales con 9 m de ancho y rampa larga de 41,8 m que conduce a la plataforma superior.

Al principio había una única rampa hacia la parte superior de la plataforma en la que se encontraba el edificio del templo propiamente dicho del cual hoy solo quedan rastros en el suelo. Luego se erigieron más niveles en cuya terraza superior se ubicó un nuevo templo (probablemente el original haya sido destruido en un incendio).

Este primer santuario, que del atrasado Neolítico Ozieri-Kultur Es asociado, fue parcialmente cubierto por la primera rampa. La rampa de la primera pirámide terminó en una amplia plataforma en la cual estaba parado un edificio rectangular de 5 × 15 m, que representa el centro del culto. Sólo el perímetro de un aproximadamente 70 cm alto de la pared recibió la estructura pintada rojo enyesada. Acceso estaba flanqueado por dos agujeros de poste. La excavación reveló que la primera pirámide y sus templos por el fuego fueron destruidos. Después de todo de tierra y capas de piedra cubiertas, era mayor de lo previamente construido la pirámide y la rampa y varios metros por encima de los antiguos construyeron un nuevo lugar de culto.

Hay cinco fechas de C14 de Monte d’ Accoddi. Dos son de la planta del primer templo (3020 y 2970 BC) y dos poco más joven de la tierra al monumento. La quinta muestra proviene de una capa que se acumuló alrededor del monumento durante la segunda fase (2590 A.C.).

La segunda pirámide permaneció durante el Calcolítico en uso como reliquias del documento, que fueron encontradas en las chozas, que eran cerca de la base de la pirámide. Los artefactos incluyen el Kulturen von Abealzu-Filigosa, de Monte-Claro-Kultur un Glockenbecherkultur. Während der Bonnanaro-Kultur, in der frühen Bronzezeit, (Al final de los 3. Al principio del segundo milenio), la pirámide ya no estaba en uso. Desde este momento, sólo el entierro de un niño en una esquina de la parte superior de la pirámide fue encontrado.

Cerca del monumento, además del altar hay otros artefactos pre-nurágicos como dos grandes piedras calcáreas que representan el sol y la luna, un dolmen calcáreo de 8,2 toneladas de unos tres metros por tres, utilizado quizás como mesa para las ofrendas o para ritos de sacrificios y en el lado opuesto un menir también calcáreo de 4,40 metros de altura y 5,7 toneladas de peso, y es el más grande de Cerdeña después del hallado en la Villa Sant’Antonio en Arborea.

También se ha hallado una estela de con la representación de una mujer, posiblemente la diosa madre símbolo de la fertilidad que se encuentra en la actualidad en el museo de Sanna de Sassari.
El altar sagrado de Monte d’Accoddi es el único ejemplo de altar megalítico descubierto hasta ahora en el Mediterráneo occidental.

Parece claro el carácter religioso del conjunto en un esfuerzo de acercar lo humano a lo divino, cosa por otra parte muy común en las culturas megalíticas europeas. (LMTC)

Como se puede apreciar en las fotografías el yacimiento es excepcional y la verdad que es poco conocido o divulgado posiblemente al encontrarse en Cerdeña una pequeña isla del Mediterráneo pero que al igual que en otras islas cercanas; como Menorca, Córcega etc., se desarrollaron culturas muy interesantes y adelantadas en conocimientos y tecnología a las continentales. Las últimas fotografías son la posible reconstrucción del yacimiento. (LMTC)

Dicho altar sacrificial y ofrendal fue usado en la IIa Guerra Mundial por los alemanes por su posición estratégica alrededor de Sassari y Alghero. Su visita gratuita es recomendable ya que el altar es imponente. Se pueden distinguir perfectamente el altar sacrifical, el de ofrenda, la entrada sur masculina y la norte femenina, la piedra del sol masculina y la piedra luna femenina.

Fases de la construcción

El sitio fue abandonado como lugar de culto alrededor de 1.800 AEC, cuando en Cerdeña comenzó a difundirse una nueva cultura, la de “Bonnanaro” dedicada a los rituales relacionados con los nuraga.

Restituzione grafica dell’altare-terrazza a gradoni di Monte d’Accoddi successivo al tempio precedente inglobato al suo interno (dis. Francesco Corni).

El área se ve rodeada por varios elementos pétreos que tendrían una simbología sagrada. Atravesando la rampa hay un menhir de gran tamaño, una de las varias piedras verticales que se han encontrado en las proximidades.

Mitad del perfil de la segunda pirámide fue reconstruido y la otra mitad queda en el estado.

Penúltima foto: fragmento de cerámica con escena grabada de danza -una de las primeras representaciones humanas del neolítico en Cerdeña-, cuarto milenio aC, Museo Archaeológico G. Sanna, Sassari

Ídolo femenino del Monte Accoddi, tercer milenio aC, Museo Archaeologico Nazionale, Cagliari

Se trata de un altar tronco-piramidal o escalonado, a cuya terraza superior se accede por una rampa.

Sin embargo, no se trata de ninguna base de templo -como un zigurat- ni menos de un monumento funerario -como las pirámides escalonadas egipcias-, sino de la base de un altar (altar hoy desaparecido).

El monumento comprende un primer altar, de adobe pintado de rojo, que fue recubierto por un monumento escalonado de mayor tamaño, construido con piedras ciclópeas. El aspecto actual es fruto de una restauración parcial (que afecta el lado izquierdo del primer piso) llevada a cabo en los años ochenta, y que hoy no sería posible.

Se ha interpretado, sin evidencias textuales, como un altar dedicado al culto a una diosa-madre, cuya imagen fue hallada (se trata, sin duda, de una ofrenda), cuando el cultivo de los campos, utilizado por diversas comunidades.

El altar se hallaría en medio de poblados dispersos, cuyos restos no se han excavado aun. La existencia de éstos se supone gracias a un gran número de tumbas, excavadas en la roca, cercanas, que testimonian de la presencia de varios grupos humanos en las cercanías.
Junto con el supuesto altar en la cumbre, el monumento se rodea de varios altares en la base, dominados por altos monolitos o menhires, que se interpretan como representaciones divinas.

Menhir

Cerca de la esquina sur-oriental del monumento hay un dolmen/altar de sacrificios.

Altar

Se excavaron los cimientos de varias estructuras pequeñas (posiblemente residenciales) y se hallaron varias piedras con raros tallados, siendo el más llamativo una gran roca en forma de huevo u “omphalos” (ombligo en griego).

Roca tallada en forma de huevo

 

 

 

 

 

 

Bastida de les Alcusses

Poblado íbero de la Bastida de les Alcusses

Coordenadas: 38°48′53.18″N 0°48′01.90″O (mapa)

El Bouet de Bastida, imagen del yacimiento.

El poblado íbero de La Bastida de les Alcusses es un asentamiento del siglo IV a. C. ubicado en el extremo suroeste de la Serra Grossa.1 Está situado en el término de Mogente (provincia de Valencia, España), en la cumbre de un cerro alargado y aislado, a 741 m sobre el nivel del mar. Se accede por la carretera CV-652 Moixent-Fontanars, con acceso señalizado en el km 10,5. Se puede subir en vehículo hasta el aparcamiento del poblado.

Reproducción ideal del yacimiento.

El yacimiento, situado sobre una loma, ocupa una extensión de 650 m de longitud y unos 150 m de anchura. Está a más de 720 m sobre el nivel del mar, y a unos 200 m por encima de las tierras circundantes del Pla de les Alcusses, que es una pequeña meseta elevada por la que se accede y de la cual recibe el nombre. Está considerado como uno de los principales poblados ibéricos de la Comunidad Valenciana.

El entorno actual del yacimiento es un espacio forestal, con bosque de pino y matorral mediterráneo bajo. Y aunque el cultivo actual de frutales y cereales en el llano ha transformado muchas parcelas, todavía se puede apreciar un paisaje marcado, fundamentalmente, por el ritmo tradicional de las labores agrícolas al no existir un fuerte impacto de construcciones modernas.

Historia de la investigación

Desde 1909 se conocía la existencia del yacimiento, descubierto por Luis Tortosa, pero las primeras excavaciones arqueológicas en este yacimiento no empezaron hasta 1928, a propuesta del recién creado Servicio de Investigación Prehistórica y Museo de Prehistoria de la Diputación de Valencia. Debido al buen estado de conservación se consideró un buen punto de partida para iniciar las investigaciones del Museo, y entre 1928 y 1931 se realizaron cuatro campañas de excavación enormemente fructíferas.

Se descubrieron 250 departamentos y se hallaron piezas muy destacadas como el conocido Guerrero de Mogente, pequeñas planchas de plomo escritas en ibérico, armas o adornos que comenzaron a dar justa fama al yacimiento. Hasta tal punto fueron destacables aquellas excavaciones y sus resultados que la prensa llegó a denominar el yacimiento como la “nueva Pompeya”.

Excavaciones en Bastida de les Alcusses de 1928

Durante aquellos cuatro años se excavó solo una mínima parte del poblado. Desde 1990 el Museo de Prehistoria de Valencia ha retomado los trabajos en el yacimiento con un proyecto de excavaciones, puesta en valor y actividades didácticas. Hoy en día el yacimiento puede ser visitado y cuenta con un servicio de guías.

Un importante documento es la inscripción sobre plomo, de 180 x 40 mm, con 1 mm de grosor, hallado en las excavaciones de 1928 en el departamento 48, enrollado bajo una piedra de molino. La lámina está escrita por las dos caras en escritura ibérica suroriental (también conocida como meridional) y es aparentemente un documento contable que contiene fundamentalmente registros con nombres de personas asociados a cantidades, algunos de los cuales aparecen cancelados.

Cara A del plomo de La Bastida de las Alcuses

El sistema defensivo

La Bastida es un poblado de 3’5 hectáreas con una muralla de más de tres metros de anchura en las zonas más accesibles, y por tanto más vulnerables. Además hay dos torres adosadas a la muralla para mejorar la defensa. Existe otro recinto más estrecho situado en la parte más accesible del poblado, en la zona oriental, que está inacabado y que debió realizarse para reforzar el control de los accesos. Este segundo recinto define un espacio de 1,5 hectáreas.

Cuatro puertas daban acceso al poblado. Hay tres puertas en el sector occidental y una en el extremo oriental. Todas ellas son construcciones cerradas por su parte superior y con bancos corridos en los laterales, posiblemente como puestos de guardia o espacios para el control de mercancías.

Muralla y Puerta Oeste del poblado

Estas construcciones protegían los dos batientes de madera, que estaban formados por varias tablas unidas por pletinas de hierro. La anchura de los accesos oscila entre los 150 cm de la Puerta Este y los 250 cm de las puertas Norte, Oeste y Sur. Dos de ellas, la Puerta Norte y la Sur estaban tapiadas en el momento de la destrucción del poblado. Tanto las puertas como la muralla conservan actualmente un zócalo de mampostería, pero en su día el alzado estaba hecho de adobes. Además, un adarve permitía la circulación por la muralla, las torres y las puertas.

El urbanismo y la arquitectura doméstica

Sistema urbano

La organización de las construcciones está estructurada a lo largo de una calle central que, de oeste a este, cruza todo el poblado. Otras calles perpendiculares a esta organizan espacios laterales y espacios sin construcciones a modo de plazas.

Las casas eran de diversos tamaños (entre 70 y 150 m²) y estaban formadas por varias habitaciones y algunas tenían incluso patios. La arquitectura emplea los mismos elementos que los utilizados en la muralla y las puertas. Los muros eran de adobes –que son ladrillos hechos de barro y paja y secados al sol- sobre un zócalo o base de piedras; después todas las fachadas y los espacios interiores eran encalados y, a veces, pintados. Las casas tenían una sola planta y los techos, que eran planos con leves pendientes para facilitar el desagüe, eran también accesibles para otro tipo de actividades.

La parte central de cada casa estaba formada por el hogar, centro de reunión y símbolo de la vida en familia. En las despensas de las casas se almacenaban y conservaban los productos cultivados y, además, se realizaban todo tipo de actividades como la molienda e incluso otras tareas más específicas como el trabajo del metal y el tejido junto a diversas labores artesanas.

El sustento cotidiano: tareas agrícolas e intercambios

Instrumental agrícola de la Bastida de les Alcusses

Vaso de cerámica ibérica de la Bastida de les Alcusses

Las tareas agrícolas y ganaderas eran parte fundamental para el sustento cotidiano. Los principales cultivos eran los cereales de secano -cebada, trigo y mijo- y las leguminosas –habas y guisantes- a los que se sumaba el cultivo de frutales como el olivo, la viña, el almendro y la higuera. Estos cultivos se realizaban con arados de madera reforzados con piezas de hierro que llamamos rejas, que han sido recuperado en un buen número en las casas de la Bastida. Ello permitía extraer mucho rendimiento al trabajar zonas de tierras duras o difíciles. Otras herramientas agrícolas presentes en las casas son podones, hoces, legones y arrejadas, que en conjunto ofrecen la mejor y más completa colección de aperos agrícolas de época prerromana conocidos hasta ahora en España.

La cabaña ganadera estaba formada, sobre todo, por cabras y ovejas y en menor medida, bueyes y cerdos de los que se extraía leche, lana y cuero y fuerza para el cultivo con arados y el transporte en carros. Además, no debemos olvidar, tampoco, la carne de estos animales para consumir a la que se añadía la de los animales silvestres cazados, que eran el conejo, la liebre, el ciervo, la cabra montés y el jabalí. Se han hallado, también, anzuelos lo que nos indica que la pesca en el cercano río Canyoles fue un recurso también aprovechado.

Junto a todo ello las actividades comerciales y los intercambios ocupan, también, un lugar destacado en la economía de este poblado. En la Bastida se han hallado juegos de pesas y balanzas de precisión, sin duda utilizados para transacciones y cuentas relacionadas, quizás, con el intercambio de pequeños lingotes de plata obtenidos mediante procesos de copelación de plomo argentífero.

En relación con los intercambios también sabemos que al poblado llegaban productos de varios puntos del Mediterráneo: desde el Estrecho de Gibraltar llegaban ánforas que contenían productos derivados de la pesca y salazones, y desde Atenas se transportaba vajilla de mesa -platos y copas para beber- empleados por los iberos junto a sus propias vajillas. Muchas de estas piezas eran, a veces, imitadas por los alfareros iberos como muestra de su interés por ellas.

La estructura social

Los trabajos y tareas realizadas define a los grupos que habitaron la Bastida. Campesinado, comerciantes y artesanado convivían con otros grupos cuya actividad más visible es la guerra. Los guerreros más destacados debieron ser caballeros como el de la conocida figura de bronce del Guerrero de Mogente. En esta pieza un hombre desnudo es representado con los elementos específicos de la clase dominante: las armas y el caballo. En una mano empuña la espada, que se denomina falcata, y en la otra el escudo redondo, que se llama caetra, pero destaca, sobre todo, el casco con gran penacho, todo un símbolo del poder. Junto a estos guerreros hubo otros infantes armados con lanzas y escudos. Junto a los guerreros las mujeres de rango tendrían a su cargo la administración de las casas y, quizás, de las tierras. Paralelamente, una de las actividades cotidianas de las mujeres de rango es el tejido, que conocemos, sobre todo, por las fusayolas y las numerosas pesas de telares encontradas en las casas.

Guerrero de Mogente (7,3 cm) descubierto en 1931 por el obrero Vicente Espí, en el departamento 218.

La destrucción del poblado y su abandono

El asentamiento tuvo una vida muy corta, pues se fundó y se destruyó en torno al 330 a. C. Así pues, el poblado solo estuvo habitado el curso de unas tres o cuatro generaciones. Estas fechas se han obtenido gracias al completo repertorio de importaciones griegas de barniz negro que ofrecen cronologías muy precisas. Las dos puertas de entrada tapiadas, los restos de incendios, las numerosas armas, joyas y adornos personales en las calles… todo indican que se produjo un abandono rápido y forzado del lugar. La causas de su destrucción todavía son dudosas y controvertidas, pero deben ser puestas en relación con las actividades y conflictos entre los propios grupos ibéricos, bien de la zona o bien de otras áreas más amplios, que incluirían la meseta castellana, la zona de la Hoya de Alcoy y el Condado de Cocentaina o el valle del Vinalopó. No olvidemos que estamos en un área con muchos asentamientos ibéricos, y que es una zona con pasos naturales entre el interior y la costa y que se buscó su control y el dominio de las tierras de cultivo.

El Museo de Mogente y el poblado de la Bastida de les Alcusses son visitables todo el año. En el yacimiento hay un servicio de guías y puede ser visitado siguiendo un recorrido con paneles explicativos.

Además, se ha reconstruido a escala natural una casa utilizando las técnicas y materiales ibéricos, de modo que se puede apreciar como estaban construidas estas casas y se observan los objetos y las actividades características de las personas que allí vivieron. Además, en una visita al Museo de Prehistoria de Valencia se puede admirar una selección de los mejores objetos encontrados en la Bastida.

Reconstrucción de una casa ibérica.

Los últimos hallazgos en el yacimiento de la Bastida de les Alcusses de Moixent revelan la importancia del poblado fechado hace 2.400 años – Casi un siglo después de su descubrimiento, las excavaciones siguen aportando datos a la historia

El reciente hallazgo de un buen número de piezas entre ellas cinco espadas de hierro pertenecientes a guerreros de la cultura íbera en el yacimiento de La Bastida de les Alcusses de Moixent no ha hecho más que evidenciar la importancia de este antiguo poblado para entender una civilización sobre la que existen aún innumerables interrogantes. No en balde, el desconocimiento de su alfabeto impide profundizar en el significado de muchos de sus aspectos culturales. Sin ir más lejos, la disposición y simbología del último hallazgo levanta incluso dudas entre los especialistas sobre si se trataría de un más que probable ceremonial de carácter bélico.

Según Helena Bonet, codirectora de la campaña de excavación del yacimiento que lleva a cabo el Museu de Prehistòria de València, estos hallazgos son “frecuentes en las necrópolis iberas, pero es la primera vez que este ritual se ha documentado dentro de un poblado”. “Este hecho convierte al poblado en una referencia peninsular para estudiar este periodo”, ha manifestado.
La Bastida de les Alcusses fue una de las ciudades más importantes del norte de la Contestania ibérica en el siglo IV a.C., sin embargo se desconocen las causas históricas que motivaron su destrucción en torno al 325 a.C., tras una corta existencia de 100 años.

La excavación arqueológica de esta ciudad amuralla ha desvelado, según Bonet un “urbanismo complejo, con grandes casas agrupadas en manzanas dispuestas a un lado y otro de la calle central que recorre todo el poblado”.

Asimismo, las viviendas eran de una sola planta distribuida en varias habitaciones con una superficie entre 80 y 150 metros. Los espacios se distribuían en varias habitaciones aunque predomina el modelo de habitación principal donde se encuentra el hogar, centro de la vida doméstica y estancias secundarias que se destinan a almacenes y establos.

La agricultura era la principal actividad productiva de estos pobladores, complementada con la ganadería y para la que empleaban un variado instrumental agrícola de hierro muy semejante al utilizado hasta nuestros días, compuesto por rejas de arado, hoces y alcotanas, entre otros. La caza, sin embargo, fue un recurso económico poco significativo.

Respecto a los animales domésticos, las investigaciones indican que poseían rebaños de ovejas y cabras, que eran fundamentales para el aprovisionamiento de carne y leche.

La cultura íbera tuvo una importante radicación a lo largo del actual territorio de la Comunitat Valenciana con diversos asentamientos reconocidos. Algunos de ellos son ahora fruto de excavaciones como es el caso del de la Ciudad de Kelin en Caudete de las Fuentes.

El objetivo es difundir lo que significó la ciudad

Este yacimiento es el primero que llevó a cabo el Museu de Prehistòria de València en 1928. Tras varias campañas de excavaciones, las tareas se retomaron en 1990. Según Bonet, ahora el objetivo es difundir la riqueza arqueológica del mismo “mediante la consolidación de manzanas de casas, el análisis del sistema defensivo, la realización de un estudio sobre el patrimonio y la creación de un museo con visitas guiadas y talleres”. Un proyecto de investigación muy amplio en el que trabaja un equipo interdisciplinar de expertos.

¿Cómo sería? Las reconstrucciones virtuales del asentamiento

 

 

 

 

 

 

Alcazaba y Murallas del Cerro de San Cristóbal

Alcazaba y Murallas del Cerro de San Cristóbal

De wikipedia

Alcazaba de Almería

Vista de la Alcazaba

Ubicación

País

 España

Ubicación

Almería, Andalucía, España

Coordenadas

36°50′27″N 2°28′15″OCoordenadas: 36°50′27″N 2°28′15″O (mapa)

Características

Tipo

Fortaleza hispanomusulmana y castillo bajomedieval-cristiano

Época de construcción

Segunda mitad del siglo X al siglo XVI

Construido por

Abderramán III

 Bien de Interés Cultural Patrimonio histórico de España

La Alcazaba, Castillo y Murallas del Cerro de San Cristóbal de la ciudad española de Almería es uno de los conjuntos monumentales y arqueológicos andalusíes más importantes de la Península Ibérica. Sus casi mil años de historia nos ha permitido conocer la evolución experimentada en la arquitectura civil y militar durante la dominación árabe en Al-Ándalus, debido a su construcción en diferentes fases y épocas, como el castillo y torres de época bajomedieval cristiana (siglos XVXVI), así como el origen y evolución de la ciudad (con un perímetro en total de toda la fortificación, según la Oficina de Turismo de Almería, de 1430 metros, contabilizando el castillo bajomedieval, la alcazaba conservada en la actualidad y el resto de murallas exteriores).45

Situadas en un cerro aislado, la Alcazaba es una sólida y extensa fortaleza con murallas de más de tres metros de anchura y cinco de altura, formando un recinto cerrado sobre sí mismo, pero conectado con los lienzos de la Muralla que configuran y dan sentido a su propio desarrollo, dentro de una unidad más compleja, como es la fortificación de la ciudad, en el que el barranco de la Hoya y el cerro de San Cristóbal mantiene una conexión directa con la Alcazaba, tanto física como visual, creando un conjunto de extraordinaria magnitud. La Alcazaba-castillo queda al sur conectada con la ciudad, y al norte el Cerro de San Cristóbal, que termina por definir un espacio único, de indudable interés cultural.

En el año 2010 la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre – Real Casa de la Moneda de España, como parte del «Programa Capitales de Provincia y Ciudades Autónomas» acuñó en la moneda de 5 euros correspondiente a Almería una imagen de este monumento.

Es una de las ciudadelas mejor conservadas en la actualidad, siendo la segunda alcazaba árabe más extensa de la península ibérica en lo concerniente a su recinto de construcción de época musulmana6​.

Descripción

El entorno que describe a este Bien de Interés Cultural, denominado «Conjunto Monumental de la Alcazaba de Almería y Murallas del Cerro de San Cristóbal», comprende las parcelas, inmuebles, elementos y espacios públicos y privados comprendidos dentro de la línea de delimitación que figura en el plano de delimitación del entorno afectado. Dicho entorno delimitado, en líneas generales, no se encuentra muy alterado ya que se trata del Barranco de la Hoya, que es un amplio espacio sin ningún tipo de edificación, que refuerza la imagen de la Alcazaba y Murallas. El resultado, según la Oficina de Turismo de Almería, es un entorno poligonal de tendencia cuadrangular, con una superficie de 37,652 hectáreas, cuyo eje, en dirección este-oeste, queda constituido por la Hoya, y que la convierten, según estas dimensiones, en la segunda alcazaba de mayor extensión de las construcciones árabes en época musulmana de la península. El área del recinto de la alcazaba conservada en la actualidad (sin las murallas exteriores) es de 2,5 hectáreas incluyendo el recinto del siglo XV.

Plano del conjunto defensivo de la Alcazaba y la Muralla del Cerro de San Cristóbal.

Historia

Vista general.

La ciudad de Almería, actualmente ubicada en la comunidad autónoma de Andalucía, España, fue fundada en el siglo X por el califa Abderramán III como atalaya defensiva de la ciudad prominente en ese momento, Bayanna, actual Pechina, (de ahí el nombre en árabe Al-Mariyya Bayāna المرية بيانة). La ciudad tenía un castillo fortaleza o alcazaba y una muralla que rodeaba toda la medina y los arrabales. La Alcazaba es uno de los puntos de interés turístico más emblemáticos de Almería, junto a la Catedral. Es visible desde cualquier punto de la ciudad, sobre todo su imponente Torre del Homenaje, y de visita muy agradable.

Fue en el año 955 cuando el primer califa de Al-Ándalus, Abd al-Rahman III, mandó construir la Alcazaba sobre los restos de una fortaleza anterior.7​ Se utilizaría la piedra arenisca procedente de una cantera cercana, a la postre conocida como las Canteras Califales. El recinto cuenta con tres partes diferenciadas: dos de origen y estilo árabe y una posterior, cristiana.

El noble castellano-aragonés Andrés Mateo de Guardiola y Aragón que fuera mayordomo mayor del infanteduque Enrique de Aragón y Pimentel, habían sido enviados por los Reyes Católicos durante la Guerra de Sucesión Castellana para hacerle frente al rebelado Diego López Pacheco, II marqués de Villena, y una vez conquistado su castillo de Jumilla por el mayordomo mayor Guardiola, este fue nombrado alcaide del mismo8​ y simultánemamente fue designado como capitán general de las Fronteras de Jumilla y del Marquesado de Villena, ambos cargos desde el 15 de marzo de 1475.8

El capitán general Andrés de Guardiola pasaba largo tiempo recorriendo a lo largo de la frontera granadina para vigilar una inminente invasión musulmana o para aprovechar cualquier debilidad fronteriza para atacar durante la guerra de Granada entre 1482 y 1492,8​ y hacia 1487 atacó, venció y apresó al capitán moro Malique Alabez,8​ alcaide nazarí de la Alcazaba de Almería,8​ llevándolo hasta la fortaleza jumillana.8​ Finalmente el 26 de diciembre de 1489 tuvo lugar la capitulación de Almería, pasando a la soberanía castellana.

El último proyecto de fortificación de la Alcazaba de Almería data de 1836, en el contexto de la Primera Guerra Carlista, por miedo a que se extendiera el conflicto a esta zona. Una vez acabado el conflicto, el edificio caería en el desuso y abandono.9

Fue en 1855 cuando se publicó un Real Decreto con fecha de 26 de mayo, y al amparo de la conocida como Desamortización de Madoz, que permitía la demolición tanto de la Muralla como de la Alcazaba, ya que la ciudad de Almería había dejado de ser plaza fuerte, por lo que el conjunto defensivo había dejado de tener una importancia estratégica y, a partir de entonces estorbaba a nivel urbanístico. La mayor parte de la Muralla fue destruida, aunque la Alcazaba corrió lo que hoy se llamaría mejor suerte, y no encontró un postor que estuviera interesado en invertir en los materiales de construcción que se podrían haber extraído, aunque no así en los terrenos, ya que el propio Ministerio de la Guerra no aprobaba la construcción a esta altura. Si bien hubo defensores de la conservación de diferentes elementos, como la Puerta de Purchena, por su valor ornamental, a nadie pareció importarle el destino de la Alcazaba.1011

Hacia 1890, el conjunto de la Alcazaba se encontraba en estado de ruina parcial, según el por entonces arquitecto municipal Trinidad Cuartara, lo que provocó que se desprendiera un trozo de muralla y de la torre de la pólvora, matando a un hombre e hiriendo a una vecina. A finales del mismo año, se derribaron una serie de aspilleras y las coronaciones de la zona más cercana de la muralla, a un coste de 1 155,50 pesetas de la época, a los que habría que sumar las 125 que ganó el arquitecto por sus honorarios.10​ Cuatro años más tarde comenzó a surgir el interés por la conservación e investigación del emplazamiento y en 1908 se instaló una antena emisora de radio fabricado por Telefunken, que perduraría hasta 1939.11​ y que establecería comunicación con el fuerte de Victoria Grande en Melilla.

Obras de restauración

La imagen del Cristo recortada sobre la Muralla.

Hacia la década de los años 1930, Leopoldo Torres Balbás sentó las bases del estudio histórico, aunque su proyecto se vio truncado por el inicio de la Guerra Civil Española. Afortunadamente, terminó el conflicto armado sin resultar apenas dañada por esta.12​ No fue sino hasta el año 1940, al poco tiempo de acabar la contienda, cuando se empezaron a realizar trabajos de restauración en este lugar. Un año más tarde, Francisco Prieto-Moreno, quien una vez fue el conservador de la Alhambra, se puso al mando de estas primeras obras; no fue sino hasta 1970 cuando abandonó el puesto. Durante este periodo, lideró las intervenciones para realizar los actuales jardines del Primer Recinto y la Casa del Alcaide, además de obras de otra clase, tales como consolidaciones del terreno, excavaciones, restauraciones, ajardinamiento y los accesos.

Entre los años 1951 y 1954, se realizó la segunda campaña de excavación, centrada en el área palaciega del conjunto y fue la primera intervención arqueológica realizada sistemáticamente, siendo utilizada una metodología específica. El responsable de estos trabajos fue F. Ochotorena, con colaboraciones esporádicas de Luis María Llubiá, Martín Almagro y A. Arribas. Después de varias intervenciones de limpieza, trabajos de documentación de las ruinas y la realización del inventario de gran parte del material arqueológico, producidos entre 1986 y 1987, siendo Lorenzo Cara el responsable, en 1989 se intervino en la zona más al Norte de la zona privada del palacio, el área de servicio y los baños públicos. Poco más tarde, entre los años 1993 y 1995, se realizaron otros trabajos, que estuvieron adscritos a la quinta fase del proyecto de restauración, esta vez dirigido por el arquitecto Ramón de Torres. Estas excavaciones fueron centradas en la muralla septentrional, en el sistema de canalización del agua y en los accesos al Primer Recinto, y fueron dirigidas primero por Domingo Ortiz, y Carmen Mellado, posteriormente.

La mayoría de los objetos y restos arqueológicos hallados en el Conjunto se encuentran depositados en el Museo de Almería, si bien es cierto que algunas de las piezas recuperadas en la primera intervención se trasladaron al Museo de la Alhambra.13

En los últimos años se está llevando a cabo un trabajo para impedir el deterioro de la piedra arenisca con la que fue construida la Alcazaba a través de la nebulización de pequeñas partículas de cal sobre la piedra.

La Alcazaba-castillo

Una de las albercas de la Alcazaba.

Se cree que antes de la existencia de lo que hoy conocemos como Alcazaba, en el mismo cerro existía una rábida cuya construcción fue fechada a mediados del siglo IX, con la intención de defender los arrabales de los normandos entre los años 840 y 861.14​ Se diseñó como una edificación de defensa ubicada dentro de la ciudad de Almería, exactamente en el norte del Casco Histórico. Una alcazaba es una ciudadela construida en varios niveles que suele ocupar toda una elevación de terreno. Tiene muros con torres de defensa, calles, casas y mezquita.

En el año 955 Abderramán III concede a Almería la categoría de medina. Es en ese momento cuando se comienza a construir la Alcazaba. Se construye también la mezquita aljama, cuyos restos son visibles en la iglesia de San Juan, y las murallas que rodean la ciudad. La Alcazaba fue una fortaleza militar y al mismo tiempo sede del gobierno. Desde este lugar se domina la ciudad y el mar. Se perfeccionó todo el conjunto y se engrandeció con Almanzor y más tarde alcanzó su máximo esplendor con Jairán, primer rey de la Taifa de Almería, entre los años 1012 y 1028.

Su entrada se encuentra en la calle Almanzor, paralela a la muralla, que lleva tras unas escaleras en zig zag rodeadas de vegetación al primer recinto del castillo, tras la Puerta de la Justicia.

Primer recinto

Jardines y torre de la Alcazaba.

Es un amplio lugar que corresponde a lo que fue campamento militar y refugio para la población en caso de asedio, que se dividía en dos barrios, y un pequeño cementerio.15​ Contaba con buenos aljibes, de los cuales hoy podemos ver uno en ruinas al descubierto, y uno de los pozos que se utilizaban para subir el agua una altura de 70 metros.16​ La entrada se realiza por la llamada Torre de los Espejos,17​ que aloja la Puerta de la Justicia.7​ Según la tradición, en esta torre existía un sistema de espejos cuya misión era hacer señales a los barcos que llegaban al puerto, esperando contestación, y descubriendo así a los enemigos.18​ En el extremo más oriental está el Baluarte del Saliente, que hoy aloja las oficinas del monumento.

Hacia el año 1522 hubo un terremoto que destruyó gran parte de la ciudad, resultando este recinto gravemente afectado. Aunque se conoce el uso que se hacía de esta parcela, se desconoce por completo su aspecto original, pues no se han encontrado documentos o imágenes que describan la fisonomía interior del primer recinto. Es por esta razón por la que, a la hora de restaurar la Alcazaba, se decidió realizar una serie de jardines y ornamentos a semejanza de la Alhambra de Granada. Los suelos empedrados, los pequeños canales que recorren los desniveles del terreno con el transcurrir del agua, los setos, las fuentecillas y los árboles son elementos que se desconoce si originalmente ocupaban estos terrenos, pero que hacen más agradables las visitas.

Muro de la Vela

El Muro de la Vela separa el primer recinto del segundo, aunque se accede desde este último. Se llama así porque allí se levantaba la Campana de la Vela, que anunciaba varios eventos cuando tenían lugar: barcos que entraban en la bahía, peligro, fuego, etc. Fue mandado construir por el rey Carlos III. La campana reunía con su toque a los defensores de la fortaleza. En otras épocas sirvió para marcar la hora del agua a los regantes, como toque de queda y como cierre de las puertas de las murallas y salida de las patrullas. También se la oía en las noches de tormenta.19​ Está cobijada por una cruz y tiene un nombre: Santa María la Mayor (Todas las campanas tienen un nombre propio).20

Segundo recinto

Aljibes de agua en el segundo recinto.

Era la residencia para gobernantes, guardia y servidores. En realidad era la ciudad palaciega con dependencias como mezquita, casa, baños, aljibes, tiendas, etc… También existen los baños de la tropa, que sigue el modelo de los baños romanos. Debido a los terremotos que asolaron la provincia en la Edad Moderna apenas quedan algunos restos en pie pero ofrece un gran yacimiento arqueológico el cual es aún hoy investigado.

Hoy, son visitables el aljibe, el Muro de la Vela, la ermita de San Juan, antigua mezquita reconvertida por los Reyes Católicos; y dos reproducciones de casas originales, reconstruidas de sus ruinas durante los años 1960,16​ y que albergan exposiciones de objetos de la época.21

Ermita de San Juan

Fue construida entre 1490 y 1523, siendo hoy usada como un pequeño auditorio.

Mirador de la Odalisca

Castillo de Almería en el tercer recinto.

En el segundo recinto queda en pie una pared en su cara norte, que correspondía al palacio de Almotacín, del siglo XI, y que cuenta con dos aberturas hacia el barranco de La Hoya.22​ Existe una leyenda referente al lugar. Antes de que este recinto se transformara en ruinas, esta era la residencia de Almotacín, en la que disponía de un harem. Una noche, esperando a su concubina favorita, de nombre Galiana, el rey quedó esperando. En realidad, ella había acudido a liberar a un preso cristiano que cantaba todas las noches a su hermosura. Cuando él se estaba descolgando por esta ventana con la ayuda de unos paños de seda que la odalisca había anudado, apareció la guardia, por lo que decidió soltarse para evitar ser apresado de nuevo, muriendo al llegar al suelo. Tras ver despeñarse a su amado, la concubina empezó a llorar en el alféizar de la ventana, muriendo de lástima poco después.23​ Este es un relato que cuenta la dificultad de la convivencia de las dos culturas que había en la ciudad.24

Tercer recinto: el Castillo

Se trata de la parte más moderna de todo el conjunto. Tras la toma de Almería el 26 de diciembre de 1489, los Reyes Católicos mandaron construir un castillo en la parte más occidental y elevada, donde hasta ese momento se alzaba un alcázar, adaptado a las nuevas necesidades militares y a la artillería. Se empezó a construir en 1490 y se acabó en 1534, reinando Carlos I.25​ A este espacio, protegido por tres torres semicirculares, llamadas del Homenaje, de la Noria y de la Pólvora,26​ y un foso, se accedía a través de un puente levadizo.

El interior se organiza en torno al Patio de Armas, dominado por la Torre del Homenaje. Destacan la Torre de la Noria del Viento y la Torre de la Pólvora. En el centro del patio existe un aljibe rectangular y un silo acampanado que en el pasado también sirvió como mazmorra. Los sillares con los que se construyeron los muros de este recinto están marcadas con toda clase de símbolos basados en figuras geométricas. No fueron hechas después de colocarlas, sino al momento de tallarlas. Son las firmas de las cuadrillas de canteros que las esculpieron, ya que su salario se basaba en la cantidad de piedras que eran capaces de realizar, pudiendo así identificar al creador de cada uno de los bloques.27​ Gracias a estas huellas, hoy se piensa que algunos de estos trabajadores también colaboraron en la construcción de la Catedral de la ciudad, pues se han encontrado las mismas marcas. Se han contabilizado más de 25 marcas diferentes en todo el recinto.18

Torre del Homenaje

Torre de la Pólvora.

La Torre del Homenaje es la más grande de todas las que rodean el tercer recinto de esta alcazaba. A diferencia de las demás, tiene planta cuadrada y no redonda, lo que responde a su uso como residencia. En su fachada principal, el marco de la puerta está preparado para alojar el escudo de Carlos I, aunque nunca llegó a estar ahí.25​ En su interior recogía exposiciones del Centro Andaluz de la Fotografía, hasta noviembre de 2016,18​ dando paso a nuevas exposiciones, especialmente sobre cine.

Torre de la Pólvora

Situada en el extremo más occidental de la construcción, la torre de la Pólvora se usaba para almacenar los explosivos que se utilizarían en las armas de la fortaleza. Hacia 1845 se le instaló el que sería el primer pararrayos de la ciudad, como elemento de seguridad para prevenir posibles explosiones accidentales como la acaecida en 1707 por la caída de un rayo sobre esta. Para su construcción se colocaron tres puntas de platino, que fueron compradas en París a un coste de 25 francos cada una, y una aguja situada a ocho varas de altura, con el depósito de evacuación excavado en el cerro exterior. El precio final de todo el proyecto fue de 2 766 reales de vellón. Dado que las arcas municipales no podían hacer frente a tal gasto, se recurrió a las familias locales más adineradas para que realizaran donaciones a tal efecto.28

Murallas de Jayrán

Muralla de Jayrán

La muralla del Cerro de San Cristóbal, más conocida como murallas de Jayrán, es lo que hoy permanece en pie de la antigua muralla que rodeaba toda la ciudad y fueron construidas por el primer rey de la Taifa de Almería, Jayrán. A pesar de que se han encontrado más secciones de dicha muralla en otras zonas de Almería, como en los cercanos refugios subterráneos de Almería,29​ esta es la única parte que siempre se ha encontrado al aire libre y no ha sido descubierto posteriormente en estado de ruinas. Originalmente, su nombre era monte Laham,30​ que en árabe significa carne. Su nombre católico procede del corto periodo en el que Almería estuvo bajo el dominio de Alfonso VII, en el que se erigió un castillo dedicado a San Cristóbal, hoy en estado de ruina progresiva. Fue erigida para proteger el antiguo barrio de La Musalla, en tiempos de Abderramán III, entre los años 1012 y 1028.31​ La muralla, con una sección de tres metros de grosor y cinco metros de altura,32​ cuenta con un total de siete torreones: tres de planta cuadrada de origen árabe, y cuatro de planta circular de origen cristiano, erigidas por orden de Alfonso VII en el año 1147.33​ También permanece en pie una puerta, conocida como Puerta de la Almudaina,34​ y que da acceso a la EEZA. Para la restauración de los torreones derruidos tras la contienda del siglo XII, se reutilizadon bolaños que se encontraban por el suelo y se han encontrado cruces de posible origen templario grabadas en la argamasa utilizada.

Estatua del Sagrado Corazón de Jesús

Monumento al Sagrado Corazón de Jesús en el Cerro de San Cristóbal.

Se trata de una imagen, erigida durante los años 1930, sito en lo más alto del Cerro de San Cristóbal. Está realizada en mármol de la localidad almeriense de Macael.31​ Fue dinamitada durante la Guerra Civil Española35​ y posteriormente restaurada el año 2000.30

Escenario de cine

Como parte de la señalización turística y urbana de la Ruta del Cine de Almería, se instalaron paneles informativos con datos sobre el rodaje de la película Me has hecho perder el juicio (1973) junto a la entrada de la Alcazaba, y de Conan el Bárbaro (1982) en la base de la estatua del Sagrado Corazón,45​ aunque esta última ha sufrido actos vandálicos y ya no está presente.46​ En la película Indiana Jones y la Última Cruzada (1989) también se puede observar la parte exterior del monumento.47

También se han rodado en la Alcazaba de Almería y sus alrededores:

Notas

Recreación de la Almería musulmana realizada por el profesor  Juan José Tonda. Patrocinada por Amigos de la Alcazaba, Ayuntamiento de Almería y Diputación Provincial

Dólmen de Lácara

Dólmen de Lácara

El Dólmen de Lácara es del tipo de corredor. Tiene una longitud de 19,90 metros, con un largo corredor, una gran cámara y el túmulo. La cámara tiene forma poligonal de 5,10 metros de diámetro y está formada por ocho grandes losas de más de 5 metros de altura sobre el nivel del suelo.

Sin duda, las medidas son impresionantes y lo hacen merecedor de una visita, porque además en sus alrededores se podrán encontrar varias sepulturas labradas en la roca granítica, del tamaño de una persona y de 0,5 metros de profundidad.

El dolmen de Lácara es un monumento megalítico tipo sepulcro de corredor, verdadera joya arquitectónica del Calcolítico (3000-4000 años antes de Cristo) en buen estado de conservación.

¿Como llegar?

Coordenadas geográficas: Latitud: 39º 2′ 59.28″ N Longitud: 6º 25′ 14.95″ W

Desde Mérida tomamos la A-66 en dirección Cáceres hasta Aljucén, donde nos desviamos por la Ex-214 en sentido La Nava de Santiago. Recorridos unos ocho kilómetros, en la parte izquierda de la calzada encontraremos un cartel indicador del dolmen. Podemos dejar nuestro vehículo en la explanada adyacente. Para llegar hasta el túmulo debemos traspasar la portilla metálica que se abre en la valla (no tomar la pista de tierra de la derecha) y una vez dentro de la finca, seguiremos durante unos 300 metros pegados a la mencionada valla, que dejaremos permanente a nuestra derecha. En 5 minutos alcanzaremos el dolmen de Lácara, visible por sus grandes bloques de piedra que se alzan por encima de una pequeña elevación del terreno.

Dólmen de Lácara, La Nava de Santiago (Badajoz). Foto Emilio

¿Donde se encuentra?

A unos 20 kilómetros al oeste de Mérida y cerca de la ribera de Lácara, afluente por la margen derecha del Guadiana, se encuentra el que posiblemente sea el monumento megalítico más espectacular de la región Extremeña, el dolmen de Lácara. El prehistoriador D. Martín Almagro, en 1959, describía así el paisaje donde este se encuentra:

“el monumento se encuentra enclavado en medio de un típico paisaje extremeño, con suaves ondulaciones cubiertas por una abundante vegetación arbórea de monte, formada principalmente por encinas y alcornoques.

El suelo se halla cubierto por un rico manto de césped, aprovechado intensamente por la ganadería. El subsuelo es principalmente una formación granítica, que aflora en muchos sitios. La forma que generalmente presentan las rocas graníticas es redondeada, debido a la erosión. Esta clase de roca ha sido el material empleado por los constructores del dolmen, hoy en estado grande de destrucción. Fue erigido en una suave colina que domina la formación de arrastres diluviales, que se conoce con el nombre de Prado de Lácara, varios arroyos, que han creado con sus arrastres una rica zona agrícola que siempre ha sido explotada por su abundancia de agua y apropiada formación del terreno”.

El Dolmen de Lácara se encuentra junto a la carretera de la Autovía de la Plata a La Nava de Santiago, a unos 25 kilómetros de Mérida. Fue declarado monumento nacional en 1931. Dentro de su categoría, es el mayor que existe en España (en la península solo hay uno más grande en la localidad portuguesa de Évora) y un emblema de una corriente cultural común a los pueblos de la vertiente atlántica desde Irlanda hasta la Península Ibérica.

El monumento, que tenía un uso religioso, se divide en tres partes: un atrio o vestíbulo, la antecámara y la cámara principal, que cuenta con cinco metros de diámetro y otros tantos de altura. El túmulo, monte de origen artificial que soporta el peso de las piedras, tiene un diámetro de 40 metros. Su construcción se remonta al cuarto milenio antes de Cristo.

El dolmen está formado por un largo corredor cubierto, de casi 20 m de longitud, que da acceso a la cámara mortuoria. Un pasillo adintelado conduce a una cámara mortuoria que originalmente debió de alcanzar los 5 metros de altura, y que estaba cubierta de un manto de tierra que ocultaba a la vista dicha cámara. En su interior se ha encontrado ajuar funerario formado por cuchillos, puntas de flecha, y placas de pizarra, resultado de las tareas de excavación más importantes que han tenido lugar en el dolmen (años 50 del siglo XX), por el prestigioso arqueólogo Martín Almagro Basch. Además de los restos de ajuar funerario, anteriormente descritos, Almagro encontró un fragmento de cerámica de un vaso campaniforme. El corredor y la cámara fueron repetidamente saqueadas, seguro desde época romana y en etapas posteriores.

La cúpula se cubrió con una gran losa, de la que, a priori, no quedan vestigios a primera vista. La estructura de cámara y corredor estaba cubierta con piedras y tierra, hasta formar un gran túmulo. El túmulo era reforzado por bloques de piedra que ejercieron el papel de contrafuertes para evitar que la estructura se viniese abajo, pues la presión de las piedras que forman la cámara mortuoria es enorme. Estas lajas formaban un círculo alrededor del perímetro del dolmen.

La estructura del Dolmen de Lácara es la típica de un sepulcro de corredor:

El dolmen ha sido utilizado durante muchos años como vivienda y resguardo para el ganado, y a pesar del aceptable estado de conservación, se encuentra así debido a las cargas de dinamita que se utilizaron para extraer los bloques de granito  que forman la edificación. El hallazgo por Almagro Basch de tégulas (pequeñas tejas) y cerámica de origen romano y medieval atestigua el uso doméstico del monumento. Se consiguió barrenar el monumento, pero los restos de lajas esparcidos por los alrededores, demuestran que fuese quien fuese quien realizó tal desaguisado, no se llevó demasiados restos de la obra mortuoria. El mismo Almagro informa en su memoria de la excavación que algunas de las piedras de la cubierta del corredor y todas las de la cámara poligonal fueron intencionadamente desmontadas, barrenadas y destruidas.

Vista del Dólmen de Lácara en 360º

La excavación más importante en el monumento tuvo lugar a finales de los 50 del pasado siglo. En aquella intervención se localizó elementos de ajuar, cerámicas, cuentas de collar y más de cien puntas de flecha. Pero hoy aún se desconocen muchos datos sobre el dolmen. Con su compra por parte de la administración regional y su puesta a punto se podrá profundizar en su investigación al tiempo que se facilitará su explotación como recurso turístico.

Vista del corredor. Al fondo la cámara mortuoria

Y la cámara es un verdadero prodigio. De las grandes piedras que se elevaban hacia el cielo (la cúpula estaría a unos 5 metros) sólo queda una intacta, que da idea de la grandiosidad de la construcción. Las demás aparecen partidas. Pero en la base se puede apreciar la precisión con la que fueron colocadas.

Toda la estructura estaba cubierta con piedras y tierra, hasta formar un gran túmulo.

Para reforzar y sujetar el túmulo se colocaban grandes piedras en la base, a modo de contrafuertes, a lo largo de un anillo exterior. Estas piedras son visibles en el perímetro del dolmen de Lácara.

Los dólmenes eran construcciones sagradas, utilizadas para enterrar a los miembros de la comunidad. La construcción de un monumento de este tipo suponía un esfuerzo enorme y necesitaba de la colaboración de muchas personas.

Sólo visitándolo se puede comprobar la majestuosidad de esta verdadera obra de ingeniería.

Cámara mortuoria

Bloques de granito que formaban parte del dolmen

Una de las joyas del patrimonio monumental de Mérida luce nueva imagen. La Consejería de Cultura de la Junta de Extremadura ultima los trabajos de adecuación del entorno del Dolmen de Lácara, una construcción megalítica única en el país que fue adquirida a finales de 2009 por la administración regional.

Cultura ha destinado a esta actuación cerca de 59.000 euros con cargo al proyecto Vía Plata II, dentro del programa Alba Plata de recuperación de esta milenaria línea de comunicación a su paso por Extremadura. La empresa cacereña Atrium CRBC ha llevado a cabo los trabajos, denominados ‘Excavación y consolidación de las estructuras del Dolmen de Lácara’.

La actuación ha consistido fundamentalmente en consolidar y limpiar el entorno del monumento, sin llegar a intervenir de forma directa en el dolmen. De ese modo, si antes se encontraba cubierto por vegetación y material de relleno, ahora luce en medio de un montículo pelado, como debió de mostrarse en sus primeros años de existencia y funcionamiento.

Vista lateral del dolmen. El túmulo cubría originalmente toda la estructura.

Junto a esto, se ha adecuado un camino desde el inicio de la finca donde se encuentra el monumento, para lo que se ha ocupado una franja de suelo que formó parte de la compra realizada por Cultura en 2009. Hasta entonces, los propietarios de los terrenos permitían el acceso para realizar visitas al dolmen, pero se encontraba en un espacio privado. Ahora se puede entrar con un vehículo y aparcar junto a la entrada, tras lo que se debe recorrer a pie el sendero que lleva a la construcción megalítica.

Esta actuación contribuirá a mejorar el conocimiento científico del dolmen y a difundir una joya de la arqueología emeritense, extremeña y española.

Foto Emilio

Un monumento único

http://www.360cities.net/image/dolmen-de-lacara-europe#16.00,16.80,70.0

Knap de Howar

Knap de Howar

Vista de las dos edificaciones.

Fachada de los edificios que componen la granja de Knap de Howar, ahora cerca del mar, no así cuando fueron construidos.

El Knap de Howar, en inglés Knap of Howar o Knap o’ Howar, es una granja neolítica en la isla de Papa Westray, del archipiélago de las islas Orcadas, en Escocia. Puede ser la casa de piedra más antigua conservada en el noroeste de Europa.1 La datación por radiocarbono muestra que fue ocupado desde 3700 a. C. a 2800 a. C., tiempo antes que construcciones similares del asentamiento de Skara Brae, en la Mainland, también de las Orcadas.2 En Escocia se encuentra el quinto edificio más antiguo del mundo.

Asentamiento

Mirando hacia el interior de la casa, a través de la baja puerta de entrada de la casa principal. La mochila da una idea de la escala.

La granja consta de dos edificios rectangulares redondeados adyacentes de paredes gruesas con puertas muy bajas frente al mar. La estructura grande y más antigua está unida por un paso bajo con el otro edificio, que ha sido interpretado como un taller o una segunda casa. Fueron construidos sobre un anterior vertedero, y fueron rodeados por material de desecho que los ha protegido. No hay ventanas, por lo que las estructuras fueron, supuestamente, iluminadas por el fuego, con un agujero en el techo para dejar salir el humo. A pesar de que ahora se sitúan cerca de la orilla y la casa principal se asoma sobre el mar, habrían permanecido inicialmente hacia el interior, siendo esto el efecto del cambio del nivel del mar.3 La orilla pone al descubierto piedra local que se divide en planchas delgadas, dando una fuente de material de construcción para los muros de piedra seca.4 2

Las paredes siguen en pie y poseen un alero a una altura de 1,6 metros, y el mobiliario es de piedra, permaneciendo casi intacto, dando una impresión viva de la vida en la casa. Chimeneas, muros divisorios, camas y estantes de almacenamiento están en perfecto estado, y no se encontraron agujeros para postes que indicasen una estructura del techo.4

La evidencia de los basureros muestra que los habitantes se dedicaban a la cría de ganado, ovejas y cerdos, cultivo de cebada y trigo, marisqueo, y a la pesca, de especies que han de ser capturadas usando barcos y caza.2

Los hallazgos de cerámica Unstan de finas manufactura y decoración enlaza a los habitantes con las tumbas de tipo cairn de cámara cercanas y a sitios más lejanos, incluyendo Balbridie y Eilean Domhnuill.2 El nombre «Howar» se cree que deriva de la palabra del nórdico antiguo haugr, cuyo significado es ‘montículos’ o ‘túmulos’, por tanto el significado sería ‘loma de los montículos’.5 3

El sitio está al cuidado de la institución Historic Scotland.1

Las dos estructuras en el Knap – fotografía de Douglas Hourston

El monumento más famoso de Papa Westray, al cuidado de la Escocia histórica (véase también las tumbas en el Holm de Papay, una pequeña isla cerca de Papa Westray). Estas dos casas oblongas de piedra construidas, preservadas por la arena soplada por el viento son las primeras viviendas de pie en el norte de Europa conocidas, que se remonta a alrededor de 3800 años antes de Cristo. Se considera que representan una granja neolítica. Fueron excavados en los años treinta y setenta.

Las paredes alcanzan un máximo de 1,6 metros y la más grande abarca una superficie de 10 metros por 5,0 metros y la más pequeña de 7,5 metros por 3 metros, con losas verticales que los dividen en habitaciones. De muchas maneras similares a Skara Brae en Orkney continental, el mobiliario y accesorios incluía chimeneas, pozos, armarios empotrados y bancos de piedra.

Ellos fueron ocupados por los agricultores neolíticos durante 500 años. De los restos escarpados, el modo de subsistencia era principalmente la cría pastoral de ganado, ovejas y cerdos. Hay algunas pruebas de cultivo de cereales y la recolección de pescado y conchas. Unstan vincula el sitio a cairns estancado en lugar de los asentamientos donde estaba utilizado el arte acanalado como Skara Brae.

La entrada a las casas es por pasajes bajos y estrechos que dan refugio del clima de las Orcadas. Las casas también están conectadas por un pasillo interno – ¡mira tus cabezas!

El asentamiento más antiguo conocido en el noroeste de Europa se encuentra en la costa oeste de Papa Westray en Orkney. Consiste en dos “casas” interconectadas que datan del Neolítico o “Nueva Edad de Piedra”. El Knap fue habitado durante el mismo período que el sitio famoso de Skara Brae en Orkney continental pero fue construido anterior. También es contemporáneo con un número de cairns de cámara – los mortuorios elaborados – incluyendo uno en Holm de Papay.

Una clave para entender el Knap de Howar es que los niveles del mar -y por lo tanto la costa- han cambiado dramáticamente en los últimos cinco a seis mil años. El Knap habría estado a cierta distancia del mar, tal vez parte de un asentamiento más grande. Papay (Papa Westray) todavía podría haber estado conectado con Westray, su vecino más grande de la isla en ese momento.

El nombre Knap de Howar significa el “montículo de montículos” y describe las dunas arenosas que cubrían los restos antes de su primera excavación por Guillermo Traill y Guillermo Kirkness en 1929. La acción combinada de las tormentas del viento y del invierno había revelado el stonework y el shell- (Desechos) que se habían utilizado para aislar la estructura. Encontraron dos bien construidos, ovalados e interconectados edificios de piedra o estructuras de la casa. Pensaron que los edificios databan de la edad del hierro. En ese momento la mayoría de las estructuras neolíticas fueron etiquetadas como “Casas de Pict”, aunque William Traill sabía que estas estructuras eran probablemente mucho más antiguas que el período Picto.

El Knap desde el este

Los restos fueron dejados hasta los años 70 cuando las excavaciones frescas fueron emprendidas y las ruinas consolidadas por el Ministerio de Obras (ahora Escocia histórica). Las excavaciones fueron supervisadas por Anna Ritchie. La datación por radiocarbono de los hallazgos de estas excavaciones mostró, notablemente, que el Knap de Howar se había vivido entre 3700 y 2800 AC. De hecho. ¡Era la estructura habitada más vieja conocida en el norte de Europa!

Construcción de los edificios

El Knap de Howar – entrada principal, aspecto interior

Knap de Howar en los años 50 – del libro de Maggie por M. Harcus

Usted puede ver de las fotografías que la piedra está hábilmente construida y similar a la que se emplea en la construcción de diques (muros de campo) y casas del siglo 18-XIX en Papay. La roca que subyace a la isla se divide naturalmente en banderas y bloques y requiere poco en el modo de vestirse.

Se encontraron agujeros posteriores que una vez albergaban los soportes del techo. Estos eran hasta 120 mm (más de 7 pulgadas) de ancho. Parece difícil creer hoy que tales postes sólidos podrían haber venido de una isla prácticamente sin árboles. Quizás el clima era un poco más favorable, o los postes venían como madera a la deriva. Incluso pueden haber sido comercializados a través del mar. No había restos de techo en los edificios, lo que sugiere que habían sido cubiertos con césped o paja.

Los edificios estaban rodeados de capas de basura que cubrían unos 500 metros cuadrados. Los restos sobrevivientes habían sido construidos en la capa más vieja de desechos (lo que sugiere una vivienda aún más antigua). El midden estaba hecho de basura doméstica descompuesta, incluyendo fishbones, conchas (principalmente lapas, pero también berberechos, winkles y navajas). Los peces eran pezones costeros, pez ballan y el carbonero joven, junto con el bacalao, el carbonero más grande y otras especies de aguas profundas que sólo podían ser capturadas por lo menos 2 millas en el mar.

Entrada principal desde el suroeste

El Knap no podría haber sido construido por cazadores-recolectores primitivos. Eran «los productos de una sociedad agrícola segura» según Anna Ritchie. ¿Cómo eran estos agricultores confiados? La evidencia de los cairns chambered demuestra que han sido similares a Orcadians modernos (habitantes de Orkney). Pero, en promedio, eran ligeramente más cortos y pocos vivían en la cincuentena. Probablemente eran descendientes de personas mesolíticas (edad media de la piedra) que siguieron las capas de hielo en retirada a través del noreste de Escocia, Caithness ya través del Pentland Firth.

Los humanos modernos pueden favorecer un clima de tipo mediterráneo, pero Orkney proporcionó las condiciones ideales para la civilización neolítica: “tierra apta para la agricultura mixta, materiales de construcción para asentamientos permanentes, recursos alimentarios naturales y un clima razonable” (Ritchie). Los habitantes del Knap cultivaban ganado y ovejas además de su pesca. La cerámica que se encuentra en el Knap de Howar se conoce como mercancía de Unstan – Unstan que es el sitio donde se encontró tal cerámica primero.

Cómo la vivienda en el Knap o ‘Howar habría mirado durante el período de su uso.

El Knap de Howar es un sitio neolítico en la isla de Papa Westray en Orkney, Escocia. El nombre es noruego viejo para el “montículo de montones” o el “carro grande”. El edificio conservado en el sitio se considera la casa de piedra más antigua en el norte de Europa y está fechado a 3700-3500 BCE. El sitio se compone de dos estructuras, comúnmente conocido como “la granja”, construido a través de la construcción de piedra seca con un pasadizo contiguo entre ellos. Sobre la base de excavaciones arqueológicas, se cree que estas estructuras fueron construidas en la parte superior de un sitio mucho más antiguo y formó el centro de un establecimiento agrícola.

El viejo nombre nórdico para la isla de Papa Westray era Papay Meiri, significando la “isla grande de los papares”. Los Papares eran monjes irlandeses o escoceses legendarios, referenciados en trabajos escandinavos, que habitaron las islas del norte de las Orcadas después de salir de Islandia. Como estas fuentes para los papares datan del siglo 12 CE, y el sitio es mucho más antiguo, es posible que estos Papares fueron originalmente sacerdotes paganos que fueron cristianizados más tarde en la leyenda. No es posible, sin embargo, que los monjes cristianos fueran los primeros constructores y residentes del Knap de Howar (aunque hay mucha evidencia sobre Papa Westray para la actividad cristiana posterior) y es casi seguro que los habitantes eran una familia Orcadiana Neolítica de agricultores. La evidencia arqueológica indica que la gente allí guardó el ganado y las ovejas y, quizás, los cerdos, cultivaron la tierra para producir la cebada y el trigo, y pescados para el alimento.

Los muros de piedra de la granja tienen una altura de cinco pies (1.6 metros) y, durante el tiempo de su ocupación, habrían sido independientes (hoy el edificio parece haber sido construido en la tierra). Uno de los edificios (Casa Uno) servía como vivienda para la familia mientras que el otro (Casa Dos), accedido a través del pasaje contiguo, era un taller y espacio de almacenamiento de algún tipo. Ambas estructuras tienen puertas en el frente frente al mar. Los cuartos de estar eran relativamente espaciosos a 35×18 pies (10×5 metros) y fueron separados por losas verticales de la piedra que particionaron el área viva delantera de una cocina o de un taller trasero. La evidencia en la forma de agujeros del poste sugiere que el techo habría sido formado probablemente del césped levantado algunos pies sobre las paredes – aunque quizás no demasiado arriba para contener calor. La casa fue calentada por un fuego en el hogar de la parte trasera (cocina). El hogar se conserva intacto como lo son las camas de piedra y los estantes de la casa. Se cree que las camas se habrían cubierto de brezo para formar colchones.

La Casa Dos, la más pequeña de las edificaciones, mide 25×12 pies (7×3 metros) con paredes más delgadas que están a la misma altura que la casa principal. Este edificio está dividido en tres áreas; Dos parecen haber sido para el almacenamiento y una tercera utilizada como un taller de trabajo. Se encontraron fragmentos de cerámica y herramientas de piedra y pedernal en el suelo. Había dos hogares y piedras de moler también se encuentran in situ. El paso que conectaba los dos edificios estaba, en algún momento, bloqueado por una piedra, aparentemente a propósito, y el taller abandonado. La casa principal continuó siendo ocupada mucho después de que el pasillo fue cerrado y la arqueóloga Anna Ritchie concluyó que el sitio estaba en uso constante por más de 900 años. Hoy en día el Knap de Howar se encuentra bastante cerca de la costa, pero en sus días de ocupación habría sido tierra adentro desde el mar en lo que probablemente fue una amplia pradera. Arqueólogos y geólogos han confirmado esta teoría basada en la evidencia en el sitio y los estudios geológicos de los patrones de erosión en la isla.

El sitio fue excavado primero en el verano de 1929 cuando el dueño de la tierra, Guillermo Traill, encontró las paredes de piedra resistentes en la tierra que había sido parcialmente descubierta por fuertes vendavales el invierno anterior. Con la ayuda de un amigo, William Kirkness, descubrió los dos edificios y eliminó escombros y artefactos. Los dos hombres datan los edificios a la edad de hierro pero las excavaciones en los años 70 por Ana Ritchie colocaron las estructuras en la edad neolítica temprana y, más lejos, demostraron que los edificios fueron habitados continuamente por más de 900 años. Aunque la mayor parte del material de interés había sido removido de los dos edificios, Ritchie encontró evidencia de fragmentos de cerámica de Unstan, indicando que los habitantes habían estado en contacto y comerciado con la gente de Orkney central y posiblemente aún más al sur. Según “Adventures in Archaeology”, “Desde que se encontró Unstan ware en el primer tipo de tumba en las Orcadas, se esperaría encontrar una similar cerca de la gente de Knap de Howar”, pero hasta el momento, no se ha detectado nada. Es posible que las tumbas que existieron hace mucho tiempo cayeran en el mar a través de la erosión de la tierra o que simplemente permanecen ocultas. Recientes excavaciones en el sitio del Ness de Brodgar, en la isla principal de Orkney, han demostrado concluyentemente que asentamientos enteros, de gran importancia, todavía pueden estar enterrados a la vista a la espera de ser revelados.

Kiviks Graven

Kiviks Graven

La Tumba del Rey cerca de Kivik (Kungagraven y Kivik, Kiviksgraven) en la parte sureste de la provincia sueca de Skåne es lo que queda de un doble enterramiento, inusualmente grandioso de la Edad de Bronce nórdica c. 1600 AC. [1]

El sitio está situado a unos 320 metros (1000 pies) de la costa de la costa oriental de Scania en el sur de Suecia. A pesar de los hechos que el sitio ha sido utilizado como una cantera, con sus piedras arrastradas para otros usos, y que fue restaurada descuidadamente una vez que se sabía que era un entierro antiguo, estos dos entierros son únicos.

Tanto en construcción como en tamaño -es un sitio circular de 75 metros (250 pies) de diámetro- esta tumba difiere de la mayoría de los entierros europeos de la Edad del Bronce. Lo más importante es que los cistas están adornados con petroglifos. Las imágenes talladas en las piedras representan a personas, animales (incluyendo pájaros y peces), barcos, lurs jugados, símbolos y un carro tirado por dos caballos y con ruedas de cuatro radios.

Pocos monumentos funerarios en Escandinavia han sido estudiados tan bien como Bredarör de Kivik, un cairn de la edad del bronce, situado al norte de Simrishamn sobre la costa sudeste de Skåne. Fecha a aproximadamente 1600 AC y quizás antes, las medidas del sitio 75 metros de diámetro. Es el montículo más grande de su tipo en Suecia. Sistemáticamente saqueado para materiales de construcción en siglos pasados, una cámara central de la piedra fue descubierta en 1748, que contiene una cista de piedra central, mide 3,8 metros largo por 1 metro de ancho, formado por losas de piedra vertical, el tamaño de un sepulcro de la humano. El contenido original de la cista se desconoce, se ha retirado antes de documentación primer de cairn, así destruyendo pruebas que habrían permitido la datación más precisa. Históricamente, la excavación del sitio ha sido mal grabada.

La entrada de la tumba

El sitio fue utilizado como cantera para materiales de construcción hasta 1748, cuando dos agricultores descubrieron una tumba de 3,25 metros (11 pies), con una orientación norte-sur, construida con diez placas de piedra. Lo cavaron, con la esperanza de encontrar un tesoro en la tumba.

Pronto se rumoreó que los dos hombres habían encontrado un gran tesoro en la tumba y las autoridades les habían arrestado. Sin embargo, los dos hombres negaron haber encontrado algo, y como ninguna evidencia pudo ser proporcionada contra ellos, ellos fueron puestos en libertad.

Los investigadores anteriores en el sitio asumieron que la tumba era la de un hombre de mediana edad, probablemente un cacique. Por lo tanto el montículo llegó a ser conocido como Kungagraven-tumba del rey. En la década de 1930, los trabajos arqueológicos en el sitio revelaron una segunda tumba; cerca de la piedra más grande ataúd, levantado las losas forman otra cámara funeraria, ahora se llama Prinskammaren – cámara del príncipe, debido a su tamaño más pequeño. Sin embargo, un análisis más reciente de restos humanos encontrados dentro de la cámara indica que varios adolescentes fueron internados dentro.  Excavado por huaqueros y arqueólogos, la tumba había sido casi demolida.

Pasaron varios años antes de que se descubriera que los bloques de piedra de la tumba estaban adornados con petroglifos y había comenzado una larga serie de especulaciones. Sin embargo, la explotación continuó y algunas de las piedras desaparecieron.

El sitio fue excavado por el arqueólogo Gustaf Hallström (1880-1962) a partir de 1931. Entre 1931-1933, una excavación minuciosa fue emprendida y los restos de un establecimiento de la Edad de Piedra fueron encontrados debajo del cairn masivo, incluyendo muchos fragmentos del flintstone. Sólo se encontraron dientes, fragmentos de bronce y algunas piezas de hueso, que datan de la Edad de Bronce. [2]

El montículo contenía dos cistas, sin embargo. En el lado izquierdo del extremo meridional de la cist, había losas levantadas de la piedra de una cist de 1.2 metros (3.9 pies) de largo y de 0.65 metros (2.1 pies) de ancho. Fue nombrado Tumba del Rey debido a su tamaño, mucho antes de que se supiera que contenía dos entierros. Dado que el sitio ha estado sujeto a numerosos saqueos, no hay hallazgos confiables, pero se cree que las dos tumbas fueron construidas al mismo tiempo.

Después de la excavación, la tumba fue restaurada, pero nadie sabe si se parece a su estado original. Una comparación con otras tumbas contemporáneas sugiere que el sitio podría haber sido tres veces más alto que los 3,5 metros (11 pies) como restaurado. La restauración se basó en grabados del siglo XVIII y conjeturas. Una nueva cámara fue construida de hormigón y un túnel extendido en los cistes. Hoy en día, es posible que los visitantes del sitio para entrar en la tumba y ver las piedras grabadas.

Uno de diez losas de piedra muestra un carro de caballo con dos ruedas de cuatro radios

Una de las losas de piedra muestra personas (ocho en batas largas)

Las piedras de la tumba frente a la tumba de Kivik

Piedras en el cairn de Kivik

Ariel View c. 2004

Dibujo de siglo 18 del sitio por F. G. Feldt Kivik

Botánico Karl Linné describieron el sepulcro en 1749 en su Skanskå Resa, p. 127. La tumba cista consiste en 10 losas de piedra, establecer juntos, cada uno más de 1 metro (casi cuatro pies) de alto por aproximadamente 1 metro ancho y 20-25 centímetros de espesor. Cuatro losas forman cada lado con uno en cada extremo. La tumba puntos norte y sur y una vez fue cubierta con tres grandes capstones. En 1750, los capstones cubriendo la cista se eliminaron por primera vez, revelando imágenes grabadas en la cara interior de 7 de las 8 losas de piedra formando sus paredes laterales. Ni corte ni pulido, las superficies internas que contienen las imágenes son relativamente suaves. Entre las imágenes se encuentran grupos de figuras humanas, incluyendo a músicos; caballos carro y conductor, así como armas de estilo edad de bronce tempranas. Las cifras recién descubierto atrajeron una atención considerable y varios dibujos de ellos se hicieron en la segunda mitad del siglo XVIII, incluyendo ésos por F. G. Feldt, Nils Wessman y C. G. G. Hifleling.  Dos de estas piedras eran considerados perdidos en más de 70 años en el diecinueveavo siglo temprano, pero había sido recuperado a principios del siglo XX. 

Mientras que ninguna interpretación definitiva de estas imágenes puede ser realizado, su afiliación cercana a otros petroglifos de la edad del bronce (sueco: hällristninger; Noruego: helleristningar) en la región ha sido bien documentada y por lo tanto los petroglifos de la tumba de Kivik deben considerarse en el contexto de la gran cantidad de sitios de arte rupestre encontrado en Scandinavia, que data de la edad tardía del bronce (1800-500 A.C.). Una muestra de una gran variedad de estos, ver en las rocas. El área que rodea la tumba es hogar de muchos monumentos de la edad del bronce. El campo sepulcro de Ängakåsen, con un “barco de piedra” miente unos 300 metros de distancia. Desde el campo grave, un camino prehistórico una vez conducido al mar. Otros sitios importantes en la región inmediata incluyen:

 

Skelhøj, en Jutlandia, Sagaholm en norteño Småland y Mjeltehaugem de Giske en Sunnmøre.

  1. Bredarör på Kivik;
  2. Skelhøj on Jutland;
  3. Sagaholm, Northern Småland.

En las losas de piedra hacia el interior de la tumba, son grupos de figuras humanas, a menudo interpretados como participantes en escenas de un drama ritual. Las imágenes de frente hacia adentro hacia la tumba, el individuo enterrado en el cairn es así el presunto foco de la elaborada ceremonia ilustrado en las losas. Las escenas se piensan para representar ritos mortuorios de edad de bronce, símbolos religiosos y ajuares. En las losas de piedra hacia el interior de la tumba, son grupos de figuras humanas, a menudo interpretados como participantes en escenas de un drama ritual. Las imágenes de frente hacia adentro hacia la tumba, el individuo enterrado en el cairn es así el presunto foco de la elaborada ceremonia ilustrado en las losas. Las escenas se piensan para representar ritos mortuorios de edad de bronce, símbolos religiosos y ajuares.


Representación del artista que aparecen en los libros de texto sueco por Arvid Fougstedt, 1936

 

After Harald Faith-Ell, 1942

READING THE RUINS

Cada losa tallada cada uno está enmarcada por una cenefa estilizada, cree que imitar texile ribete por algunos eruditos. El enmarcado de cuadros grabado en las losas se encuentran entre las más notables obras de arte de la edad del bronce. Algunas placas son difíciles de leer debido a un daño y desgaste. Además de esto, un número de imágenes es único en el rock escandinavo talla de tradición, que hace del rey Kivik grave uno de los más notables monumentos arqueológicos en Suecia.

Las cuatro figuras en la parte superior derecha claramente representan a músicos. Tres parecen soplar los cuernos bronce curvados grandes conocidos como Lur, encuentran en Scandinavia. La presencia de jugadores de Lur implica actividad religiosa. El propósito de las dos figuras en el objeto en forma de U en la parte superior izquierda son desconocido, pero pueden representar bateristas de algún tipo.

En el centro, por debajo de los músicos, 8 figuras curvas se reúnen alrededor de una cisterna o un altar. Pueden representar bailarines. Estas cifras drapeadas, que podría llevar batas con capucha, son a menudo identificadas como mujer y comparadas con frecuencia con las figuras aladas y picudas representan ‘dancing’ en otros petroglifos de la edad del bronce y en el tapiz de Oseberg. En este sentido, estas cifras ‘mujeres’ son evocadores de las pájaro-disfraces usados por disir Mitología, como Freyja y Frigg las doncellas cisne de Völundarkviða.

En la parte superior de la tapicería de Oseberg (834 D.C.), también encontramos una procesión de 8 figuras túnica, caminando detrás de un hombre llevando un símbolo, todo conducido por una figura con cuernos disfrazada. Acompañan un carro cubierto, tal vez con un ídolo:

Una escena similar aparece en una piedra Götland del cuadro de la época vikinga:

Procesión de encapuchadas figuras en la piedra del cuadro Bote Garde, Götland
En la fila inferior de la misma piedra en Kivik, 8 figuras masculinas gratuito, se reúnen en dos grupos de cuatro, cada uno antes de una estructura abierta no identificada, quizá un tambor o IVA sacrificial. Sean músicos, sacerdotes o guerreros. A la izquierda, un hombre armado parece llevar a 3 cautivos, sacrificios humanos tal vez. En la piedra adyacente, algunas de las mismas figuras se repiten:

En la parte superior, 4 figuras masculinas se reúnen. Tres parecen ser armado (véase abajo). En la parte inferior de la piedra, una línea de 8 figuras ‘femeninas’ seguir un ‘bailaor’.  En el panel derecho superior, un hombre está parado en un carro, tirado por un par de caballos. En fuentes más últimas divinidades y regalías con frecuencia viajan en esos carros.

Las piedras restantes en Kivik se ilustran con edad de bronce común de símbolos en arte escandinavo antiguo

En el verano de 2014, usando técnicas forenses, arqueólogos Tommy Andersson y Andreas Toreld fueron capaces de recuperar estas imágenes de una de las piedras dañadas. Visite su sitio de documentación completa de su importante labor.

Hacha de la edad del bronce con que cabezas están representadas en dos de las piedras de Kivik junto spoked ‘ruedas del sol’

Bronze Age Axe

Bronze ‘Sun-Wheels’ found near Zürich, Switzerland. 

Dibujos de figuras de la edad del bronce en Grevensvænge, Zelanda en 1779, fecha entre 600-800 AC. Hoy en día, se ha conservado sólo una parte de una de estas figuras (abajo, derecha).

Numerosas figuras similares se han encontrado en los petroglifos. Aquí una figura acrobática salta sobre un barco, en una pose similar a una sola figura que se encuentra en Grevensvænge, Zelanda, junto con las figuras con cuernos, hacha en mano (arriba, derecha)

 

Kuélap

Kuélap

Kuélap o Cuélap es un importante sitio arqueológico preinca ubicado en los Andes nororientales del Perú, en la Provincia de Luya, fue construido por la cultura arqueológica Chachapoyas. Forma un conjunto arquitectónico de piedra de grandes dimensiones caracterizado por su condición monumental, con una gran plataforma artificial, orientada de sur a norte, asentada sobre la cresta de roca calcárea en la cima del Cerro Barreta (a 3000 msnm.). La plataforma se extiende a lo largo de casi 600 metros y tiene como perímetro una muralla que en algunos puntos alcanza 19 metros de altura. Se estima que su construcción debió iniciarse hacia el siglo XI, coincidiendo con el periodo de florecimiento de la cultura Chachapoyas, y su ocupación debió culminar hacia mitades del siglo XVI. Sus colosales murallas y su compleja arquitectura interior son evidencias de su función como un conjunto poblacional bien organizado, que incluye recintos de índole administrativa, religiosa, espacios ceremoniales y de residencia permanente.

Ubicación y acceso

El complejo arqueológico de Kuélap está ubicado en las coordenadas 6°25′9.29″S 77°55′22.85″O, en el departamento de Amazonas, provincia de Luya. Se accede desde la carretera del Leimebamba, dejando la carretera asfaltada a la altura de Nuevo Tingo, cercano a la ribera del Utcubamba, donde el camino prosigue por vía carrozable en ascenso, hasta llegar a una planicie en las proximidades del monumento, donde encontramos un sendero que nos lleva directamente a la Ciudadela. También es posible el acceso por un sendero empinado que parte del poblado de El Tingo, cercano a la ribera del Utcubamba, con un recorrido de 8.9 kilómetros y un desnivel de 1200 metros. A partir del mes de octubre del 2016 se podrá hacer uso de los teleféricos, actualmente en construcción, que a parte de transportar a los turistas desde el pueblo de Nuevo Tingo en tan solo 20 minutos, permitirá disfrutar del majestuoso paisaje en plena ceja de selva.

Descubrimiento

Este monumental exponente de la arquitectura de los chachapoyas permaneció virtualmente ignorado hasta 1843. La razón estriba en lo poco accesible de la zona boscosa y lluviosa en la que se encuentra. En el año referido, al realizar una diligencia en la zona, Juan Crisóstomo Nieto, juez de Chachapoyas, pudo admirar su grandeza guiado por lugareños que ya conocían el sitio arqueológico. Con posterioridad, Kuélap mereció la atención de algunos estudiosos y curiosos en materia de antigüedades. Entre ellos descuella el francés Louis Langlois, que lo analizó en la década de los años 1930, y Adolf Bandelier, que lo describió con anterioridad.

Fachada este de la fortaleza de Kuélap.

Descripción

Frisos en piedra.

Acceso principal

La entrada principal atestigua su uso para personajes de alto estatus, no solamente por su forma y detalles arquitectónicos, sino además, por la ubicación de numerosos bloques de piedra en su construcción que fueron ornamentados con diversos símbolos de tipo religioso que incluyen rostros y animales míticos, serpientes y símbolos de profundo contenido religioso. En este acceso se han mantenido los testimonios del proceso de crecimiento del sitio, incluyendo grandes capas de relleno que permitieron de manera sucesiva la extensión del acceso, tanto en altura como su crecimiento hacia el interior.

Mira una de las tres entradas estrechas a la fortaleza.

Templo Mayor

El Templo Mayor es uno de los centros sagrados de mayor importancia para el monumento. Este edificio en la forma de un cono truncado invertido, tiene 13.5 m. de diámetro en su parte superior, en la cual se han registrado numerosas evidencias de ofrendas diversas en rituales complejos que incluyó el colocar huesos humanos dentro del recipiente interior, que se convirtió así en un gran osario. En torno al edificio se han encontrado diversos entierros humanos y ofrendas que proceden desde la costa norte, como desde la sierra de Ayacucho en el sur y Cajamarca en la sierra norte.

Imagen del interior de la fortaleza

Plataforma circular

La Plataforma Circular, ubicada inmediatamente sobre la muralla sur del sitio, tuvo una función íntimamente vinculada con el Templo Mayor. En esta plataforma debió residir el personaje que tuvo bajo su responsabilidad el funcionamiento del templo. El final de la historia ocupacional de Cuélap, se relaciona con una masacre de grandes proporciones que ocurrió de manera exclusiva dentro de los límites de esta plataforma, que no incluyó mujeres, pero que fue realizada por un grupo local bien organizado, en el marco de un conflicto por el poder. Este hecho fue seguido de un gran incendio que marca los días finales de ocupación del sitio. este triste acontecimiento debió ocurrir alrededor de 1570 cuando se establece el sistema de reducciones de indios por el poder colonial español. En el centro de esta plataforma hubo un osario semejante al que se registró en la parte superior y central del Templo Mayor.

Pueblo Alto

El Pueblo Alto se ubica en la parte norte y oeste del sitio y tiene una muralla que lo delimita y separa del resto del asentamiento. Tiene tres sectores bien definidos, a los cuales se accede por dos accesos, uno que permite ingresar al sector norte y central y el otro que permite el acceso solamente al sector sur, de carácter básicamente residencial.

El Tintero.or.

La Tumba Inca del Pueblo Alto Sur

Dentro de una estructura especial se descubrió una tumba Inca, de un personaje adolescente, con ofrendas de alta calidad, que incluye fina cerámica, objetos de madera muy destruidos y una nariguera de metal. Es posible que se trata de una ofrenda del tipo Capacocha, costumbre Inca en los centros de mayor importancia religiosa del imperio. -Sector Central del Pueblo Alto Este sector debió cumplir una función pública durante los últimos momentos de ocupación. Por esta razón, solamente cuanta con tres estructuras de formas cuadradas y rectangulares, de época Inca, que se superponen a estructurales circulares más antiguas. En el extremo sur de este sector, se ubica una estructura cuadrangular muy destruida, que contenía numerosos entierros humanos primarios y secundarios. Este edificio debió tener un techo a dos o cuatro aguas. Debajo de ella hay evidencias de edificios más antiguos.

Callanca

Vista de Kuelap.

Este es un edificio de época Inca. Es el más grande del sitio, es de forma rectangular y ha sido propuesta su función como Callanca, un edificio que servía durante la época Inca, para propósitos ceremoniales bajo techo, pero también como hospedaje para viajeros o invitados.

El Torreón

Edificio sólido de tipo ceremonial ubicado en el extremo norte del sitio, forma parte del sector norte del Pueblo Alto y colinda con un abismo inaccesible hacia el lado oeste. En la parte superior se encontraron centenares de piedras de naturaleza caliza que fueron redondeadas para ser utilizadas como proyectiles para honda, los que debieron ser utilizados para propósitos ceremoniales, ya que para propósitos defensivos no cumplía un papel significativo. si se utilizó hondas, el espacio superior solo debió permitir la presencia de muy pocas personas, tal vez una sola que las arrojaba hacia el oeste, ya que hacia el este, los techos de las casas vecinas impedía la visibilidad.

Antigüedad y abastecimiento

Es evidente que Kuélap es un monumento anterior al Imperio inca. Considerando su carácter monumental, es indudable que debió desempeñar un papel protagónico en el pasado de la cultura chachapoyas. En efecto, la arquitectura de Kuélap es, en términos generales, la misma que se halla dispersa en el área cultural de los chachapoyas. Lo que no se ha podido precisar hasta ahora es en qué momento del largo proceso de desarrollo de la cultura chachapoyas, cuyos inicios podrían remontarse al siglo VIII, fue levantado el monumento de Kuélap. Asimismo, se desconoce el tiempo que perduró su florecimiento y cuándo y por qué fue abandonado.

Hay otros aspectos que no han podido ser dilucidados, como el transporte de los bloques de piedra hasta lo alto de la montaña y la habilidad de los arquitectos involucrados en la construcción, que supieron dotarla de un sofisticado sistema de drenaje del agua de las lluvias. En la actualidad, por estar obstruidos sus conductos, el monumento se ha ido “hinchando”. Al dilatarse la gran plataforma, las piedras de las murallas que la revisten van desprendiéndose. Tampoco ha quedado aclarado cómo se llevaba a cabo el suministro de agua para sus moradores; tal vez algunos de los recintos carentes de acceso hayan servido como reserva. Los demás recintos, en su gran mayoría, debieron ser almacenes de alimentos a la manera de los tambos incaicos, en los que se solía edificar un conglomerado de graneros.

Función

En cuanto a la función para la que se construyó Kuélap, también se carece de una respuesta satisfactoria. Popularmente, el monumento es calificado de “fortaleza”, por su ubicación y por la solidez y altura de sus muros. Adolf Bandelier, y especialmente Louis Langlois, trataron de demostrar que Kuélap, más que fortaleza, habría podido ser un lugar fortificado destinado a servir de refugio a la población en casos de emergencia. Le atribuyeron, probablemente por analogía, el mismo papel que desempeñaron los burgos en la Europa medieval.

Los altos muros que enchapan la plataforma y la estrechez del acceso a la ciudadela en su tramo final sugieren, en efecto, que el monumento de Kuélap pudo construirse con miras a servir como reducto defensivo, o que por lo menos debió ser un sitio protegido de los intrusos. Pero esta posibilidad no necesariamente anula otras interpretaciones, acaso de mayor trascendencia.

Así, teniendo en cuenta la función desempeñada por la arquitectura monumental en el pasado arqueológico peruano en general, la cual estuvo relacionada con las necesidades socioeconómicas motivadas por el medio, puede concluirse que Kuélap pudo básicamente ser un santuario precolombino en el que residía una poderosa aristocracia cuya misión primaria era administrar la producción de los alimentos, recurriendo para ello al mando y a prácticas mágicas, a fin de contar con la colaboración de los poderes sobrenaturales que gobernaban los fenómenos atmosféricos, que, de no ser bien honrados, podían hacer llover en exceso o azotar a los hombres con sequías que pudieran hacer peligrar su existencia.

Castro Celanova. 

Una gigantesca muralla, que alcanza los 30 metros de altura por 580 de largo nos da la bienvenida. Es la gran barrera pétrea que protege a Kúelap

Una gigantesca muralla, que alcanza los 30 metros de altura por 580 de largo nos da la bienvenida. Es la gran barrera pétrea que protege a Kúelap, la fortaleza de los chachapoyas, los «guerreros venidos de las nubes». Para entender el carácter inexpugnable de esta ciudadela, basta decir que está ubicada sobre la cima de una gran montaña, a 3.000 metros sobre el nivel del mar, y rodeada de precipicios por tres de sus cuatro lados. Para su construcción se utilizaron únicamente enormes bloques de piedra caliza unidos con argamasa.

La otra gran baza defensiva de la fortaleza reside en sus accesos: sólo hay tres puertas, en forma de estrechos callejones (también amurallados) y con una pendiente muy pronunciada. Los tres metros de ancho de la boca de entrada se van reduciendo paulatinamente hasta llegar a unos angostos 70 cm, lo que impedía el acceso a más de una persona a la vez. El mismo concepto defensivo usado, siglos atrás, por 300 espartanos en el paso de las Termópilas.

El legado histórico de Kuélap es fascinante, siendo uno de los pocos restos arqueológicos de Perú que se mantienen bien conservados. Podríamos decir que Kuélap ha tenido suerte: la dificultad de su ubicación y el gran desconocimiento general sobre la cultura de sus constructores han colaborado a preservarlo casi intacto del poder destructivo de la mano del hombre y del turismo masivo. Dentro de la ciudadela, todavía se pueden apreciar 420 casas de las más de 700 que se supone llegó a tener en su máximo apogeo, con sus tres mil habitantes. La zona residencial está conformada básicamente por dos gigantescas plataformas superpuestas, donde se edificaron las viviendas y los espacios ceremoniales. La plataforma superior, de menor superficie que la inferior, es donde se localizan 80 construcciones de mayor tamaño y refinamiento, lo que hace suponer que ésta era la zona aristocrática de Kuélap, los que gozaban de mejores vistas. Entre esas construcciones destaca «El Torreón», situado en la zona norte, con siete metros de altura; erigido sobre una terraza amurallada que ofrece una maravillosa vista panorámica del lugar. «El Tintero» está ubicado en el lado sur de la plataforma inferior, con forma cónica invertida truncada, un diámetro de 15 metros y casi seis de altura. Algunos le han atribuido funciones de observatorio astronómico o de centro ceremonial.

Todas las viviendas en Kuélap son circulares, un sello de identidad de los chachapoyas que los diferencian del concepto constructivo rectangular común en todas las demás culturas andinas. Medían entre cuatro y doce metros de diámetro y sus paredes alcanzaban los cuatro de alto, sin ventanas, para una mayor protección del frío. Los muros estaban decorados con serpientes, aves y figuras geométricas en forma de rombo y zigzag. Estudios recientes nos llevan hasta unas conclusiones sorprendentes y abrumadoras: para la construcción de Kuélap se utilizaron 25 millones de metros cúbicos de material, lo que viene a ser tres veces el volumen usado para levantar la Gran Pirámide de Egipto. Todo indica que su construcción data del año 800 d.C. y aquí vivieron y desarrollaron su cultura los chachapoyas hasta que, en 1470, después de un cruento asedio y duras batallas, fueron conquistados por los íncas.

Las momias de Leymebamba

Durante cinco siglos permanecieron ocultas en la Laguna de los Cóndores, en pleno bosque lluvioso. En noviembre de 1996, un grupo de agricultores encontró, en una de las laderas de la laguna, un conjunto de chullpas (tumbas) chachapoyas, saqueándolas indiscriminadamente y llevándose todo lo que consideraron de valor. Un año más tarde, las autoridades tomaron cartas en el asunto y rescataron 219 momias y varios quipus, un extraño sistema de cuerdas y nudos con los que los chachapoyas anotaban sucesos importantes y llevaban su contabilidad.

En el año 2000, estas momias fueron trasladadas al Museo de Leymebamba, que había sido recientemente inaugurado. Realmente, no es un museo espectacular, hasta que se llega a la sala de las momias… y se enciende la luz: ante nosotros aparecen decenas de cuerpos, algunos envueltos en sus sacos funerarios; otros, los que fueron saqueados, están desnudos, mostrando a la perfección sus rasgos físicos, algo realmente sorprendente, ya que las condiciones climáticas de esta región no son las más idóneas para conservar material orgánico durante cinco siglos. Los cuerpos están reducidos a la mínima expresión, con las extremidades atadas y en una posición similar a la fetal, con los brazos y manos recogidos sobre cuello y cara y un estremecedor rictus de dolor, como si se protegieran de algo que los amenazara.