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Mauritia

Mauritia (continente)

El continente perdido bajo el océano Índico 04/02/2017

Aparece un nuevo continente bajo la isla de Mauricio.

Mauritia pertenece al desaparecido súper continente de Gondwana.

El zircón ha permitido constatar que el nuevo continente tiene millones de años.

Mauritia, situado en el océano Índico.

Mauritia es un pequeño continente prehistórico que múltiples científicos de distintas universidades del mundo indican (aportando sus estudios) haber descubierto en el océano Índico, situado bajo las islas Mauricio y la isla Reunión.1

Un «micro continente» prehistórico, disimulado bajo una espesa capa de lava, que se encuentra a miles de metros de profundidad en el océano Índico. El descubrimiento de este fragmento de continente ha sido bautizado como Mauritia. Este pequeño continente se desprendió hace unos 60 millones de años de Madagascar en el momento en que esa gran isla derivaba en dirección a la formación de la actual India.

Se estima que la formación de los continentes está asociada a menudo a columnas eruptivas, haciendo que durante el proceso (deriva continental) algunos pedazos de esas masas continentales se pierdan.2

Descubrimiento

El continente Mauritia, que científicos, pincipalmente de la Universidad de Oslo que lidera el geólogo Trond H. Torsvik, junto con otros de la Universidad del Witwatersrand y de la Universidad de Liverpool, es el que admiten haber descubierto bajo el océano Índico, siendo un pequeño continente prehistórico.

Estiman que en los últimos 65,5 millones de años se formó en sus mesetas un conjunto de cadenas volcánicas, lo que originó la realización de múltiples estudios. Observando la inversión de la gravedad, se ha descubierto que el suelo del continente es anormalmente espeso.3

Los científicos analizaron arena de las playas de las Islas Mauricio, donde encontraron pequeños cristales de silicato de circonio, formado hace de millones de años, mucho más antiguo que cualquier otra roca en la isla, llegando a la existencia tras múltiples estudios de una masa de tierra a la que han llamado Mauritia.4

Localización

Según indican en sus estudios, Mauritia ocupó la zona donde ahora se encuentra el archipiélago Mascareñas y la meseta adyacente, al este de Madagascar y sudoeste del océano Índico, y actualmente 12°10′49″N 61°10′1″O se extiende en un arco hasta el norte de las islas Seychelles, situándose los restos del antiguo continente desgarrado bajo las islas Mauricio y la Isla Reunión. (ver imagen en referencias)5 6

Fomación y respaldo

Proponen que el pequeño continente se fragmentó tras separarse de Madagascar, formando una línea de cordillera en medio del océano Índico. Durante el periodo de hace 83,5 y 61 millones de años, que produjo la apertura de la cuenca ceada en Mascareñas, hizo que se desprendiese de Madagascar. Fue hundido casi al mismo tiempo que la masa de tierra que actualmente conocemos como la India comenzó a moverse hacia el norte de Madagascar. Indican que la reconstrucción del movimiento de la placa y la gravedad hallada en el terreno respaldan su teoría, estimando que las Seychelles son un fragmento superviviente del continente perdido.7 8

Hace más de 200 millones de años existió un súper continente llamado Gondwana y que albergaba lo que hoy conocemos como África, América del Sur, Antártida, India y Australia. Este lugar de la Tierra contenía rocas de 3,600 millones de años, pero todo el terreno se dividió debido al movimiento de las placas tectónicas. Aún queda mucho por investigar pero, sin ninguna duda, estos científicos no están dando palos de ciego.

La Tierra logra sorprender a los científicos constantemente en cada una de sus investigaciones. Ahora, estos científicos afirman haber descubierto un nuevo continente que se encuentra sumergido bajo la isla Mauricio, en el Océano Índico. Parece ser que se trata de un resto de la separación del súper continente Gondwana, un hecho que ocurrió ya hace 200 millones de años.

El equipo científico, formado por el geólogo Lewis Ashwal, de la Universidad el Witwatersand en Sudáfrica; por Michael Wiedenbeck, del Centro de Investigación Alemán de Geociencias, y por Trond Torsvik, de la Universidad de Oslo en Noruega, han estudiado el proceso de ruptura de los continentes para poder comprender la historia de este nuevo pedazo de tierra que ha aparecido en el Índico.

Restos del súper continente Gondwana aparecen bajo la isla de Mauricio.

Gracias a esto han llegado a la conclusión de que este pedazo de corteza de tierra que han hallado parece ser una pequeña parte del continente antiguo que desapareció en el momento en el que se formó el Océano Índico, al separarse África, la India, Australia y la Antártida. Viajó desde la isla de Madagascar hasta el punto en el que se encuentra en la actualidad.

Ahora bien, ¿Cómo se ha llegado a la conclusión de que pertenece al viejo continente? Pues porque Lewis, Michael y Trond han descubierto que un mineral, llamado zircono, se encuentra en las rocas que han surgido de la lava de las últimas erupciones volcánicas. Estos restos son demasiado antiguos como para pertenecer a la isla de Mauricio.

El resistente proceso geológico del zircono hace posible que estos pueden fecharse con gran precisión.

El zircono son minerales que están producidos en granitos de los continentes y que son muy resistentes al proceso geológico, además de que pueden fecharse con gran precisión. Esto es lo que ha permitido a los científicos averiguar de dónde procedían estos restos rocosos que contienen trazas de uranio, torio y plomo.

La cuestión es que esta no es la primera vez que aparecen zircones de miles de millones de años en una isla. Ya en el año 2013 se encontraron rastros de este mineral en la arena de la playa. No obstante, este trabajo recibió muchas críticas, nada positivas, que aseguraban que el viento era el causante de esta aparición y no la tierra. Aún así, este grupo de científicos sigue insistiendo en que debajo de algunas islas, en este caso la isla de Mauricio, existen restos del antiguo continente.

De este modo, Ashwal ha sugerido que hay existen aún muchas piezas sin investigar de varios tamaños de este continente desconocido ahora llamado Mauritia. Lo que sí que tienen claro estos investigadores es que se trata de los restos del súper continente Gondwana.

Otra información en:

https://www.nature.com/scitable/blog/labcoat-life/the_violent_history_of_mauritia

Ubicación de Mauritia, formando un arco desde Mauricio hasta Seychelles. Fuente: researchgate.net

Ashwal y sus colegas han descubierto que un mineral, el zircono, se encuentra en rocas arrojadas por lava durante las erupciones volcánicas. Los restos de este mineral eran demasiado antiguos para pertenecer a la isla de Mauricio.

“La Tierra está formada por dos partes: los continentes, que son viejos y los océanos, que son jóvenes“. En los continentes se encuentran rocas de más de cuatro mil millones de años, pero no hay nada parecido en los océanos, Es donde se forman nuevas rocas “, explica Ashwal. “Mauricio es una isla, y no hay roca de más de nueve millones de años en la isla, sin embargo, al estudiar las rocas de la isla, hemos encontrado zircones que son tan viejos como tres mil millones de años“.

Los zircones son minerales que se producen principalmente en granitos de los continentes. Contienen trazas de uranio, torio y plomo, y debido al hecho de que sobreviven muy bien al proceso geológico, contienen un rico registro de procesos geológicos y pueden fecharse con gran precisión.

“El hecho de que hayamos encontrado zircones de esta edad demuestra que en Mauricio existen materiales de la corteza terrestre mucho más antiguos, que sólo pudieron originarse en un continente”, dice Ashwal.

El microcontinente de Mauritia

Mauritia debe su nombre a las islas donde fue descubierto: las Islas Mauricio. Sin embargo, su extensión va mucho más allá, ocupando el archipiélago de las Mascareñas y su meseta adyacente, formando un arco desde las Islas Mauricio y las Islas Reunión, en el extremo sur, hasta el norte de las Islas Seychelles en su extremo septentrional.

Durante el periodo Triásico, Mauritia formaba parte del extenso continente de Gondwana, hasta la separación de la India y Madagascar, cuando finalmente Mauritia fue sumergido en el océano, hace unos 85 millones de años.

Pero, ¿qué diferencia a Mauritia del resto de áreas bajo el nivel del mar? Aquí es donde los investigadores de las universidades de Oslo, Liverpool y Witwatersrand han arrojado algo de luz al respecto.

Todo empezó con un estudio que tenía por objetivo comprobar la hipótesis de que las islas volcánicas pueden mostrar evidencias de la existencia de continentes perdidos. Las Islas Mauricio eran un destino perfecto, ya que son relativamente jóvenes, y por lo tanto el espesor geológico de la isla es menor; esto haría más factible encontrar restos que atestiguasen la presencia de otra naturaleza que no fuese volcánica, como así sucedió.

Los científicos hallaron minerales de zircón, uno de los más abundantes de la corteza continental, con una edad de más de 9 millones de años. Esto probaría que el magma de las Islas Mauricio se abrió paso a través de un antiguo continente, y no directamente desde el fondo oceánico, es decir, la corteza oceánica. Este último caso sería, por ejemplo, el de las Islas Canarias.

Sin embargo, la polémica llegó cuando se dieron cuenta de que el equipo de extracción contenía restos de zircón de otros lugares en los que fueron empleados los aparatos, lo que restaba validez a las pruebas encontradas, y contaminaba el área de muestreo.

Pocos años después, algunos miembros del equipo regresaron a las islas para recoger nuevas muestras de dos playas diferentes a la anterior, y los resultados obtenidos ratificaron la hipótesis inicial, apuntando que el zircón encontrado era mucho más longevo que las lavas de las Islas Mauricio, coincidiendo con las edades de los ya conocidos minerales continentales de Madagascar, Seychelles y la India.

Aun así, lejos de despejar las dudas, algunos expertos, como el geólogo Jérome Dyment, afirmaron que se mantenían escépticos ante este descubrimiento, pues las muestras de zircón pudieron ser transportadas por otros medios hasta las islas, como resultado de la acción antropológica. De hecho, el propio Dyment señalaba que si existiesen pruebas reales de un antiguo microcontinente bajo las Islas Mauricio, ya habrían sido descubiertas por los integrantes del experimento franco-alemán (denominado RHUM-RUM) que se llevaba a cabo en las Islas Reunión, y que se encargaban de estudiar el manto terrestre en ese lugar.

No obstante, para Conall Mac Niocaill, geólogo de la Universidad de Oxford, no existe una fuente natural de zircón en Mauricio, y resulta bastante improbable que el mineral haya llegado a las islas por otros medios, naturales o humanos. Así pues, la conclusión más obvia según Mac Niocaill, es que las erupciones volcánicas arrastraron el zircón desde las profundidades hasta la superficie de las islas, donde la lava se solidificó, albergando los minerales de zircón.

Como apunte final, la teoría del geólogo Mac Naiocaill ha demostrado ser cierta, pues un nuevo estudio publicado en la revista británica Nature Communications reconoce la existencia del zircón en las rocas volcánicas, de hasta 3.000 millones de años; y no sólo en la arena de las playas, por lo que esto despeja cualquier atisbo de duda acerca del origen del zircón, y demuestra que Mauritia fue uno de las piezas que formó Gondwana, pero que fue sumergido casi por completo en las aguas del Océano Índico.

Primer globo en otro planeta

Primer globo en otro planeta

Vega 1 y 2

Las Vega 1 y Vega 2 son dos sondas espaciales lanzadas por la URSS en 1984 para cubrir una serie de objetivos, entre ellos la exploración de Venus (sobrevuelos y aterrizaje de dos sondas) y la del cometa Halley (sobrevuelos).

Los objetivos

La misión para estas sondas soviéticas era doble ya que debían realizar un sobrevuelo de Venus y otro (el primero) del cometa 1P/Halley. Para realizar los objetivos se prepararon dos naves idénticas, Vega 1 y Vega 2, que fueron lanzadas el 15 y el 21 de diciembre de 1984 respectivamente.

Primer globo en otro planeta, voló al menos 11.600 km, flotando a una altura de unos 54 km y realizaron transmisiones por alrededor de 46 horas

Tras llevar una sonda de descenso hasta las proximidades de Venus el 11 de junio (Vega 1) y el 15 de junio (Vega 2) de 1985, las sondas cambiaron su rumbo usando la fuerza de la gravedad del planeta y tomando la dirección hacia el cometa Halley para interceptarlo en marzo de 1986.

La primera nave llegó hasta el Halley el 6 de marzo de 1986 con una velocidad relativa entre ambos cuerpos de 77.7 km/s. A pesar de que la sonda tenía una precisión de 100 km, la posición relativa con respecto al núcleo solo podría ser estimada cuando se encontrara a unos pocos miles de kilómetros del cometa. Esto, junto a problemas con los sistemas de protección del polvo hizo que las distancias de sobrevuelo quedaran finalmente a 10.000 km para la primera nave. La segunda nave llegó hasta el Halley el 9 de marzo de 1986.

Vega 1

Características técnicas

Otros nombres de la misión: 1984-125A, Venera-Halley 1, 15432

Nombre de la sonda y globo de descenso: 1984-125E, Vega 1 Balloon Aerostat, Vega 1 Lander, 15858

Aparato de sonda y aterrizaje de sonda del sistema solar Vega (modelo)

Nombres: Venera-Halley 1

Tipo de misión: Ciencia planetaria, incluyendo sonda de aterrizaje y atmosférica

 Operador: Academia Soviética de Ciencias

ID COSPAR

SATCAT no.

  • 15432
  • 15858
  • 15859

Duración de la misión: ~ 2 días (globo)

Propiedades de naves espaciales

Astronave: 5VK No. 901

Tipo de nave espacial: 5VK

Fabricante: NPO Lavochkin

Lanzamiento de masa: Nave espacial: 4,920 kg (10,850 lb); Globo: 21.5 kg (47 lb)

Masa de aterrizaje: 1,520 kg (3,350 lb)

Inicio de la misión

Fecha de lanzamiento: 15 de diciembre de 1984, 09:16:24 UTC

Cohete: Proton 8K82K

Sitio de lanzamiento: Baikonur 200/39

Parámetros orbitales

Sistema de referencia: Geocéntrico

Régimen: Tierra baja

Semieje mayor: 6,558 kilómetros (4,075 mi)

Excentricidad: 0.03080

Perigeo: 159 kilómetros (99 millas)

Apogeo: 202 kilómetros (126 mi)

Inclinación: 51.5 °

Período: 88 minutos

Sobrevuelo de Venus

Enfoque más cercano: 11 de junio de 1985

Distancia: ~ 39,000 kilómetros (24,000 mi)

 

Sonda atmosférica de Venus

Componente de nave espacial: Globo Vega 1

Entrada atmosférica: 02:06:10, 11 de junio de 1985

 

Vender de Venus

Componente de nave espacial: Vega 1 Descent Craft

Fecha de aterrizaje: 03:02:54, 11 de junio de 1985

Lugar de aterrizaje: 42′ E ° N 177,7 ° E (al norte de Aphrodite Terra)

 

Sobrevuelo de 1P / Halley

Enfoque más cercano: 6 de marzo de 1986

Distancia: ~ 10,000 km (6,200 mi)

 

Vega 2

Características técnicas

Otros nombres de la misión: 1984-128A, Venera-Halley 2, 15449

Nombre de la sonda y globo de descenso: 1984-128E, Vega 2 Balloon Aerostat, Vega 2 Lander, 15856

Fecha de lanzamiento: 21 de diciembre de 1984

Hora de lanzamiento: 09:13:52 GMT

Masa seca en órbita: 2500 kg

Las naves

Las naves estaban estabilizadas en los tres ejes y su principal estructura eran los paneles solares, una antena de alta ganancia, una plataforma automática para apuntar los instrumentos que tenía que visualizar constantemente el núcleo del cometa. Esta plataforma podía moverse +/- 110 grados y +/- 40 grados en dos direcciones perpendiculares con una precisión de 5 minutos de arco y una estabilidad de 1 minuto de arco por segundo.

Llevaban una cámara de ángulo ancho y otra de ángulo estrecho, un espectrómetro de tres canales y uno en infrarrojo. Otros experimentos se encontraban en el cuerpo principal de las naves con la excepción de dos magnetómetros montados en un brazo extensible de dos metros y varios sensores de plasma y analizadores de ondas de plasma que estaban en otro brazo de 5 metros. La carga científica pesaba un total de 125 kg y podía enviar los datos a nuestro planeta a una velocidad de 65 kbps en el modo de telemetría rápida durante el encuentro. Además tenía otro modo lento para la fase de crucero.

Los datos científicos del encuentro con el cometa se obtuvieron desde 2,5 horas antes del sobrevuelo hasta media hora después de la máxima aproximación, con varios periodos de adquisición de datos durante 2 horas antes y después de estas fases. Los instrumentos de plasma y de polvo obtenían datos de manera continua y eran almacenados en la memoria de la sonda que tenía una cinta grabadora con una capacidad de 5 megabits.

Las naves llevaban un escudo térmico para protegerse de los impactos del polvo que estaba formado por múltiples capas de un grosor de 100 micrómetros a 20 centímetros de las naves, junto a un escudo de 1 mm de aluminio a 5 centímetros de las naves. La mitad de las sondas Vega era el módulo dedicado al cometa Halley y la otra mitad para los equipos de descenso a Venus. La carga científica total era de 144.3 kg.

El módulo de descenso a Venus

El aterrizador de las Vega 1 y 2 era idéntico al de las misiones Venera 9 hasta la Venera 14 y por lo tanto tenía objetivos similares como el estudio térmico de la atmósfera y de la corteza del planeta. El aterrizador estaba formado por una semiesfera aislada y a presión con absorbedores de choque en un anillo deformable de aterrizaje. En la parte superior esta un disco que servía para realizar el aerofrenado y que también servía como reflector para la antena cilíndrica de comunicaciones que estaba sobre el.

El lander estaba protegido durante la fase de crucero y la entrada atmosférica en Venus por una esfera de protección térmica de 240 centímetros de diámetro, que constaba de dos partes unidas aunque no herméticas.

Instrumentación

Además de los instrumentos de temperatura y presión, la sonda portaba una espectrómetro ultravioleta (ISAV) para medir los componentes menores de la atmósfera, un higrómetro (VM-4) para medir la concentración de H2O, un analizador de aerosoles (IPF), un espectrómetro analizador del tamaño de las partículas (ISAV-A) y otros instrumentos para la determinación de la composición química de la fase condensada: un cromatógrafo de gases (Sigma 3), un espectrómetro de rayos-X (BDRP-AM25) para observar la fluorescencia de los granos, un espectrómetro de masas (de malaquita) para medir la composición química de los granos y las gotas. El espectrómetro de rayos-X separaba los granos de acuerdo a sus tamaños usando un dispositivo láser, mientras el espectrógrafo de masas los separaba según su tamaño usando un separador aerodinámico inercial.

Tras el aterrizaje, se recogía una pequeña muestra cerca de la sonda utilizando un taladrador y era analizado por el espectrómetro de rayos gamma (GS-15-SCV) y un espectrómetro de fluorescencia de rayos-X. El espectrómetro ultravioleta, el espectrógrafo de masas y los instrumentos de medición de temperaturas y presiones fueron desarrollados en cooperación entre investigadores soviéticos y franceses. Los datos recogidos fueron retransmitidos a la sonda Vega 1 y reenviados a la Tierra.

La misión a Venus

El aterrizador se separó de la sonda Vega 1 dos días antes de llegar a Venus y entró en la atmósfera del planeta en una trayectoria inclinada sin realizar maniobras de ningún tipo, como se había hecho en las misiones Venera anteriores. El aterrizador entró en la atmósfera de Venus el 11 de junio de 1985 a las 01:59:49 GMT a una velocidad de 10,75 km/s con un ángulo de entrada de 18,23 grados. El paracaídas piloto fue desplegado a las 02:00:27 GMT (38 segundos después de entrar en la atmósfera) a una altura de 65 kilómetros de la superficie y el paracaídas principal fue abierto 11 segundos más tarde a 64,5 km de altura. En ese instante se desprendió el hemisferio de protección superior y el inferior 4 segundos más tarde a 64,2 km de altura.

El hemisferio superior contenía el sistema para el despliegue del balón aerostático. El paracaídas fue soltado a las 02:09:37 a 47 km de altura sobre la superficie. Tras esto el aterrizador estaba diseñado para usar el aerofrenado contra la densa atmósfera del planeta, con sistemas dispositivos de fricción para minimizar las vibraciones y el giro y proporcionar estabilidad. A una altura de 18 kilómetros un golpe mecánico de origen desconocido (posiblemente debido a una válvula que se soltó en el compartimiento superior) accionó el contacto de un acelerómetro lo que causó el despliegue temprano del taladro del suelo del espectrómetro de rayos-X por fluorescencia. Debido a esto fue imposible usarlo una vez en tierra. Un sistema toroidal similar a los usados en Venera 13 y 14 fue usado para absorber parte del choque en el aterrizaje.

La nave Vega 1 tocó tierra a las 03:02:54 GMT el 11 de junio de 1985 a 7,5 ºN y 177,7 ºE en la zona norte del este de Aphrodite Terra. La altitud en el lugar del aterrizaje fue de 0,6 km sobre el radio medio del planeta. En ese lugar la presión llegó a las 95 atmósferas terrestres y la temperatura de 466 °C. El balón midió ráfagas de viento descendentes de 1 m/s y vientos horizontales de hasta 240 km/h.

La Vega 2 tocó tierra a las 03:00:50 GMT el 15 de junio de 1985 a 8.5° S y 164.5° E, en la zona este de Aphrodite Terra. La altitud en el lugar del aterrizaje fue de 0,1 km sobre el radio medio del planeta. En ese lugar la presión llegó a las 91 atmósferas terrestres y la temperatura de 736 K. Transmitió durante 56 minutos.

Globos Aerostáticos

Además de las sondas de aterrizaje, las naves desplegaron cada una un balón aerostático que portaba instrumentos en un compartimiento sellado y a presión constante. Estos globos fueron soltados a una altura de 54 kilómetros desde el hemisferio superior de protección térmica y constaban con un paracaídas en dos etapas que luego era desplegado y luego inflado.

Cada uno de los globos de 3,4 metros de diámetro portaba una masa de 25 kg. Una carga de 5 kg estaba suspendida 12 metros por debajo del globo. Esta primera fase de la misión se llevaba a cabo a unos 50 km de altura, justo en medio de la capa más activa de la atmósfera de Venus.

Los datos de estos globos fueron enviados directamente hacia la Tierra durante las 47 horas de misión (las baterías tenían una duración máxima de 60 horas). Los instrumentos debían medir las temperaturas, presiones, velocidad vertical de los vientos, visibilidad (densidad y tamaño de los aerosoles), niveles de luz y detección de rayos. Para seguir la nave se usó interferometría de base amplia y se pudo conocer los movimientos del globo y obtener datos de la velocidad de los vientos. Este seguimiento se hizo con 6 antenas en territorio soviético y otras 12 por todo el mundo (coordinadas por Francia y la DSN de la NASA). Tras dos días y 9.000 kilómetros, los globos entraron en la cara diurna de Venus y explotaron por calentamiento debido al Sol.

Sonda del globo Vega en exhibición en el Centro Udvar-Hazy de la Institución Smithsonian

La cápsula Vega 1 Lander / Balloon entró en la atmósfera de Venus (125 km de altitud) a las 2:06:10 UT (hora de la Tierra recibida, hora de Moscú 5:06:10 a.m.) el 11 de junio de 1985 a aproximadamente 11 km / s. Aproximadamente a las 2:06:25 UT, el paracaídas conectado a la tapa de la nave de aterrizaje se abrió a una altitud de 64 km. La tapa y el paracaídas se lanzaron 15 segundos después a 63 km de altitud. El paquete del globo fue sacado de su compartimiento por paracaídas 40 segundos después a 61 km de altitud, a 8.1 grados N, 176.9 grados este. Un segundo paracaídas se abrió a una altitud de 55 km, 200 segundos después de la entrada, extrayendo el globo enrollado. El globo se infló 100 segundos después a 54 km y el paracaídas y el sistema de inflado se descartaron. El lastre se descartó cuando el globo alcanzó aproximadamente 50 km y el globo flotó de nuevo a una altura estable entre 53 y 54 km, unos 15 a 25 minutos después de la entrada.

La altura estable promedio fue de 53,6 km, con una presión de 535 mbar y una temperatura de 300-310 K en la capa media, más activa del sistema de nubes de tres niveles de Venus. El globo se desplazó hacia el oeste en el flujo de viento zonal con una velocidad promedio de aproximadamente 69 m / s (248 km / h) a una latitud casi constante. La sonda cruzó el terminador de noche a día a las 12:20 UT del 12 de junio después de atravesar 8500 km. La sonda continuó funcionando durante el día hasta que la transmisión final se recibió a las 00:38 UT del 13 de junio desde 8.1 N, 68.8 E después de una distancia total de 11.600 km o alrededor del 30% de la circunferencia del planeta. No se sabe cuánto más viajó el globo después de la comunicación final. [2]

Misión Halley

Después de sus encuentros, las naves nodrizas de Las Vegas utilizaron la gravedad de Venus, también conocida como ayuda de gravedad, para interceptar el cometa de Halley.

La misión al Halley

Tras su encuentro con el planeta Venus, la sonda Vega 1 continuó su viaje para interceptar al cometa Halley. Vega 1 realizó su mayor aproximación al núcleo del Halley el 6 de marzo a tan sólo 8.890 kilómetros de distancia. El examen intensivo del cometa se realizó durante las tres horas alrededor del momento de mayor aproximación y se midieron los parámetros físicos del núcleo como las dimensiones, la forma, la temperatura y las propiedades de la superficie, así como la estructura y dinámica de la coma y la composición del gas cerca del núcleo, así como el tamaño y distribución de masas de las partículas en función a la distancia del núcleo y su interacción con el viento solar.

Las primeras imágenes llegaron el 4 de marzo y fueron usadas para guiar con más precisión a la sonda europea Giotto. Las primeras imágenes mostraron dos áreas brillantes en el cometa, lo que inicialmente fue explicado como un doble núcleo. Las áreas brillantes alrededor después resultaron ser dos chorros que salían del cometa. Las imágenes también mostraron un núcleo oscuro con una temperatura entre 26 y 126 °C mucho más cálido de lo esperado para un cuerpo helado. La conclusión fue que una delgada capa cubría al núcleo helado del cometa.

Las imágenes obtenidas por la sonda mostraron un núcleo de unos 14 kilómetros de largo y con un periodo de rotación de unas 53 horas. El espectrómetro de masas del polvo detectó materiales con una composición similar a los meteoritos denominados condritas carbonaceas y además detectó clatratos helados.

Vega 1 hizo su aproximación más cercana el 6 de marzo a alrededor de 8,889 kilómetros (a las 07:20:06 UT) del núcleo. Tomó más de 500 imágenes a través de diferentes filtros mientras voló a través de la nube de gas alrededor del coma. Aunque la nave espacial fue golpeada por el polvo, ninguno de los instrumentos fue desactivado durante el encuentro.

El examen intensivo de datos del cometa cubrió solo las tres horas de aproximación más cercana. Estaban destinados a medir los parámetros físicos del núcleo, como dimensiones, forma, temperatura y propiedades de superficie, así como a estudiar la estructura y dinámica del coma, la composición del gas cerca del núcleo, la composición de las partículas de polvo y distribución de masa como funciones de la distancia al núcleo y la interacción del cometa- viento solar.

Las imágenes de Vega mostraron que el núcleo tenía unos 14 km de largo con un período de rotación de aproximadamente 53 horas. El espectrómetro de masas de polvo detectó material similar a la composición de meteoritos de condritas carbonáceas y también detectó hielo de clatrato.

Después de sesiones de imágenes subsiguientes los días 7 y 8 de marzo de 1986, Vega 1 se dirigió al espacio profundo. En total, Vega 1 y Vega 2 devolvieron unas 1500 imágenes del cometa Halley. Vega 1 se quedó sin propelente de control de actitud el 30 de enero de 1987, y el contacto con Vega 2 continuó hasta el 24 de marzo de 1987.

Vega 1 se encuentra actualmente en órbita heliocéntrica, con perihelio de 0.70 UA, afelio de 0.98 UA, excentricidad de 0.17, inclinación de 2.3 grados y período orbital de 281 días.

La sonda espacial soviética ‘Vega 1’ manda las primeras fotografías del núcleo del cometa Halley

Marilo Ruiz de Elvira

Moscú 7 MAR 1986

El cometa Halley tiene un núcleo sólido de unos cuatro kilómetros de diámetro, mientras que las partículas de polvo de su cola -más densa de lo que en un principio se había pensado- tienen un tamaño 1.000 veces mayor que las del humo del tabaco. La estación automática soviética Vega 1 atravesó ayer la envoltura de gas y polvo del cometa a una distancia de 9.000 kilómetros de su núcleo, y realizó por primera vez investigaciones científicas en directo sobre este cuerpo celeste, según anunció en Moscú la plana mayor de los equipos investigadores de los nueve países participantes en el proyecto internacional Venus-Cometa Halley.

Los periodistas congregados en Moscú para asistir al 27º Congreso del Partido Comunista de la URSS (PCUS) pudieron contemplar ayer las primeras imágenes tomadas por la estación Vega 1; en primer lugar, las hechas el 4 de marzo a una distancia de 14 millones de kilómetros Y, posteriormente, las enviadas ayer desde unos 8.000 ó 9.000 kilómetros. Las fotografías tomadas ayer fueron realizadas en el curso de una sesión de tres horas de mediciones científicas filmaciones. La utilización de diversos filtros permitió obtener imágenes en color del cometa y su núcleo, éste de color rojo por tratarse de un núcleo caliente del que emana luz. Según datos telemétricos, los sistemas de a bordo de la estación planetaria conservan su capacidad de trabajo y funcionan normalmente después de haber atravesado la envoltura de gas y polvo del cometa.

Nueve países

El resultado de las observaciones permitirá, una vez analizadas, determinar la trayectoria de desplazamiento del cometa. Los datos así obtenidos serán entregados a la Agencia Espacial Europea para su empleo en la aproximación de la sonda europea Giotto, el próximo día 13, a solo 500 kilómetros del núcleo del cometa. Los nueve países participantes -URSS, Austria, Bulgaria, Hungría, República Democrática Alemania, Polonia, Francia, República Federal de Alemania y Checoslovaquia- han hecho posible que ayer se pudieran obtener imágenes de gran definición del núcleo del cometa, al tiempo que se realizaban mediciones de la temperatura y de otras características físico-químicas del Halley. Asimismo, se analizó la composición química del gas y del polvo que componen el cometa, se investigaron los campos electromagnéticos en sus alrededores y los procesos físicos que se operan en su envoltura gaseosa.

Las fotografías ahora obtenidas sirven al hombre para ver por primera vez el núcleo de un cometa, debido a que los gases y el polvo impedían su exploración desde la Tierra. Los científicos se mostraron ayer altamente satisfechos de la exactitud de sus previsiones así como de la forma en que se está desarrollando la investigación.

Los investigadores se muestran confiados en que este proyecto pueda servir para aportar datos acerca de la evolución de la Tierra en sus -primeros 1.000 millones de años de existencia. La utilización pacífica del espacio se puso ayer como contrapunto a la militarización que, en opinión de los científicos soviéticos, propugna Estados Unidos.

El polvo que rodea el cometa está distribuido de forma irregular, según se expuso ayer. “Llega en oleadas”, explicó uno de los numerosos científicos presentes en la conferencia de prensa, quienes prefirieron no adelantar datos sobre su composición, en espera de un análisis aún más detallado. El plasma y el gas están fragmentados; no poseen una estructura molecular regular, añadieron.

Los experimentos continuarán durante el fin de semana, con la aproximación, a menor distancia del núcleo del cometa, de la nave Vega 2, gemela de la Vega 1.

Zelandia

Zelandia (continente)

Topografía de Zealandia. Las líneas que se marcan al norte,al noreste y al suroeste lejos de Nueva Zelanda no son consideradas parte del continente. Tampoco Australia, Fiyi ni Vanuatu.

El continente de Zealandia, también llamado Zelandia,1Tasmantis o continente de Nueva Zelanda, es un continente casi sumergido que se hundió después de separarse de Australia, hace 60-85 millones de años, y de la Antártida hace 130-185 millones de años.2​ Se acabó de sumergir hace aproximadamente 23 millones de años34​ y la mayor parte está hundida (alrededor del 93 %) bajo el océano Pacífico.

Tiene un área de 4 900 000 km²,5​ es más grande que Groenlandia o la India y más de la mitad del tamaño de Australia. Es excepcionalmente largo y estrecho, desde Nueva Caledonia al norte hasta más allá de las islas subantárticas de Nueva Zelanda por el sur. Nueva Zelanda es la porción más grande del continente sobre el nivel del mar, seguida de Nueva Caledonia.

Zealandia, ¿el continente oculto de la Tierra?

La enorme masa terrestre, formada por Nueva Zelanda y otras islas, está en su mayor parte sumergida

Puede que un continente entero haya pasado desapercibido a nuestros ojos. Un grupo de geólogos asegura que se encuentra sumergido en el suroeste del Océano Pacífico, una amplísima extensión de terreno bajo el agua de la que sobresalen Nueva Zelanda, Nueva Caledonia y otras islas, y que tiene entidad suficiente para ser considerada una masa continental separada, a la que llaman Zealandia. La propuesta aparece publicada en la revista GSA Today, de la Sociedad Geológica de América.

Zealandia cubre 4,9 millones de km cuadrados, de los cuales el 94% están bajo el agua. El equipo del Instituto de Investigación GNS Science de Nueva Zelanda cree que se trata de una entidad geológica claramente distinta, ya que cumple con todos los criterios aplicados a los otros continentes, como la elevación del terreno por encima de los alrededores, una geología distintiva, un área bien definida y una corteza más gruesa que la que se encuentra en el fondo del océano. Abarca Nueva Zelanda, Nueva Caledonia, Isla Norfolk y la Isla de Lord Howe.

No es la primera vez que Zealandia se propone como continente. El asunto ha sido objeto de debate desde hace dos décadas, pero los autores del último trabajo están cada vez más convencidos de su existencia.

La razón geológica

Si esta propuesta fuera aceptada por la comunidad científica, Zealandia se convertiría en el séptimo continente según el modelo tradicional que incluye Europa, Asia, América, África, Oceanía y la Antártida. Hay otros modelos que dependen del área cultural: « ¿Son América del Norte y América del Sur continentes verdaderamente independientes con su conexión a través del istmo de Panamá? ¿Dónde y por qué se pueden distinguir Europa, África y Asia teniendo en cuenta la Península del Bósforo y del Sinaí?», se preguntan los investigadores. Ellos sugieren una razón geológica para dividir los continentes, de forma que sean grandes áreas identificables que yacen sobre la corteza continental. Este razonamiento es lo que les lleva a pensar que Zealandia también debería tener su propia identidad. Según ellos, uno solo tiene que mirar un mapa barimétrico para apreciar la cuestión.

Zelandia abre interrogantes sobre la división del continente Gondwana EFE 24.02.2017 – 18:44h

Tras el hallazgo de Zelandia, el verdadero reto es poder desentrañar las claves de la separación de Gondwana.

A diferencia de Zelandia, los otros restos de Gondwana, como los hallados en Mauricio, se fragmentaron bajo el Índico.

Zelandia Ubicación del continente perdido de Zelandia, donde se ubica Nueva Zelanda. GSA

El nombre de Gondwana comienza a ser popular para el público. Un antiguo supercontinente del que, poco a poco, se van conociendo nuevos detalles bajo las aguas, como la existencia de Zelandia, aunque ahora el verdadero reto es “poder desentrañar las claves de su separación”.

 El último hallazgo, publicado esta semana, fue la identificación de Zelandia bajo las aguas entre Australia, Nueva Caledonia y Nueva Zelanda, que formaba parte del territorio sumergido del gran Gondwana junto a otros fragmentos subacuaticos hallados en islas Mauricio (océano Índico), y en el Mar de Tasman (Pacífico Sur).

Todos esos fragmentos “eran parte de Gondwana que incluyen (en su parte visible) a África, Antártica, India, Sudamérica y Australia”, explicó a Efe, Nick Mortimer, autor de un reciente artículo en la revista de la Sociedad Geológica de Estados Unidos (GSA, en inglés).

Mortimer, quien trabaja en el centro de investigación geocientífica de Nueva Zelanda (GNS, en inglés), consideró que si bien en la actualidad ya se conoce casi la totalidad el territorio sumergido de Gondwana, el verdadero reto es poder desentrañar las claves de su separación.

“Es importante resolver cómo y por qué se dividió este continente, hay varias teorías pero esperamos que ciertamente Zelandia contribuya a entender esto dado a que fue a parar debajo del agua”, agregó Mortimer.

 Zelandia, cuyo nombre fue propuesto por primera vez por el geofísico Bruce Luyendyk en 1995, abarca unos 4,9 millones de kilómetros e incluye a Nueva Zelanda y Nueva Caledonia, aunque el 94 por ciento de su territorio se encuentra bajo el océano Pacífico.

El nuevo descubrimiento representaba el 5 % de Gondwana y estuvo unido al este de Australia y a la Antártica Occidental hasta que esa porción de tierra comenzó a subdividirse hace entre 100 a 85 millones de años, es decir más tarde que el resto del continente.

“Esa parte de la corteza de Gondwana se estiró por un período de tiempo de unos 15 millones de años y al hacerlo se adelgazó y se dividió. De esta manera las partes se difundieron y en ese proceso Zelandia y Antártica Occidental quedaron debajo del océano”, precisó el geólogo.

Por el contrario, “la mayoría de los continentes formados a partir de Gondwana no sufrieron ese proceso de estiramiento y adelgazamiento y se quedaron en las alturas y sobre el nivel del agua”, agregó Mortimer, al remarcar que esto es uno de los aspectos en que se centrarían las investigaciones futuras.

 Zelandia tras la separación atravesó por diferentes fases de deformación intracontinental hasta acabar con la actual forma y localización, pero no se desintegró.

“Que un continente pueda estar tan sumergido pero no fragmentado hace que sea útil y geodinámicamente provocador para el análisis de la cohesión y desintegración de la corteza continental”, según el estudio de Mortimer, en el que participaron la neozelandesa Universidad Victoria, el Servicio Geológico de Nueva Caledonia y la Universidad de Sídney.

A diferencia de Zelandia, cuyo grosor de la corteza varía de 10 a 30 kilómetros, los otros restos de Gondwana, como los hallados recientemente en Mauricio, se fragmentaron bajo el Índico.

El descubrimiento de estos pedazos, que fue publicado a principios de mes en la revista británica Nature Communications, se produjo a partir del hallazgo sobre la superficie de la isla de unos minerales denominados zircones de hace 3.000 millones de años.

Sus descubridores creen que son parte de una pequeña pieza de Gondswana que se rompió desde la isla de Madagascar, cuando África, la India, Australia y la Antártica se separaron.

De acuerdo con los resultados de este estudio en Mauricio, la ruptura no implicó “una simple división del supercontinente Gondwana”, sino más bien una “fragmentación compleja que tuvo lugar con fragmentos de corteza continental de tamaños variables dejados a la deriva dentro de la cuenca del océano Índico en evolución”.

Arranca la expedición al continente oculto de Zelandia

Un barco de perforación partirá desde Australia para buscar evidencias de la gran masa sumergida que una vez formó parte de la Antártida

Alrededor de Nueva Zelanda hay una masa de corteza terrestre de la mitad del tamaño de Australia. Es el continente llamado Zelandia, y lo que lo hace diferente de otros es que más del 90% de su territorio está sumergido. Esto es lo que creen un grupo de geólogos, que en febrero anunciaron su particular hipótesis y que ahora van a embarcarse en una expedición de perforación oceánica decididos a desentrañar los secretos de ese continente oculto.

Un total de 30 investigadores partirán el 27 de julio en la expedición, auspiciada por la National Science Foundation (NSF), para buscar pistas sobre la historia de Zelandia. Los participantes navegarán desde Townsville, Australia, a bordo del Joides Resolution, uno de los buques de perforación científica más sofisticados del mundo. Alcanzarán profundidades de 300 a 800 metros para recoger del fondo marino muestras completas de sedimentos depositados durante millones de años. Esas evidencias fósiles servirán a los científicos para armar un registro detallado del pasado del continente, que en un pasado estuvo unido a la Antártida.

«Hace aproximadamente 100 millones de años, la Antártida, Australia y Zelandia formaban un continente», dice Gerald Dickens, geocientífico de la Universidad de Rice y científico jefe de la expedición. «Hace unos 85 millones de años, Zelandia se separó por su cuenta, y por un tiempo, el fondo marino entre él y Australia se extendía a ambos lados de una cresta oceánica que separaba a ambos».

Movimiento de placas

Los movimientos relativos de Zelandia y Australia se deben a la tectónica de placas, el movimiento constante de las secciones entrelazadas de la superficie de la Tierra. La expedición examinará un cambio masivo en el movimiento de placas que ocurrió hace unos 50 millones de años en dirección a la enorme Placa del Pacífico, al noreste de Zelandia, lo que provocó el levantamiento de Nueva Zelanda por encima de la línea de flotación y el desarrollo de un nuevo arco de volcanes. La investigación también puede responder a preguntas sobre la forma en que el clima de la Tierra ha evolucionado en los últimos 60 millones de años.

Si Zelandia fuera aceptado como continente por la comunidad científica, se convertiría en el séptimo, según el modelo tradicional que incluye Europa, Asia, América, África, Oceanía y la Antártida. Hay otros modelos que dependen del área cultural, pero los investigadores sugieren una razón geológica para dividir los continentes, de forma que sean grandes áreas identificables que yacen sobre la corteza continental. Este razonamiento es lo que les lleva a pensar que Zelandia también debería tener su propia identidad. Sea así o no, las respuestas a los misterios de Zelandia pronto podrían ser reveladas.

El desconocido y misterioso continente que se esconde debajo de Nueva Zelanda

(Foto: Nature/GSA)

Ubicación de Zelandia.

Paseo espacial mujer astronauta de EE.UU.

STS-41-G

Primer paseo espacial de una astronauta de EE.UU.

STS-41-G. ERBS durante la implementación

Tipo de misión: Despliegue satélite Imágenes de radar

Operador: NASA

ID COSPAR: 1984-108A

SATCAT no.: 15353

Duración de la misión: 8 días, 5 horas, 23 minutos, 33 segundos

Distancia recorrida: 5,293,847 kilómetros (3,289,444 mi)

Órbitas completadas: 133

Propiedades de naves espaciales

Astronave: Space Shuttle Challenger

Lanzamiento de masa: 110,120 kilogramos (242,780 lb)

Masa de aterrizaje: 91,746 kilogramos (202,266 lb)

Masa de carga útil: 8,573 kilogramos (18,901 lb)

Tripulación

Tamaño de la tripulación: 7

Miembros:

Robert L. Crippen
Jon A. McBride
Kathryn D. Sullivan
Sally K. Ride
David C. Leestma
Paul D. Scully-Power
Marc Garneau

 EVAs: 1

EVA duración: 3 horas, 29 minutos

Inicio de la misión

Fecha de lanzamiento: 5 de octubre de 1984, 11:03:00 UTC

Sitio de lanzamiento: Kennedy LC-39A

Fin de la misión

Fecha de aterrizaje: 13 de octubre de 1984, 16:26:33 UTC

Lugar de aterrizaje: Kennedy SLF Runway 33

Parámetros orbitales

Sistema de referencia: Geocéntrico

Régimen: Tierra baja

Perigeo: 351 kilómetros (218 mi)

Apogeo: 391 kilómetros (243 mi)

Inclinación: 57.0 grados

Período: 92.0 min

Época: 7 de octubre de 1984 [1]

Abajo (De izquierda a derecha) Jon A. McBride, Piloto, Sally K. Ride, Kathryn D. Sullivan y David C. Leestma, Especialistas de Misión. Arriba (LR) Paul D. Scully-Power, Especialista en carga útil; Robert L. Crippen, comandante, y Marc Garneau, especialista canadiense en carga útil. La réplica de un pin de astronauta dorado cerca de McBride significa unidad.

Programa de transbordador espacial

STS-41-D

STS-51-A

STS-41-G fue el 13 ° vuelo del programa Space Shuttle de la NASA y el sexto vuelo del transbordador espacial Challenger. Challenger lanzó el 5 de octubre de 1984 y realizó el segundo transbordador en el Centro Espacial Kennedy el 13 de octubre. Fue la primera misión del transbordador para llevar una tripulación de siete personas, incluyendo el primer equipo con dos mujeres (Sally Ride y Kathryn Sullivan), el primer EVA estadounidense que involucra a una mujer (Sullivan), la primera persona de origen australiano en viajar al espacio y el primer astronauta con barba (Paul Scully-Power) y el primer astronauta canadiense (Marc Garneau).

STS-41-G fue la tercera misión del transbordador en llevar una cámara IMAX a bordo para documentar el vuelo. Las imágenes de la película de la misión (incluyendo EVA de Sullivan y David Leestma) aparecieron en la película de IMAX, The Dream is Alive .

Equipo

Posición Tripulante
Comandante Robert L. Crippen
Cuarto y último vuelo espacial
Piloto Jon A. McBride
Solo vuelo espacial
Especialista de Misión 1 Kathryn D. Sullivan
Primer vuelo espacial
Especialista de Misión 2 Sally K. Ride
Segundo y último vuelo espacial
Especialista de Misión 3 David C. Leestma
Primer vuelo espacial
Especialista de carga útil 1 Paul D. Scully-Power
Solo vuelo espacial
Especialista de carga útil 2 Marc Garneau, CSA
Primer vuelo espacial

Equipo de respaldo

Posición Tripulante
Especialista de carga útil 1 Robert E. Stevenson
Primer vuelo espacial
Especialista de carga útil 2 Robert Thirsk, CSA
Primer vuelo espacial

Paseo espacial

  • Leestma y Sullivan – EVA 1
  • EVA 1 Inicio: 11 de octubre de 1984
  • EVA 1 Fin: 11 de octubre de 1984
  • Duración: 3 horas, 29 minutos

Asignaciones de asiento de tripulación

Asiento [2] Lanzamiento Aterrizaje
Los asientos 1-4 están en la cubierta de vuelo. Los asientos 5-7 están en el Middeck.
S1 Crippen Crippen
S2 McBride McBride
S3 Sullivan Leestma
S4 Paseo Paseo
S5 Leestma Sullivan
S6 Scully-Power Scully-Power
S7 Garneau Garneau

Resumen de la misión

Despliegue de antena SIR-B.

Sullivan durante el EVA.

El 5 de octubre de 1984, Challenger se lanzó desde el Centro Espacial Kennedy a las 7:03 a.m. EDT, marcando el inicio de la misión STS-41-G. A bordo había siete tripulantes, la tripulación de vuelo más grande que alguna vez haya volado en una sola nave espacial en ese momento. Incluyeron al comandante Robert L. Crippen, haciendo su cuarto vuelo de transbordador y segundo en seis meses; el piloto Jon A. McBride; tres especialistas de misión: David C. Leestma, Sally K. Ride y Kathryn D. Sullivan, y dos especialistas en carga útil, Paul Scully-Power y Marc Garneau, el primer ciudadano canadiense en servir como miembro de la tripulación del transbordador, así como el primer canadiense en el espacio. La misión también marcó la primera vez que dos mujeres astronautas volaron juntas.

Sullivan se convirtió en la primera mujer estadounidense en caminar en el espacio cuando ella y Leestma realizaron un EVA de 3 horas el 11 de octubre, demostrando el Sistema de reabastecimiento orbital (ORS) y probando la viabilidad de repostar satélites en órbita.

Nueve horas después del despegue, el brazo del robot RMS desplegó el satélite de presupuesto de radiación terrestre (ERBS) de 5.087 libras (2.307 kg) desde la bahía de carga útil, y sus propulsores a bordo lo impulsaron a una órbita de 350 millas (560 km) sobre la Tierra . ERBS fue el primero de los tres satélites planificados diseñados para medir la cantidad de energía recibida del Sol y re-irradiada al espacio. También estudió el movimiento estacional de la energía desde los trópicos a las regiones polares .

Otra actividad importante de la misión fue la operación del Shuttle Imaging Radar-B (SIR-B). El SIR-B formaba parte del paquete de experimentos OSTA-3 en la bahía de carga, que también incluía la cámara de gran formato (LFC) para fotografiar la Tierra, otra cámara llamada MAPS que medía la contaminación del aire y un experimento de identificación y localización de características llamado ARCHIVO, que consistía en dos cámaras de TV y dos cámaras fijas de 70 mm.

Imagen de muestra tomada con el SIR-B en Canadá.

El SIR-B era una versión mejorada de un dispositivo similar volado en el paquete OSTA-1 durante STS-2. Tenía un conjunto de antenas de ocho paneles que miden 35 pies por 7 pies (11 m por 2 m). Funcionó durante todo el vuelo, pero se encontraron problemas con la antena de la banda K u del Challenger, y por lo tanto, gran parte de los datos debieron registrarse a bordo del orbitador en lugar de transmitirse a la Tierra en tiempo real como se planeó originalmente.

La especialista en cargas útiles Scully-Power, una empleada del Laboratorio de Investigación Naval de los EE. UU., Realizó una serie de observaciones de oceanografía durante la misión. Garneau realizó una serie de experimentos patrocinados por el gobierno canadiense, llamados CANEX, que estaban relacionados con la ciencia médica, atmosférica, climática, de materiales y robótica. También se utilizaron varios cartuchos de GAS, que cubren una amplia variedad de pruebas de materiales y experimentos de física.

Más tarde se hizo un reclamo de que el centro soviético de pruebas láser Terra-3 se utilizó para rastrear a Challenger con un láser de baja potencia el 10 de octubre. Supuestamente, esto causó el mal funcionamiento del equipo a bordo y el cegamiento temporal de la tripulación, lo que provocó una protesta diplomática de los EE. UU.[3] Sin embargo, esta historia ha sido completamente negada por los miembros de la tripulación.[4]

Durante la misión de 8 días, 5 horas, 23 minutos y 33 segundos, Challenger recorrió 3,289,444 millas (5,293,847 km) y completó 132 órbitas. Aterrizó en el Centro de aterrizaje del transbordador en el Centro Espacial Kennedy – convirtiéndose en la segunda misión de transbordador para aterrizar allí – el 13 de octubre de 1984, a las 12:26 p.m. EDT.[5]

La misión STS-41-G fue descrita más adelante en detalle en el libro Oceans to Orbit: La historia del primer hombre en el espacio de Australia, Paul Scully-Power del historiador del espacio Colin Burgess.

Insignia de la misión

Las trece estrellas completas en el campo azul de la bandera de EE. UU. De la insignia de la misión simbolizan la designación numérica del vuelo en la secuencia de misión del Sistema de Transporte Espacial (las 17 estrellas en el campo negro indicaban la designación original del vuelo como STS-17). Los símbolos de género se colocan al lado del nombre de cada astronauta, y se coloca un icono de bandera canadiense junto al nombre de Garneau.

Llamadas de despertador

La NASA comenzó una tradición de tocar música para los astronautas durante el programa Gemini , y primero utilizó la música para despertar a un equipo de vuelo durante el Apollo 15 . Cada pista es especialmente elegida, a menudo por las familias de los astronautas, y generalmente tiene un significado especial para un miembro individual de la tripulación, o es aplicable a sus actividades diarias. [6]

Día de vuelo Canción Artista / Compositor
Dia 2 “Flashdance: qué sensación” Irene Cara
Día 3 “Tema de Rocky Bill Conti

Kathryn D. Sullivan

Kathryn D. Sullivan

Nombre de nacimiento: Kathryn Dwyer Sullivan

Nacimiento: 3 de octubre de 1951: Paterson, Estados Unidos

Nacionalidad: Estadounidense

Educada en

Información profesional

Ocupación

Astronauta y geóloga

Cargos ocupados

  • Under Secretary of Commerce for Oceans and Atmosphere (2014–2017)

Empleador

Miembro de

Distinciones

Kathryn Dwyer Sullivan (Nueva jersey, Estados Unidos, 3 de octubre de 1951) es una geóloga y astronauta estadounidense de la NASA. Ha sido tripulante en tres misiones de transbordadores espaciales y fue la primera mujer estadounidense en caminar en el espacio, el 11 de octubre de 1984. Es la Under Secretary of Commerce for Oceans and Atmosphere y Administradora de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA)1​ después de ser confirmada por el Senado de los Estados Unidos el 6 de marzo de 2014. El mandato de Sullivan finalizó el 20 de enero de 2017, con la toma de posesión del presidente Donald Trump. Después de completar su servicio en el NOAA, fue designada como la Cátedra Charles A. Lindbergh de Historia Aeroespacial en el Museo Nacional del Aire y el Espacio de la Institución Smithsonian en 2017,2​ y también se desempeñó como miembro principal en el Instituto de Política Potomac Estudios.

Biografía

Kathryn Sullivan nació en Paterson, Nueva Jersey, y se graduó en 1969 en la Escuela Secundaria William Howard Taft en el distrito de Woodland Hills en Los Ángeles, California. Realizó un Bachelor of Science de ciencias de la Tierra de la Universidad de California, en Santa Cruz en 1973, y un doctorado en Ciencias en Geología por la Universidad de Dalhousie, en 1978. Mientras estuvo en Dalhousie, participó en varias expediciones oceanográficas para estudiar los suelos de los océanos Atlántico y Pacífico.31

En 1988, Sullivan se unió a la Reserva Naval de los Estados Unidos como oficial de oceanografía, y se jubiló con el rango de capitán en 2006. Ha sido científica jefe de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica. Antes de unirse a la NASA trabajó en Alaska como oceanógrafa.31

Carrera en la NASA

Fue seleccionada por la NASA en enero de 1978, y se convirtió en astronauta en agosto de 1979. Sus tareas de apoyo al Shuttle desde entonces incluyen: desarrollo de software; lanzamiento y aterrizaje de fotógrafo perseguidor de plomo; Prueba de orbiter y carga, pago y soporte de lanzamiento en el Centro Espacial Kennedy, Florida; actividad extravehicular (EVA), equipo de apoyo de traje espacial para varios vuelos y comunicadora de cápsula (CAPCOM) en control de misiones para varias misiones del Shuttle. Veterana de tres vuelos espaciales, Sullivan voló como especialista en misión en la STS-41G, la STS-31 y la STS-45. Sullivan fue la primera mujer estadounidense en realizar una actividad extravehicular (EVA), durante la misión STS-41-G.34

Después de dejar la NASA en 1993, se desempeñó como presidenta y CEO del COSI Columbus, un centro de ciencias interactivo en Columbus, Ohio y como directora del Centro Battelle de la Universidad Estatal de Ohio para la Política de Educación en Matemáticas y Ciencias, así como asesora científica voluntaria de COSI. Bajo su liderazgo, COSI fortaleció su impacto en la enseñanza de las ciencias en el aula y su reputación nacional como innovadora de recursos de aprendizaje práctico basados en la investigación. Fue nombrada para el Consejo Nacional de Ciencias por el presidente George W. Bush en 2004.3

En 2009, Sullivan fue elegida por tres años como presidenta de la Sección de Interés General en Ciencia e Ingeniería de la Asociación Estadounidense para el Avance de la Ciencia.

En enero de 2011, la Casa Blanca envió al Senado la nominación de Sullivan por el presidente Barack Obama para ser secretaria de comercio adjunto. Fue nominada por primera vez en diciembre de 2010, pero debido a que el Senado no aprobó su nominación y un grupo de otros se envió a fines de diciembre, la Casa Blanca reiteró las solicitudes formales.

El 4 de mayo de 2011, fue confirmada por el consentimiento unánime del Senado de los Estados Unidos, y designada por el Presidente Obama para ocupar el cargo de Subsecretario de Comercio para Observación y Predicción Ambiental y Administrador Adjunto de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica.1​ Fue nombrada Subsecretaria de Comercio interino de Océanos y Atmósfera y Administrador interino de la NOAA el 28 de febrero de 2013,8​ y fue confirmada por el Senado como Subsecretaria de Comercio para Océanos y Atmósfera y Administrador del NOAA el 6 de marzo de 2014.1

Laurasia

Laurasia

Mapa de Pangea con Laurasia y Gondwana.

Continente histórico

Formado: 1,071 Mya (Proto-Laurasia) 253 Mya

Tipo: Supercontinente geológico

Hoy parte de

Continentes más pequeños

Placa tectonica

Laurasia (/ l ɪ r eɪ ʒ -, – ʃ i ə /)[1] fue el más septentrional de los dos supercontinentes (el otro es Gondwana) que formó parte del supercontinente Pangea hace alrededor de 335 a 175 millones de años (Mya). Se separó de Gondwana 215 a 175 Mya (comenzando en el último período Triásico) durante la desintegración de Pangea, derivando más al norte después de la división.

El nombre combina los nombres de Laurentia, el nombre dado al cratón norteamericano, y Eurasia. Según lo sugerido por el nombre geológico, Laurasia incluyó la mayoría de las masas de tierra que conforman los continentes actuales del hemisferio norte, principalmente Laurentia, Baltica, Siberia, Kazakhstania, y los cratones del norte de China y este de China.

Aunque Laurasia es conocido como un fenómeno Mesozoico, hoy se cree que los mismos continentes que formaron la Laurasia posterior también existieron como un supercontinente coherente después de la desintegración de Rodinia hace unos 750 millones de años. Para evitar confusiones con el continente mesozoico, esto se conoce como Proto-Laurasia. Se cree que Laurasia no se rompió antes de que se recombinara con los continentes del sur para formar el supercontinente precámbrico tardío de Pannotia, que permaneció hasta el Cámbrico temprano. Laurasia se ensambló, luego se rompió, debido a las acciones de la tectónica de placas, la deriva continental y la expansión del lecho marino.

Desintegración y reforma

Durante el Cámbrico, Laurasia se localizó en gran parte en latitudes ecuatoriales y comenzó a separarse, con el norte de China y Siberia a la deriva en latitudes más al norte que las ocupadas por continentes durante los 500 millones de años anteriores. Por el Devónico, el norte de China se encontraba cerca del Círculo Polar Ártico y se mantuvo como la tierra más septentrional del mundo durante la Era de Hielo del Carbonífero hace entre 300 y 280 millones de años. Sin embargo, no existe evidencia para ninguna glaciación carbonífera a gran escala de los continentes del norte. En este período frío, se reincorporó a Laurentia y Baltica con la formación de las Montañas Apalaches y grandes depósitos de carbón, que se encuentran en regiones como Virginia Occidental, Gran Bretaña y Alemania.

Siberia se desplazó hacia el sur y se unió a Kazakhstania, una pequeña región continental que se cree que fue creada durante el Silúrico por extensos volcanismos. Cuando estos dos continentes se unieron, Laurasia estaba casi reformada, y para el comienzo del Triásico, el cratón de China Oriental se había unido a la reconstrucción de Laurasia cuando colisionó con Gondwana para formar Pangea. El norte de China se convirtió, a medida que se desplazaba hacia el sur desde las latitudes cercanas al Ártico, el último continente en unirse a Pangea.

División final

Hace unos 200 millones de años, Pangea comenzó a romperse. Entre el este de América del Norte y el noroeste de África, se formó un nuevo océano: el Océano Atlántico, aunque Groenlandia (unida a América del Norte) y Europa todavía estaban unidas. La separación de Europa y Groenlandia ocurrió hace unos 55 millones de años (al final del Paleoceno). Laurasia finalmente se divide en los continentes, y luego recibe el nombre de Laurentia (ahora Norteamérica) y Eurasia (excluido el subcontinente indio).

Diversas representaciones del supercontinente Laurasia

Representación “animalística” de Gondwana y Laurasia.

 

 

 

 

 

 

 

 

Evolución desde Pangea a la actualidad.

Paseo espacial autónomo

Paseo espacial autónomo

La imagen de su desplazamiento por el exterior del trasbordador Challenger sin ninguna atadura es una de las más icónicas de la era espacial

Fallece Bruce McCandless, el primer astronauta que flotó libre en el espacio.

La imagen todavía resulta escalofriante. Flotando en el espacio, sin ninguna atadura, McCandless debía de contemplar los casi cien metros que le separaban de la nave Challenger como la distancia que existe entre la soledad más absoluta y la seguridad, relativa, del abrigo del transbordador. Nunca un ser humano se había aventurado tan lejos de esa forma.

McCandless fue retratado por sus compañeros de la misión STS-41-B, la cuarta del transbordador Challenger, en 1984. En la imagen, tomada cuando se encontraba a más de 97 metros de distancia del Challenger (la longitud de un campo de fútbol), se le puede ver haciendo historia al desplazarse a más de 100 metros de la lanzadera con una mochila autopropulsada llamada Unidad de Maniobra Tripulada (MMU).

La mochila, que pesaba 140 kilos, se acoplaba al traje espacial y se propulsaba mediante nitrógeno expulsado a alta presión. Tenía unos controles con los que el astronauta podía desplazarse sin ataduras. La mochila fue utilizada tan solo en tres misiones del transbordador durante 1984, especialmente para reparar satélites, y después fue retirada por ser demasiado peligrosa.

McCandless recordó aquel primer viaje libre espacial como un «sentimiento maravilloso» y el New York Times calificó su vuelo sin ataduras como «un espectáculo de valentía y belleza» en su portada.

«Recuerdo que mi mujer», escribió el astronauta en 2015, «se encontraba en el control de misión y había un poco de temor en el ambiente. Quería soltar una frase parecida a la de Neil Armstrong cuando pisó la Luna. Dije algo así como ‘Es posible que hubiera sido un pequeño paso para Neil, pero es un salto de narices para mí‘. Eso alivió la tensión».

23/12/2017 El astronauta retirado Bruce McCandless, cuya imagen flotando en el espacio ha pasado a la posteridad, falleció el pasado jueves en California a los 80 años de edad. La NASA confirmó su muerte a última hora de este viernes, aunque no detalló las causas.

McCandless había ejercido en 1969 como comunicador de control en Houston de la misión del Apollo 11, que culminó con el paseo lunar protagonizado por Neil Armstrong y Buzz Aldrin.

Seis años después de flotar en el espacio sin ataduras, McCandless participó en la misión para desplegar el telescopio espacial Hubble.

Nacido en Boston, fue al instituto en Long Beach (California), y posteriormente se graduó de la Academia Naval en Annápolis (Maryland), donde fue compañero de clase del actual senador John McCain.

«La icónica foto de Bruce flotando sin esfuerzo en el espacio inspiró a generaciones de estadounidense a creer que no hay límite al potencial humano», afirmó McCain en un comunicado.

«Nuestros pensamientos y oraciones van en estos momentos dirigidos a la figura de Bruce, quien siempre será recordado por esta icónica foto», ha declarado el administrador en funciones de la NASA, Robert Lightfoot.

Esta foto del 7 de febrero de 1984, puesta a disposición por la NASA, muestra al astronauta Bruce McCandless II participando en una caminata espacial a pocos metros de la cabina del transbordador espacial Challenger, utilizando una unidad de maniobras tripuladas propulsada por nitrógeno. AP

Bruce McCandless II

Información personal

Nacimiento: 8 de junio de 1937 ; Boston, Estados Unidos

Fallecimiento: 21 de diciembre de 2017 (80 años)

Bruce McCandless II (Boston, Massachusetts; 8 de junio de 193721 de diciembre de 2017)1​ fue un aviador naval de la Marina de los Estados Unidos y astronauta de la NASA.

Durante la primera de sus dos misiones en el transbordador espacial, el 7 de febrero de 1984 McCandless realizó con 46 años la primera caminata espacial (o actividad extravehicular, denominada EVA en inglés) sin ataduras con su nave de la Historia (7 de febrero de 1984), un vuelo libre utilizando una Unidad de Maniobra Tripulada. Participó en las misiones STS-41-B y STS-31 habiendo pasado un tiempo en el espacio de 13d 00h 31m.

DATOS PERSONALES: Nació el 8 de junio de 1937, en Boston, Massachusetts. Casado con la ex Bernice Doyle de Rahway, Nueva Jersey. Ellos tienen dos hijos adultos. Los intereses recreativos incluyen la electrónica, la fotografía, el buceo y el vuelo. Él también disfruta del esquí de fondo.

EDUCACIÓN: graduado de Woodrow Wilson Senior High School, Long Beach, California; recibió una licenciatura en ciencias de la Academia Naval de los Estados Unidos en 1958, una maestría en ciencias en Ingeniería Eléctrica de la Universidad de Stanford en 1965, y una maestría en Administración de Empresas de la Universidad de Houston en Clear Lake en 1987.

ORGANIZACIONES: Miembro de la Asociación de Antiguos Alumnos de la Academia Naval de EE. UU. (Clase de 1958), del Instituto Naval de EE. UU., Del Instituto de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos, del Instituto Americano de Aeronáutica y Astronáutica, de la Asociación de Maquinaria de Computación y de la Sociedad Nacional de Audubon. miembro de la American Astronautical Society, y ex presidente de la Houston Audubon Society.

HONORES ESPECIALES: Legion of Merit (1988); Medalla al Servicio Distinguido del Departamento de Defensa (1985); Medalla del Servicio Nacional de Defensa; Medalla del Servicio Expedicionario Americano; Medalla de servicio excepcional de la NASA (1974); Premio de la Sociedad Astronáutica Americana Victor A. Prather (1975 y 1985); NASA Space Flight Medal (1984); Medalla de Logros Excepcionales de Ingeniería de la NASA (1985); National Aeronautic Association Collier Trophy (1985); Smithsonian Institution National Air and Space Museum Trophy (1985). Galardonado con una patente para el diseño de un sistema de anclaje de herramientas que se utiliza actualmente durante las “caminatas espaciales” de Shuttle.

EXPERIENCIA: McCandless se graduó segundo en una clase de 899 de Annapolis y posteriormente recibió entrenamiento de vuelo del Comando Naval de Entrenamiento de Aviación en las bases en Pensacola, Florida, y Kingsville, Texas. Fue designado aviador naval en marzo de 1960 y se dirigió a Cayo Hueso, Florida, para el sistema de armas y entrenamiento de aterrizaje de portaaviones en el F-6A Skyray. Fue asignado al Escuadrón de Cazas 102 (VF-102) de diciembre de 1960 a febrero de 1964, pilotando el Skyray y el F-4B Phantom II, y vio el servicio a bordo del USS FORRESTAL (CVA-59) y USS ENTERPRISE (CVA ( N) -65), incluida la participación de este último en el bloqueo cubano. Durante tres meses a principios de 1964, fue instructor de vuelo instrumental en el Escuadrón de Ataque 43 (VA-43) en la Estación Aérea Naval, Campo Apollo Soucek, Oceana, Virginia, y luego informó a la Unidad del Cuerpo de Entrenamiento del Oficial de la Reserva Naval en la Universidad de Stanford para estudios de posgrado en ingeniería eléctrica.

Ha adquirido dominio de vuelo en el T-33B Shootingstar, T-38A Talon, F-4B Phantom II, F-6A Skyray, F-11 Tiger, TF-9J Cougar, T-1 Seastar y T-34B Mentor, y el helicóptero Bell 47G. Ha registrado más de 5,200 horas de vuelo – 5,000 horas en aviones a reacción.

EXPERIENCIA DE LA NASA: McCandless es uno de los 19 astronautas seleccionados por la NASA en abril de 1966. Fue miembro del equipo de soporte de astronautas de la misión Apollo 14 y piloto de respaldo de la primera misión tripulada de Skylab (SL-1 / SL-2) . Fue co-investigador en el experimento de la unidad de maniobra de astronautas M-509 que se realizó en el Programa Skylab, y colaboró ​​en el desarrollo de la Unidad de Maniobra Mantenida (MMU) utilizada durante Shuttle EVA. Ha sido responsable de las entradas de la tripulación para el desarrollo de hardware y procedimientos para el Inertial Upper Stage (IUS), el Telescopio espacial, la Solar Maximum Repair Mission y el Programa de la estación espacial.

Veterano de dos vuelos espaciales, McCandless ha registrado más de 312 horas en el espacio, incluidas 4 horas de vuelo de MMU. Voló como especialista de misiones en STS-41B (del 3 al 11 de febrero de 1984) y STS-31 (del 24 al 29 de abril de 1990).

EXPERIENCIA DE VUELO ESPACIAL: STS-41B Challenger, lanzado desde el Centro Espacial Kennedy, Florida, el 3 de febrero de 1984. El equipo en esta décima Misión de Transbordador Espacial incluyó al Sr. Vance Brand (comandante de la nave espacial), Comandante Robert L. Gibson, USN, (piloto), y compañeros especialistas de la misión, el Dr. Ronald E. McNair, y el teniente coronel Robert L. Stewart, EE. UU. El vuelo logró el despliegue adecuado de dos satélites de comunicaciones Hughes de la serie 376. Los sensores de encuentro y los programas de computadora fueron probados en vuelo por primera vez. Esta misión marcó el primer checkout de la Unidad de Maniobras Mantenidas (MMU) y la Restricción de los Pies Manipuladores (MFR). McCandless realizó el primer vuelo libre, sin ataduras, en cada una de las dos MMU llevadas a bordo y se alteró con Stewart en las actividades que constituyen dos espectaculares actividades extravehiculares (EVAS). El transbordador alemán Pallet Satellite (SPAS), el Remote Manipulator System (RMS), seis Special Getaway y los experimentos de procesamiento de materiales se incluyeron en la misión. El vuelo orbital de 8 días del Challenger (OV-099) culminó en el primer aterrizaje en la pista del Centro Espacial Kennedy el 11 de febrero de 1984. Con la finalización de este vuelo, McCandless registró 191 horas en el espacio (incluidas 4 horas de vuelo MMU hora).

STS-31 Discovery, lanzado el 24 de abril de 1990, desde el Centro Espacial Kennedy en Florida. La tripulación a bordo del transbordador espacial Discovery incluyó al coronel Loren J. Shriver, USAF (comandante de la nave espacial), el coronel Charles F. Bolden, USMC (piloto) y el Dr. Dr. Steven A Hawley, y la Dra. Kathryn D. Sullivan (especialistas de misión). Durante esta misión de 5 días, el equipo desplegó el Telescopio Espacial Hubble y condujo una variedad de experimentos en el medio que involucraron el estudio del crecimiento de proteínas cristalinas, el procesamiento de la membrana de polímero y los efectos de la ingravidez y los campos magnéticos en un arco de iones. También operaron una variedad de cámaras, incluyendo tanto la cámara IMAX en la cabina como la cámara de la bahía de carga, para las observaciones de la Tierra desde su altitud récord de 380 millas. Después de 76 órbitas de la tierra en 121 horas, el STS-31 Discovery aterrizó en la Base de la Fuerza Aérea Edwards, California, el 29 de abril de 1990.

Esta foto del 7 de febrero de 1984, lanzada por la NASA, muestra al astronauta Bruce McCandless II asomándose al espacio mientras sus pies están anclados en un sistema de sujeción móvil conectado al sistema de manipulación remota. Cortesía de NASA

Gondwana

Gondwana

Una interpretación de la fase temprana de separación de Laurasia y Gondwana

Gondwana es el nombre que se le da a un antiguo bloque continental meridional que resultó de la partición en dos de Pangea, cuando se extendió el mar de Tethys hacia el oeste, lo que lo separó de Laurasia. Durante el Jurásico y el Cretácico Gondwana fue escindiéndose, y dio lugar a las masas continentales de las actuales Sudamérica, África, Australia, Zealandia, el Indostán, la isla de Madagascar y la Antártida, un proceso de partición y alejamiento que continuó durante el Cenozoico y permanece activo.

Historia

Fue nombrado por primera vez en 1861 por el geólogo austríaco Eduard Suess (1831-1914) por el nombre de una región del norte de la India, Gond (gondwana, en sánscrito, bosque de Gond), en la que se habían descrito secuencias sedimentarias del PérmicoTriásico que él pensó serían de un viejo continente. Luego Suess escribió sobre él llamándolo Gondwána-Land en su libro Las caras de la Tierra (Das Antlitz der Erde), publicado entre 1883 y 1901.

Historia geológica

En el Pérmico (hace más de 250 millones de años) todas las masas continentales estaban reunidas en un único supercontinente, al que llamamos ahora Pangea. Hace unos 200 millones de años ésta se había partido en dos supercontinentes: Laurasia, al norte y Gondwana, al sur. Los separaba entonces el océano Tethys, que se extendía desde el sur de Asia, por la actual cuenca del Mediterráneo, hasta la actual América, separada en dos por sus aguas, pues Norteamérica estaba unida a Europa y Sudamérica a África. Anteriormente el continente de Gondwana se fue subdividiendo en grandes bloques separados por fracturas de la litosfera continental. Esos fragmentos, continentes o subcontinentes, se dispersaron en un proceso que aún continúa, complementado ahora con una convergencia general de los continentes del norte (laurásicos) contra los del sur (gondwánicos). De este modo, Gondwana habría empujado contra los continentes boreales el geosinclinal mediterráneo, plegando los alpes euroasiáticos y provocando en ellos grandes corrimientos hacia el norte. A la vez, Norteamérica y Sudamérica confluyeron dando lugar al levantamiento del istmo de Panamá.

África, que constituía el núcleo central de Gondwana, sigue fragmentándose. En un pasado relativamente reciente se separó de Arabia, que sigue alejándose hacia el noroeste al ir ensanchándose el rift del mar Rojo. Ahora, aunque muy lentamente, se está desgajando otro fragmento del continente africano, al este del llamado Gran Valle del Rift, que es una enorme fractura que parte en la desembocadura del río Zambeze y va hasta el mar Rojo, jalonada por los lagos Malawi, Tanganica, Victoria y Rodolfo. También se desplaza muy lentamente hacia el Mediterráneo y acabará incrustándose contra los países del sur de Europa.

Reinos fitogeográficos

Engler dividió la flora mundial en 6 reinos fitogeográficos según sus endemismos de familias de plantas.

En el Cretácico se originaron las angiospermas y se diversificaron rápidamente, originándose muchos de los linajes actualmente en la categoría de familia. Hacia el norte se observan Norteamérica y Europa, hacia el sur la Antártida, Australia y la India (aquí amplificados por la deformación del mapamundi), y en el centro los continentes de África y Sudamérica.

Es importante biogeográficamente, pues explica la distribución geográfica de muchos grupos taxonómicos, que surgieron allí, y se diseminaron luego algunos a los continentes septentrionales derivados de Laurasia; o que, nacidos en Laurasia, han irrumpido luego en los continentes meridionales, como en el caso de los mamíferos placentarios que pasaron a Sudamérica y sirvió de protección a algunas especies como las placerias y koolasuchus, o la distribución actual de la flora antártica.

El supercontinente de Gondwana después de la fusión de Gondwana Occidental y Oriental como resultado de la formación del orógeno de África Oriental. Kroner y Romer (2013) postularon recientemente una prolongación continental en el norte llamada Armorican Spur, que corresponde en gran parte a la parte occidental de los Variscides europeos. El espolón armoricano podría haberse localizado mucho más al oeste, cerca del cinturón amazónico (“ubicación alternativa del espolón armoricano”). El material de dispersión del súper abanico de Gondwana del Paleozoico temprano del orógeno de África Oriental se muestra después de Meinhold et al. (2013). Encircled 1, 2 y 3 se relacionan con los modelos discutidos en el texto. Las flechas rojas muestran la dirección de la dispersión paleozoica de los terrenos derivados de Gondwana._____

Zelandia abre interrogantes sobre la división del continente Gondwana EFE 24.02.2017 – 18:44h

Tras el hallazgo de Zelandia, el verdadero reto es poder desentrañar las claves de la separación de Gondwana.

A diferencia de Zelandia, los otros restos de Gondwana, como los hallados en Mauricio, se fragmentaron bajo el Índico.

Flores

Flores

Plantas y flores espaciales (Historia)

En el año 1982, la tripulación de la estación espacial soviética Saliut 7 consiguió hacer crecer un poco de Arabidopsis, convirtiéndose así en las primeras plantas en florecer y producir semillas en el espacio. Tuvieron una vida de 40 días.15

¿Cuál fue la primera flor en el espacio?

Hace unos días el comandante de la Expedición 46 de la estación espacial internacional (ISS), (La Expedición 46 empezó tras el regreso de la Soyuz TMA-17M en noviembre de 2015 y finalizó con el regreso de la Soyuz TMA-18M el 1 de marzo de 2016. La tripulación de la Soyuz TMA-19M fue transferida entonces a la Expedición 47.12​) Scott Kelly, publicó un tuit en el que se veía la que supuestamente era la primera flor en el espacio (un ejemplar del género zinnia, por cierto). Cualquiera que sepa un poco sobre la carrera espacial sabe que esto es falso, porque ha habido decenas de experimentos con angiospermas en órbita a lo largo de las últimas décadas. Así que, como es lógico, prácticamente de forma inmediata la prensa rusa se hizo eco de la noticia y muchos medios respondieron indignados que, efectivamente, la pobre flor de Kelly no era la primera en el espacio. Ese honor le corresponde a las flores de la especie Arabidopsis thaliana plantadas por los cosmonautas Anatoli Berezovói y Valentín Lébedev en agosto de 1982 a bordo de la estación Salyut 7 (Javier Peláez lo cuenta muy bien en este artículo). Pero lo gracioso del caso es que la flor de Kelly no es que no sea la primera flor en el espacio, ¡es que ni siquiera es la primera flor en la ISS!

En la Salyut 7 Savítskaia fue recibida con unas flores de plantas arabidopsis por ser mujer, pero lo más humillante fue que sus compañeros le dieron un delantal para la primera comida en órbita a bordo de la estación. La ‘broma’, que obviamente no sentó nada bien a Savítskaia, era doblemente denigrante porque en la cultura rusa regalar un delantal a una mujer joven significa que se valoran más sus dotes de ama de casa que su aspecto físico. Para colmo, sus colegas se quejaron de que Savítskaia pasaba demasiado tiempo en la Soyuz ‘arreglándose y poniéndose guapa’. Savítskaia se llevaba especialmente mal con Serebrov, aunque tampoco despertó las simpatías de Berezovoy. Pero finalmente logró hacerse valer gracias a su duro carácter e indudable valía.

La flor de la disputa. La zinnia plantada en la ISS en el experimento Veggie (NASA/Scott Kelly).

En una fecha tan reciente como junio de 2012, el astronauta de la NASA Don Pettit también plantó flores de varias especies -incluyendo girasoles, calabacines y brócoli-, que germinaron y florecieron en la estación espacial. Uno puede entender que Scott Kelly no recuerde antiguos experimentos a bordo de estaciones espaciales soviéticas por muy comandante de la ISS que sea. Ahora bien, que se olvide de experimentos similares realizados por compañeros de la NASA en la misma estación es más extraño. Pero todo tiene su explicación.

Don Pettit en la ISS con su flor espacial (un girasol) (NASA/Don Pettit). Otra imagen de la flor espacial de Don Pettit (NASA).

La razón del despiste de Kelly -que, además de astronauta es humano y tiene derecho a equivocarse, el pobre- es que el experimento de Pettit no fue oficial, sino que se trató de una iniciativa personal. Él mismo llevó las semillas y la tierra en unas bolsas de plástico y cuidó de las plantas durante su tiempo libre. Como resultado, es de imaginar que no existe documentación oficial detallada sobre las flores de Pettit.

Invernadero improvisado de Don Pettit en 2012 con varias plantas en el segmento ruso de la ISS (NASA/Don Pettit).

Otros han defendido a Kelly esgrimiendo que las flores de la Salyut 7 no crecieron en órbita, pero este dato es incorrecto. Berezovói y Lébedev cultivaron e hicieron crecer las plantas de arabidopsis en el experimento Fiton 3 de la Salyut 7. Este pequeño invernadero había sido diseñado por el Instituto de Biología Molecular de Ucrania y en realidad era la tercera vez que viajaba al espacio. Los otros dos Fiton habían despegado previamente a bordo de las estaciones Salyut 4 y Salyut 6 con varias plantas, además de arabidopsis, una especie vegetal que fue elegida por tratarse de unas hierbas salvajes muy resistentes y por su ciclo vital de tan solo 40 días.

Anatoli Berezovói (izquierda) y Valentín Lébedev antes de despegar hacia la Salyut 7 a bordo de la Soyuz T-5.

Para evitar los problemas de anteriores misiones, en la Salyut 7 las plantas recibieron luz artificial las 24 horas del día y se incluyó una bomba de agua y ventiladores para hacer circular constantemente el aire (en ingravidez el dióxido de carbono se acumula en una zona si no hay circulación del aire). Finalmente florecieron solo tres flores (lamentablemente no he podido encontrar ninguna foto de ellas en órbita, lo que no es de extrañar teniendo en cuenta que las flores de arabidopsis son muy poco fotogénicas) que produjeron hasta doscientas semillas, de las cuales aproximadamente la mitad resultó viable. El Fiton 3 formaba parte de la instalación botánica de la Salyut 7 denominada Svetblok M (‘bloque de luz’) en la que los cosmonautas también cultivaron guisantes, naranjas, tomates, rábanos y pepinos, entre otros vegetales (solo crecieron de forma satisfactoria los guisantes y los pepinos).

Estación espacial soviética Salyut 7 (abajo se ve la Soyuz T-14 acoplada).

Ver: http://www.esascosas.com/07-salyut-7/

Pero, ¿fueron las flores de la Salyut 7 realmente las primeras en florecer en órbita? Pues no, aunque es difícil saber a ciencia cierta cuál fue exactamente la primera teniendo en cuenta el enorme número de experimentos espaciales con plantas. Como hemos visto, las arabidopsis también volaron a bordo de las estaciones Salyut 4 y Salyut 6, además de la Mir. Las fuentes no son concluyentes, pero parece que las arabidopsis de la Salyut 6 sí que llegaron a florecer a finales de los años 70. Eso sí, no experimentaron todo su ciclo vital en órbita. De hecho, ya en diciembre de 1974 la Soyuz 16 llevó en su interior varias plantas de arabidopsis como parte de un experimento biológico, aunque no hubo flores. No obstante, todas las pistas apuntan a que fue en la misión Kosmos 110, una misión no tripulada que voló en 1966 con los perros Veterok y Ugolyok en su interior, cuando aparecieron las primeras flores en órbita. Entre la varias especies vegetales que llevaba esta nave se hallaban algunos ejemplares que florecieron durante la misión (al igual que en otras posteriores como la Kosmos 1129/Bión 5 de 1979).

Eso sí, todas estas flores fueron las primeras que florecieron en el espacio, pero no las primeras a secas. Además de estos experimentos para hacer crecer plantas en órbita, varias misiones soviéticas llevaron al espacio flores ya maduras. Los experimentos más famosos fueron los de la serie Malajit (‘malaquita’). En la Salyut 6, los cosmonautas Leonid Popov y Valeri Ryumin consiguieron mantener con vida varias orquídeas del experimento Malajit 2 en 1980, aunque no produjeron semillas. Aparentemente, algunas de las plantas se recuperaron una vez en tierra a pesar de que los cosmonautas las daban por perdidas. También en esta estación se logró hacer crecer varios tulipanes dentro del marco del experimento Vazon (‘jarro’).

Experimento Malajit 2 de la Salyut 6 con flores. El cosmonauta Yuri Romanenko inspecciona un pequeño invernadero orbital.

Los experimentos con plantas en el espacio se remontan en realidad a los inicios de la carrera espacial y ya en las misiones Vostok viajaron semillas de varias especies. A largo plazo los principales factores que afectan al crecimiento de una planta en el espacio son la falta de gravedad y la radiación. Curiosamente, los experimentos demuestran que pequeñas dosis de radiación parecen fomentar el crecimiento de algunas especies, pero dosis más elevadas (por encima de 500 milirads) son, lógicamente, perjudiciales. En general, se ha demostrado que las plantas pueden crecer en órbita (hay mucha variabilidad entre las especies), pero no sin cuidados extremos.

El reciente experimento con flores zinnia de Kelly se ha llevado a cabo precisamente debido a la dificultad que presentan estas plantas para ser cultivadas, ya que son muy sensibles a las condiciones lumínicas y su ciclo de crecimiento alcanza los 80 días. Es decir, aunque las flores de Kelly no sean las primeras en el espacio, ni mucho menos, el experimento tiene bastante mérito. Estas flores han crecido en la instalación Veggie situada en el laboratorio Destiny de la ISS. En junio de 2014 Veggie produjo su primera ‘cosecha’ de lechugas y el año pasado la tripulación de la ISS fue autorizada a comer algunas de las plantas que cultivaron. Los datos de Veggie confirman los resultados de varios experimentos similares a bordo de la estación Mir (donde, por cierto, los cosmonautas también llegaron a comer varias plantas cultivadas por ellos mismos) y demuestran que los astronautas del futuro van a tener que trabajar muy duro si quieren cultivar su comida en el espacio.

El astronauta Steve Swanson de la Expedición 39 con el experimento Veggie iluminado (NASA). Scott Kelly (derecha) y Kjell Lindgren comen los frutos de su trabajo (NASA).

Referencias:

  • http://nasawatch.com/archives/2016/01/no-nasa-these-a.html
  • https://blogs.nasa.gov/letters/2012/06/29/post_1340814534271/
  • http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/11539644
  • https://www.washingtonpost.com/news/speaking-of-science/wp/2016/01/19/nasa-astronauts-just-made-flowers-bloom-in-space-but-theyre-not-actually-the-first/
  • http://www.nasa.gov/mission_pages/station/research/news/flowers

Un jardín en el espacio

Desde el pasado 27 de marzo, el comandante Scott Kelly, de la NASA se encuentra en la Estación Espacial Internacional.

Se incorporó como parte de una misión de un año de duración en la estación, de la cual es comandante en estos momentos. Y en la misma que ahora acaba de nacer la primera flor. Y es que Kelly dirige la ejecución in situ del proyecto VEGGIE, que pretende esclarecer qué le pasa a las plantas en el espacio. Desde que comenzó, los astronautas han conseguido hacer crecer lechuga, aunque no sin algunos problemas que ha debido ajustar con el tiempo. La siguiente prueba eran las zinnias (Zinnia), plantas cuyos cuidados se parecen a los de la tomatera y que sirve como un nuevo desafío para los astronautas, quienes han de aprender a cultivar su propio jardín en el espacio.

Y aunque las zinnias también han dado problemas, la primera flor espacial ha nacido. Por desgracia, también creció moho y la planta se vio afectada por varios problemas. El propio Kelly se ha convertido, finalmente, en el “jardinero” de la ISS, decidiendo por su cuenta en más de una ocasión. Junto a los consejos de la NASA, finalmente, se han salvado varias zinnias, mientras que las que han muerto han sido congeladas para su estudio en tierra. Las zinnias han sido escogidas por ser una planta con necesidades específicas, ni demasiado difícil ni tampoco excesivamente sencilla de cultivar. Con un periodo de cosecha de entre 60 y 80 días, la zinnia requiere de tiempo y atención, lo que supone un entrenamiento en jardinería muy necesario para los astronautas del futuro.

Los astronautas de la Estación Espacial Internacional ya lograron cultivar lechugas el pasado mes de agosto (y comérselas en ensalada). También en este caso fue complicado que crecieran, con un primer lote que murió por falta de agua.

https://danielmarin.naukas.com/2017/02/11/las-cosmonautas-olvidadas/

Arabidopsis es un género de plantas herbáceas de la familia de las brasicáceas, que han sido objeto de intenso estudio en época reciente como modelos para la investigación fitobiológica. Arabidopsis thaliana fue la primera planta cuyo genoma se secuenció por completo, una tarea completada en diciembre del 2000 por el proyecto AGI (Iniciativa para el Genoma de la Arabidopsis).

Cimmeria

Cimmeria (continente)

Distribución de los continentes hace 249 millones de años en el límite PérmicoTriásico. El alargado continente de Cimmeria se desgaja de Pangea y comienza a desplazarse hacia el norte.

Cimmeria es un antiguo continente que antes de separarse formaba parte del supercontinente Pangea. Fue una placa tectónica que comprendía partes de los actuales territorios de Turquía, Irán, Afganistán, Tíbet y de las regiones de Indochina y Malasia. Pangea era un supercontinente con forma de “C” mirando hacia el este y dentro de la “C” estaba el océano Paleo-Tetis. Dos microcontinentes, que forman parte de la actual China, radicaban en el noreste bordeando el océano Paleo-Tetis. Hace alrededor de 300 millones de años, se inició una dislocación en el este que separó un delgado arco de la parte interior del brazo sur de Pangea. Este nuevo microcontinente se denomina Cimmeria y conforme se separaba, un nuevo océano comenzaba a formarse tras él, Tetis. Conforme el océano Tetis se fue ampliando, Cimmeria fue desplazándose al norte hacia Laurasia y el océano Paleo-Tetis disminuyendo.

Distribución de los continentes hace 280 millones de años, durante el Pérmico. El continente de Cimmeria se desplaza hacia el norte reemplazando el océano Paleo-Tetis por Tetis.

Según Cimmeria se desplazaba al norte, el océano Paleo-Tetis era subducido bajo Laurasia y Cimmeria, hasta que ésta finalmente colisionó con Laurasia, primero en su extremo occidental. Hace 220 millones de años Paleo-Tetis comenzó a desaparecer del todo, cerrándose de oeste a este. La colisión de los continentes alzó montañas a lo largo de la sutura, en lo que se denomina la Orogenia Cimmeriana. En su extremo oriental, Cimmeria colisionó con los microcontinentes chinos hace cerca de 200 millones años y la orogenia Cimmeriana se extendió a lo largo de toda la frontera norte de la placa. La mayoría del océano Paleo-Tetis desapareció hace 150 millones de años. Cuando el límite norte de la placa de la China colisionó con el este de Laurasia se alzaron nuevas montañas. Después de que Cimmeria colisionara con Laurasia hace alrededor de 200 millones de años (Jurásico inferior), la fosa oceánica formada al sur de Cimmeria, comenzó la subducción del océano Tetis y se crearon la arcos insulares y nuevas cadenas montañosas en la zona.

Cimmeria choca con Laurasia hace alrededor de 200-190 millones de años. Su colisión alzó montañas y la fosa oceánica de Tetis hace alrededor de 100 millones de años (Cretácico medio).

La fosa oceánica de Tetis eventualmente se extendió hacia el oeste para dividir Pangea en dos, y el creciente océano Atlántico separa el norte de Pangea, el supercontinente Laurasia, del sur, el supercontinente Gondwana. Hace alrededor de 150 millones de años, Gondwana también comenzó a fragmentarse. Los continentes de África-Arabia e India comenzaron la deriva hacia el norte con dirección a Laurasia, incluyendo Cimmeria, ahora la costa sur. África-Arabia y la India finalmente colisionaron con Asia hace 30 millones de años, reuniendo Cimmeria con sus antiguos vecinos de Gondwana y plegando el antiguo continente para formar los Alpes, Cáucaso, Zagros, Hindu Kush e Himalaya, en la denominada Orogenia Alpina.